Tomates, lechugas, pimientos, guindillas, vainas, calabazas, puerro y repollo encabezan la lista de hortalizas con las que nos deleitan los horticultores de nuestro entorno. Hoy vemos con agrado cómo el consumo de estos productos, pertenecientes a explotaciones locales se están consolidando dentro de la producción agraria. Esta realidad, que suma valor añadido a sus explotaciones, cuenta además con el apoyo de instituciones y organismos públicos, así como de la empresa privada, ejes fundamentales para hacer frente a los retos a los que se enfrenta la industria agraria.

Con la mirada puesta en la innovación y en la implantación de nuevas técnicas de cultivo más sostenibles, GRUPO NOTICIAS ha reunido a diversos representantes del sector hortícola en torno a una Mesa Sectorial bajo el título El Sector agrario en el entorno local, con el objetivo de analizar la situación actual de la producción de hortalizas.

En el apartado de productores, el encuentro, celebrado en las instalaciones del Clúster de Alimentación del País Vasco, ha contado con la presencia de Iosu Arrizabalaga, de Cooperativa Barrenetxe, y Xabier Alberro, de Alberro, además de con el responsable comercial de Producto Local de EROSKI, Javier Bilbao; Amaia Ortiz-Barredo, responsable del Departamento de Producción y Protección Vegetal de NEIKER; Mikel Arrillaga, responsable del Área de Marcas y Mercado de HAZI; y, Jon Ander Egaña, director del Clúster de Alimentación del País Vasco.

"Tenemos que atraer a jóvenes en la producción ya que estamos ante uno de los pocos sectores con futuro". XABIER ALBERRO. Productor de la Explotación Alberro

El balance de la producción hortícola por parte de los representantes de las explotaciones ha servido para dar inicio a las exposiciones, una valoración que desde el ámbito de actuación de Xabier Alberro, la comarca de Donostialdea y el territorio guipuzcoano, no muestran buenos datos, con cifras de producción en descenso.

Los dos productores coinciden en exponer cómo uno de los grandes problemas del sector hortícola en estos momentos es el relevo generacional, una realidad que les preocupa mucho y que, según Alberro, "el objetivo en estos momentos es atraer a jóvenes o iniciarles en el camino de la producción, ya que estamos ante uno de los pocos sectores con futuro".

La falta de suelo se une a la problemática, así como el desembolso económico que debe realizar un joven que quiere entrar a formar parte de la producción agrícola.

El panorama no resulta muy halagüeño, aunque Alberro reconoce que si bien es un trabajo al que hay que dedicarle muchas horas, con jornadas laborales muy largas, tiene su recompensa. "Producimos hortalizas de calidad, que se identifican con marcas como Euskal Baserri".

Sobre la tendencia actual hacia una mayor diversidad de producto por parte de las explotaciones locales, el representante de la Cooperativa Barrenetxe, Iosu Arrizabalaga considera que esta estrategia es un reflejo de lo que pide el mercado. "Los consumidores están pidiendo hortalizas más allá de las que habitualmente hemos producido".

A su juicio, "es una forma de romper la temporalidad, pero también de abrir nuevos nichos de mercado".

Conseguir que toda la producción de la que hablan Iosu y Xabier llegue al consumidor en las mejores condiciones y en el menor tiempo posible es el trabajo de las cadenas de distribución, como es el caso de EROSKI. Javier Bilbao, responsable comercial de Producto Local de la Cooperativa, subraya la buena trayectoria que están registrando las ventas de producto local en los últimos diez años. La limitación de producción es un hecho que no se puede obviar y que limita el aumento de las ventas, pero se muestra tajante al señalar la apuesta clara de EROSKI por el producto local, "apostando por hortalizas que se producen aquí mismo, en cada comarca y favoreciendo su presencia frente a las de otras procedencias".

"Tenemos que ser suficientemente hábiles para saber contar el valor añadido que tiene nuestro producto". JAVIER BILBAO. Responsable comercial de Producto Local, EROSKI

Año a año el crecimiento en ventas de producto KM0 es manifiesto en EROSKI y "si bien ya hemos consolidado los básicos, (tomate, lechuga, pimiento y guindilla), poco a poco están creciendo exponencialmente otros como la vaina o el puerro", destaca Bilbao.

El respaldo del consumidor hacia el producto de proximidad no lo considera Bilbao como una moda, sino una apuesta por lo más cercano, aquello que da confianza y calidad, y resalta lo ocurrido durante la pandemia, con un incremento que, en el caso de la hortaliza, se situó 20 puntos por encima de los datos de 2019.

Añade que el plan para impulsar el consumo de hortaliza local está en el ADN de la Cooperativa, siendo uno de los ejes de posicionamiento estratégico de EROSKI, con una importante estructura montada alrededor para potenciar no sólo las hortalizas, sino todas las categorías de alimentación.

Pero este buen posicionamiento en ventas no impide que el sector se enfrente a grandes retos, uno de ellos el de la innovación. Así lo cree Amaia Ortiz-Barredo, de NEIKER. Desde su punto de vista, la industria agraria apuesta por la investigación en base a nuevos sistemas de producción alternativos y de cultivo pero tiene pendientes otros muchos. El primero que argumenta es que "hasta ahora teníamos de todo y en cualquier momento, lo que supone un trasiego de productos enorme de un lugar para otro que conlleva buen número de enfermedades".

Su experiencia en el mundo de la producción vegetal le ha permitido estudiar e investigar sobre las amenazas que conlleva la globalidad, identificando un total de 14 enfermedades en Europa al año.

Para Ortiz-Barredo, la investigación tiene un papel fundamental para erradicar esta situación, con el objetivo de salvar el producto local y poner fin a las amenazas que le rodean.

Fija la mirada también en la dificulta de que ofrecer desde nuestra zona el producto a todos los consumidores hace que se tenga que diversificar, pero las variedades que hoy surgen son muy diferentes a las de hace 20 años. "Si bien NEIKER cuenta con un banco de germoplasma muy amplio, esas variedades que estaban en un escenario de hace 20 años son completamente distintas a las de hoy", argumenta.

A su entender, la disyuntiva se presenta entre el producto local que demanda el consumidor, diversificado y que responda a sus gustos, y los retos que provoca la globalidad, dos ejes en los que, según la responsable de Producción y Protección Vegetal de NEIKER, debe centrarse la investigación fundamentalmente.

Pero no todo es negativo. Señala cómo gracias a la tecnología hoy se pueden conseguir estos objetivos. Pone de ejemplo la reducción de los fitosanitarios, el descubrimiento del sistema inmunitario de las plantas o que las luces led permiten desorientar a las moscas.

Para cerrar el capítulo de amenazas debido a la globalización, la representante de NEIKER menciona el daño que ha sufrido recientemente el pimiento de Gernika provocado por el tobamovirus, cuyas consecuencias han llevado a presentar esta misma semana una nueva variante de pimiento de Gernika que hace frente al mencionado virus.

NUEVAS TENDENCIAS DEL CONSUMIDOR

Desde la óptica del consumidor, el director del Clúster de Alimentación no quiere dejar pasar por alto las nuevas tendencias que se están dejando notar y que representan una oportunidad para el sector primario. La primera que cita Egaña es hacia el consumo de productos vegetales, a la que le sigue la modificación de hábitos de consumo durante la pandemia en beneficio de los productos saludables, la producción sostenible y como consecuencia del ello, el aumento del consumo de producto KM0. Añade otra más, el incremento en el hábito de cocinar en el hogar.

"El consumidor está cada vez más

sensibilizado con lo que consume y quiere saber cuál es su origen". JON ANDER EGAÑA .Director del Clúster de Alimentación del País Vasco

La amplia experiencia del Clúster en estudios de mercado le lleva a Egaña a poner de manifiesto otro dato de interés para el consumidor y que tiene que ver con la trazabilidad de los productos. "No vale ya producir en todas partes ni a cualquier coste", recalca. El consumidor está cada vez más sensibilizado con lo que consume y quiere saber cuál es su origen.

Los hábitos del consumidor dejan ver también muchos aspectos que tienen que ver con sus gustos. En este apartado, Egaña menciona otra novedad que ponen de manifiesto los estudios; la búsqueda de la conveniencia, es decir, tener los productos pero no tener que transformarlos. "El consumidor quiere disponer de los productos cuando los necesita, sin necesidad de pelarlos o cortarlos", resalta Jon Ander.

Para el director del Clúster, la exposición de estos cambios en los hábitos del consumidor y el propósito de darles respuesta pueden representar nuevas oportunidades de mercado para el sector hortícola que, a su juicio, debería aprovechar.

Tras este panorama optimista desde el punto de vista de la demanda, desde EROSKI, Bilbao, recalca la importancia de que la producción acompañe a estas buenas perspectivas.

Pero al igual que la innovación, la sostenibilidad es otro de los aspectos relevantes a la hora de hablar del sector primario, sostenibilidad tanto en términos medioambientales como económicos.

"Las marcas de calidad que gestiona HAZI han sido importantes herramientas para el desarrollo del sector". MIKEL ARRILLAGA .Responsable del Área de Marcas y Mercado de HAZI

Para Mikel Arrillaga es uno de los frente de actuación de HAZI, con un objetivo claro, el desarrollo rural. El trabajo que desarrolla la fundación en el sector agrario se centra en apoyo formativo y técnico, principalmente. Por supuesto, menciona las marcas de calidad que gestiona HAZI como principales herramientas en el desarrollo del mundo agrario, "marcas que buscan dar visibilidad y valor al trabajo que realizan los baserritarras y, por otra parte, ofrecer confianza al consumidor a través de la marca".

"Cuanta más confianza tenga el consumidor en nuestras marcas, mejor también para el productor", puntualiza.

En este sentido, Arrillaga se muestra satisfecho por el hecho de que cada vez la lista de productos que pertenecen a la familia de Eusko Label vaya en aumento, "una buena señal que deja ver que estamos ante una buena herramienta, que también sirve en su desarrollo económico". Actualmente, el sello Eusko Label cuenta con 18 productos, siendo la sal el último en lucir la etiqueta, de denominación Euskal Gatza.

INCORPORACIÓN DE JÓVENES

La atracción de jóvenes al sector agraria vuelve a salir a la luz como una de las necesidades más inmediatas por parte de los productores, quienes reclaman más apoyos por parte de la administración para poder llevarse a cabo nuevos proyectos hortícolas. Arrizabalaga añade que hace falta desde la administraciones un direccionamiento de los apoyos económicos para conseguir un sector estructurado, fuerte, profesional y con potencial.

El precio de las hortalizas es otra de las cuestiones que se pone sobre la mesa. El hecho de tratarse de un producto perecedero condiciona y mucho el coste, señala Arrizabalaga.

Para que esos precios sean justos tiene que haber una relación oferta demanda lo más ajustada posible, y añade que, producir en Euskadi es mucho más caro que en otras comunidades autónomas. Considera que sería relativamente justo pedir un precio diferencial para el producto local.

Sobre el precio, Alberro señala hacia coyunturas externas a la producción de hortalizas, como actualmente el costo de las energéticas, que condicionan el costo final de producto. Las consecuencias son tales que en su propia plantación han decidido modificar todo el software del control climático para adecuarlo a las distintas tarifas eléctricas.

La necesidad de aportar valor añadido al producto ha estado en boca de todos los participantes al Encuentro en alguna de las intervenciones. No hay duda, por tanto, que todas las partes coinciden en que es el camino a seguir. Preguntado sobre cuál debe ser ese valor añadido, Javier Bilbao lo tiene claro y argumenta varios aspectos. "El valor añadido se consigue, por un lado, con marcas como Eusko Label, donde no sólo trazan el origen sino también la calidad comercial; diversificando el producto, ejemplo de ello están la cuarta y quinta gama; o con aportes que conlleven alimentos más saludable".

Desde EROSKI se muestran convencidos de que el producto local genera más confianza al consumidor, por lo que, "al ser un producto diferencial tenemos que darle ese plus de calidad".

Bilbao defiende el papel de las marcas en esta labor, y resalta el estupendo resultado de Natur, la marca de calidad de la Cooperativa, al tiempo que subraya también la importancia de ir hacia un producto transformado.

Sobre la conveniencia del consumidor "de tener todo hecho", todos los participantes se muestran de acuerdo, y en base a los resultados de ventas de EROSKI, Bilbao señala hacia un desarrollo creciente de la cuarta y quinta gama.

Además de la conveniencia, el perfil del consumidor también está impulsando el producto transformado, con nichos de mercado muy diferentes, por un lado con familias con hijos y, por otro, el segmento seniors, con un aumento de hogares unifamiliares.

COLABORACIÓN PÚBLICO-PRIVADA

El mundo agrario ha experimentado en los últimos años una gran evolución, apoyándose en gran medida en la tecnificación y tecnología muy potente que se deja ver, principalmente, en el sector invernaderista y hortícola. Tanto Arrizabalaga como Alberro exponen públicamente dicha evolución con el fin de acabar con la imagen de hace 50 años que aún se mantiene del mundo agrario, "un sector tirado por bueyes".

"Producir en Euskadi es más caro que en otras comunidades por lo que sería justo pedir un precio diferencial para el producto local". IOSU ARRIZABALAGA. Productor Cooperativa Barrenetxe

Aprovechan para hacer un llamamiento sincero a las administraciones municipales de Euskadi para que doten de suelo hortícola fértil, con el propósito de que pueda proliferar la actividad agraria y convertirse en un sector potente.

En el desarrollo al que hacen mención los dos horticultores ha tenido mucho que ver la colaboración público-privada. Sobre el papel desarrollado por HAZI, organismo que certifica y promociona los productos de calidad vascos de la marca Eusko Label, perteneciente al Departamento de Desarrollo Económico e Infraestructuras del Gobierno vasco, Arrillaga considera fundamental su labor en el impulso del sector, y cree que "las marcas de calidad han contribuido a poder vender más y mejor los productos de casa".

"Nosotros intentamos que el consumidor que adquiere productos Eusko Label esté dispuesto a pagar un poco más, algo que se consigue ganándonos su confianza en base a una mayor calidad y control", argumenta, al tiempo que añade que en el caso del productor, las marcas Eusko Label le propician visibilidad a sus explotaciones.

Sobre los requisitos que HAZI exige a los productos que optan por el sello de calidad Eusko Label, la calidad diferenciada del producto es el principal, lo que requiere el control de todos los procesos, para lo cual realiza auditorias y mantiene una estrecha relación con los productores. En el caso de ser factible, se trabaja para dotarle al producto con la marca de calidad.

Actualmente, comenta Arrillaga como primicia, están valorando certificar algún producto hortícola.

Convencido del bien que representan las marcas de calidad y remarcando el estricto control al que están expuestas nuestras explotaciones agrarias, Javier Bilbao expone que "pecamos de contar poco y mal sobre lo que hay detrás de esas marcas de calidad y de la historia de los productos que las lucen, una información que podría generar ese valor añadido que necesita el sector".

En este trabajar de día a día, Amaia Ortiz-Barredo subraya también cómo ha cambiado el estudio del mundo agrario en los últimos tiempos, una tarea en la que NEIKER se ha implicado totalmente. Este amplio conocimiento de la situación le lleva a asegurar que todos los problemas que se han nombrado hasta ahora tienen retos en investigación enormes. Pone como ejemplo el reto en ingeniería que supone producir la máxima cantidad por unidad de superficie aprovechando todos los recursos que existen para ello. "Al ser una estructura muy costosa, no podemos permitirnos que tenga tiempos vacíos. Hay que estar continuamente produciendo, llevando a cabo otras alternativas que suponen nuevos retos", ratifica.

"Tenemos tecnología muy potente en la que apoyarnos pero el problema de las enfermedades es muy importante". AMAIA ORTIZ-BARREDO. Responsable del Departamento de Producción y Protección Vegetal de NEIKER

Saca a relucir además los retos a los que se enfrenta la cuarta y quinta gama con el objetivo de mantener el producto con calidad, lo que le lleva a afirmar que, "probablemente habrá que pensar en sacar al mercado nuevas variedades inexistente hasta el momento".

Destaca cómo la investigación está ayudando a tomar riendas y buscar soluciones a los problemas, y no pasa por alto que la política europea pone a veces condiciones, como el uso de los fitosanitarios, que crea conflictos a la hora de actuar.

En este sentido, comparte la opinión con el representante de EROSKI en que es fundamental trasladar al consumidor lo que hay detrás de una marca de calidad, que conozcan las exigencias que deben cumplir.

Añade que, en ocasiones, hay cosas que exige el consumidor que son imposibles del cumplir, como pedir una lechuga espléndida que dure 7 días dentro de una caja, sin residuos y de producción local.

Estas cuestiones introducen dos temas relacionados entre sí al debate, el despilfarro de los alimentos y los productos de apariencia fea. En este sentido, todos los participantes comparten la idea de que si el objetivo es el aprovechamiento máximo de la producción y el desecho 0 hay que tomar cartas en el asunto.

Desde EROSKI recuerdan la iniciativa que pusieron en marcha hace ya 3 años bajo el nombre de Campaña de Frutas y Verduras Feas para el aprovechamiento de aquellos productos de forma defectuosa pero perfectamente comestibles a un precio más económico, con estupendos resultados, subraya Javier Bilbao, una medida que, al parecer, próximamente se va a convertir en ley.

Ortiz-Barredo se muestra tajante, "no podemos permitirnos el lujo de tirar nada, sea feo o bonito".

Por su parte, Egaña defiende optimizar ese desperdicio y se muestra partidario de hacerle partícipe al consumidor de que este tipo de actuaciones forman parte de ese componente de sostenibilidad y cercanía que persiguen. Argumenta que una mayor interacción con el consumidor puede ser beneficioso para el conjunto del sector agrario. Considera interesante incidir en el tema de la organización del sector, quetambién puede ayudar en la búsqueda de dar valor a los productos.