- CaixaBank registró un beneficio atribuido de 5.226 millones de euros en 2021, tras incorporar los impactos extraordinarios asociados a la fusión con Bankia, por la aportación contable de 4.300 millones del fondo negativo de comercio y el coste neto de 1.433 millones, principalmente, del proceso de reestructuración de empleo y otros resultados asociados a la integración.

El beneficio ajustado sin extraordinarios se sitúa en los 2.359 millones, frente a los 1.381 del ejercicio anterior, marcado por las provisiones para anticiparse a los impactos de la pandemia, informó ayer CaixaBank a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Ha alcanzado un volumen de negocio de 972.922 millones de euros y los recursos de clientes ascienden a 619.971 millones, lo que representa un aumento del 49,2% en el año -10,5% de crecimiento orgánico-.

Los ingresos core de la entidad se han situado en los 11.339 millones de euros, lo que supone un 1% menos interanual (aun así, se incrementaron un 2,8% en el cuarto trimestre, hasta los 2.889 millones, respecto al trimestre anterior).

La entidad explica esta bajada interanual por la caída del margen de intereses y por los resultados asociados a participadas de bancaseguros, mientras que a nivel trimestral atribuye el aumento a su intensa actividad comercial y la “positiva” evolución del negocio durante la integración.

El margen de intereses disminuye a 6.422 millones, un 5,8% menos respecto a 2020, en un entorno de tipos de interés negativos, y los ingresos por comisiones suben hasta los 3.987 millones, con un crecimiento interanual del 6,7%, y con buen comportamiento en el cuarto trimestre (+14,1% frente al tercero, gracias a la mayor actividad).

Las comisiones bancarias se mantienen estables y las procedentes de la comercialización de seguros se incrementan respecto a 2020, mientras que las asociadas a la gestión de productos de ahorro a largo plazo se sitúan en 1.391 millones de euros, un 17,9% más.

Los ingresos por dividendos -192 millones- en 2021 aumentan, fundamentalmente, por un mayor dividendo de BFA, de 98 millones, que incluye el ingreso de un dividendo extraordinario por importe de 54,5 millones, y se incluye el dividendo de Telefónica en ambos ejercicios (90 millones en 2021, frente a 100 en 2020).

Los recursos de clientes suman 619.971 millones, un 49,2% más, que, sin contar la aportación de Bankia, registraron un crecimiento orgánico del 10,5% en el conjunto del año; y los activos bajo gestión se sitúan en 158.020 millones, con un aumento anual (+48,2% y +16,5% en variación orgánica) marcado por la evolución positiva de las suscripciones netas como por el comportamiento favorable de los mercados.

El ahorro a largo plazo cierra el año con una cuota de mercado del 29,4%: tanto el patrimonio gestionado en fondos de inversión, carteras y sicav, que se sitúa en 110.089 millones, como los planes de pensiones, que alcanzan los 47.930 millones, tienen “una evolución positiva” en el año y también en el último trimestre.

El crédito bruto a la clientela alcanza los 352.951 millones de euros, con un crecimiento del 44,7% en el conjunto del año, y el crédito al sector privado se mantiene estable en el cuarto trimestre respecto al tercero.

En el cuarto trimestre destaca la evolución del crédito al consumo, que crece un 1%, y la financiación a empresas, que se incrementa un 1,9%, mientras que el saldo de hipotecas disminuye un 1,5% por el mayor volumen de amortizaciones que de nuevas concesiones, aunque la nueva producción de hipotecas crece un 8% en el cuarto trimestre respecto al tercero. El consejo aprobó un dividendo de 0,1463 euros con cargo a 2021.

Activos. Los activos líquidos suman 168.349 millones, con un crecimiento de 53.898 millones.

Ratio. La ratio Common Equity Tier 1 (CET1) cerró en el 13,2%.

Morosidad. La ratio de morosidad en diciembre se situó en el 3,6%, con lo que se ha mantenido estable tras la integración. Ascienden a 13.634 millones.

Covid. El fondo para insolvencias covid-19 es de 1.395 millones.