donostia - La crisis del diésel unido a la ralentización de los pedidos en toda Europa en los últimos meses amenazan cada vez con más fuerza al futuro de la planta de Mercedes en Gasteiz, donde la incertidumbre se está cebando con el empleo. 800 eventuales han perdido su puesto de trabajo en el último semestre como consecuencia de la “injusta criminalización” a la que está siendo sometido el sector del diésel, denunciaron ayer representantes de UGT.

Los sindicalistas acudieron de forma voluntaria a la comisión de Desarrollo Económico y Equilibrio Territorial de las Juntas Generales con el objetivo de alertar del peligro que se avecina en la fábrica gasteiztarra y visibilizar la “urgente necesidad” de impulsar medidas.

A juicio de UGT, tres serían las pautas que el diésel necesita en estos momentos para sofocar los ánimos y, especialmente, enderezar un rumbo que amenaza ruina. De un lado, la constitución de una mesa de negociación estatal que reúna a todas las partes implicadas (Gobierno español, patronales y sindicatos) con la idea de definir una hoja de ruta coherente hacia la transición energética; en segundo lugar, un alegato en favor de la descriminalización del diésel; y en tercer lugar, una apuesta decidida a modo de plan Prever adecuado a las necesidades de la sociedad y los mercados.

Sierra advirtió de que las previsiones de Alemania apuntan a que el coche eléctrico “destruirá uno de cada cuatro puestos de trabajo allí, lo que significaría una pérdida de unas 200.000 personas”, indicó.

En este contexto, y trazando una progresión similar respecto a la actividad actual en la planta de Mercedes, llegado el caso peligrarían más de 5.000 puestos de trabajo entre directos e indirectos. UGT consideró que si la producción baja de 152.000 unidades a 142.000, desaparecería el tercer turno y un tercio de la plantilla.

800

trabajadores eventuales son el número que, según la información que dio a conocer ayer UGT, han abandonado la planta de Mercedes en Gasteiz en el último semestre. El sindicato atribuyó esta pérdida de puestos de trabajo a la crisis del diésel.