El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha pedido pensar la transición energética "con más tecnología y menos ideología", ya que la economía seguirá necesitando petróleo y gas, textualmente, durante décadas.
Lo ha dicho este miércoles en la sesión 'Los nuevos retos de la reforma energética europea II' de la XXXVII Reunió Cercle d'Economia, que tiene lugar hasta el viernes en el Hotel W Barcelona, con el consejero delegado de Endesa, José Bogas, y el presidente de Enagás, Antonio Llardén.
Imaz ha asegurado que es necesario "quitar el sesgo ideológico" a las políticas energéticas y pensar en la seguridad de suministro y en la competitividad de la economía española.
Ve como indispensable "bajar los consumos de todo" porque, según él, la sociedad se enfrenta a una crisis energética en los próximos meses y puede haber problemas de suministro.
Ha pedido no "hacer trampas al solitario", ya que la reducción de emisiones en la Unión Europea (UE) está provocando exportar actividad industrial y empleos, y que además se están aumentando las emisiones mundiales de dióxido de carbono porque las plantas son menos eficientes.
SECTORES QUE "NUNCA" SE ELECTRIFICARÁN
Imaz ha pedido dejar de usar "la falacia de equiparar la descarbonización con la electrificación" y ha asegurado que hay sectores que, en sus palabras, nunca van a ser electrificables, y ha puesto como ejemplo la mayoría del transporte, la química y la refinería.
Ha reclamado "mucha ambición" y ha apuntado a la necesidad de invertir, ya que el Estado español cuenta con la industria y la tecnología para hacer esta transición.
Ha dicho que la Península Ibérica es una isla energética y que en el contexto actual "tiene sentido" el tope del precio de la producción del kilovatio hora siempre que sea una medida temporal.
