El salario promedio anual femenino en Navarra en 2019 fue de 23.728,82 euros, lo que representa el 77,6% del salario masculino, 30.564,90 euros, porcentaje inferior al observado en España (80,5%). La diferencia salarial entre hombres y mujeres disminuye al comparar la ganancia-hora, al situarse en el 87,9%.

Según la encuesta de estructura salarial elaborada por el Instituto de Estadística de Navarra (Nastat) correspondiente a 2019, el 20,6% de las mujeres navarras tenían ingresos salariales menores o iguales que el Salario Mínimo Interprofesional, frente al 8,2% de los hombres.

Si se tienen en cuenta los salarios más elevados, el 4,6% de los hombres presentaron unos salarios cinco veces superiores al SMI, frente al 1,5% de las mujeres.

Además, la proporción de personas trabajadoras con ganancia baja (personas asalariadas cuya ganancia por hora está por debajo de los 2/3 de la ganancia mediana) fue del 14,6% y, de estas personas trabajadoras, el 61,4% eran mujeres.

Según el Nastat, son muchos los factores que influyen sobre las diferencias salariales entre hombres y mujeres: el tipo de contrato, el tipo de jornada y las diferentes ocupaciones, entre otros.

Así, hay más mujeres con jornada a tiempo parcial (del 21,7% de las personas trabajadoras que tienen esta jornada, 7,1% son hombres y 14,6% mujeres), además hay menos mujeres trabajando en el sector con mayor remuneración ya que el 25,8% de las personas trabajadoras en la industria son mujeres.

En los datos generales de Navarra, el salario bruto medio anual en 2019 se situó en 27.493,93 euros por persona trabajadora, un 4,3% mayor que el año anterior.

El salario mediano en Navarra1 se situó en 24.978,02 euros, un 9,2% inferior al salario medio, y el salario más frecuente o modal fue de 23.861,16 euros. La diferencia entre el salario medio y el mediano se explica porque una característica de las funciones de distribución salarial es que figuran muchas más personas trabajadoras en los valores bajos que en los sueldos más elevados, aunque la distribución salarial es más uniforme que la de España, donde el salario mediano es un 16,6% inferior al salario medio anual, reflejando una menor desigualdad.

El número de mujeres que ganaron menos de 17.500 euros fue mayor que el número de hombres. A partir de esta cifra, el número de mujeres que percibió cada nivel salarial siempre fue inferior al de hombres con ese mismo salario.

El salario bruto medio anual en la Comunidad foral (27.493,93) fue más de 3.000 euros superior al de España, donde se situó en 24.395,98 euros. En el año 2019 los salarios brutos más elevados correspondieron a País Vasco, un 20,8% más que el salario bruto medio de España; Comunidad de Madrid (14%) y Comunidad foral de Navarra, que se situó en tercera posición con un 12,7% por encima de la media nacional. Estas tres comunidades, junto con Cataluña y Asturias, presentaron una ganancia media anual superior a la media nacional.

La encuesta refleja diferencias sustanciales en la retribución según los sectores económicos. Así, la industria fue el sector de Navarra con mayor salario medio, un 12,6% superior a la media. En la Construcción el salario medio anual fue un 5,7% inferior a la media, mientras que el sector servicios (que agrupa a un conjunto de actividades más heterogéneo) registró el menor salario anual, un 5,8% inferior a la media.

Existe una relación positiva entre la edad de las personas trabajadoras y el nivel salarial indicando que las personas trabajadoras con mayor edad perciben remuneraciones más elevadas, exceptuando el último tramo de edad considerado (más de 54 años), aunque se debe tener en cuenta que en las edades inferiores (menores de 25 años) la muestra de la encuesta es reducida por lo que la representatividad de los resultados es menor.

Las personas menores de 25 años y las que se encuentran en el tramo entre 25 y 34 años tuvieron un salario medio inferior a la media en un 50,5% y 17,4% respectivamente, mientras que las que se encontraban en el tramo entre 35 y 44 años, los del tramo entre 45 y 54 años y las mayores de 54 años tuvieron un salario medio superior en un 2,8%, 10,4% y 5,7%, respectivamente, al salario bruto medio anual.

En cuanto a la variación salarial respecto al año anterior, se produjo un ascenso para todos los grupos de edad, destacando el registrado para las personas de 45 a 54 años.

Cabe destacar que las diferencias salariales por sexo fueron en general mayores con el aumento de la edad de las personas trabajadoras. Esto se explica por la mejor cualificación (ocupación, estudios) de las mujeres más jóvenes respecto a las de mayor edad.

En la encuesta se han considerado dos tipos de contrato, los de duración indefinida y los de duración determinada. Para poder establecer comparaciones entre personas trabajadoras con contrato de duración indefinida y duración determinada se ha ajustado el salario de las personas trabajadoras que no permanecieron todo el año en el centro de trabajo y se les ha asignado un salario anual equivalente al que hubieran recibido de haber estado trabajando todo el año en las mismas condiciones.

Las personas trabajadoras con un contrato de duración determinada percibieron un salario medio anual inferior en un 24,5% al salario medio, mientras que para las personas contratadas indefinidamente fue un 8,8% superior a dicho salario.

Por sexo, se observa que esta diferencia fue mayor en hombres (33,4% y 10,1%, respectivamente) que en mujeres (10,8% y 4,8%, respectivamente).

En cuanto a la variación de ganancia anual respecto al año anterior, el salario aumentó en los contratos de duración indefinida, un 6,1%, y en los de duración determinada, un 3,5%.

Por sexo, los hombres con contrato de duración indefinida tuvieron un ascenso salarial del 6,3%, y las mujeres tuvieron un ascenso del 3,2% respecto al año anterior.

En los contratos de duración determinada se produjo un descenso de la ganancia anual de los hombres del 6,5%, mientras que para las mujeres se registró un aumento del 15,5% que causa que las mujeres con contratos de duración determinada tengan una ganancia superior a la de los hombres.