Sigue la euforia en el valle

Comenzó bien el Egües el partido ya que en su primera jugada de ataque tras un saque de banda botado por Olague, Arellano controlaba dentro del área y era zancadilleado provocando un penalti. El propio Arellano era el encargado de lanzarlo, transformándolo por bajo y engañando al portero.

Se ponían muy de cara las cosas para el Egües, pero lejos de poner las cosas fáciles, el Lagunak se ha repuesto muy bien del mazazo inicial, pasando a dominar territorialmente el partido e intentando, mediante jugadas elaboradas, hacer ocasiones de gol.

Tras el paso por los vestuarios, el Lagunak empezó muy fuerte, disponiendo de una doble ocasión, pero ha sido nuevamente el Egües, en el minuto 51, quien en una jugada de ataque llevada con mucha velocidad por un incombustible Iban Lara, marcara el segundo gol del partido. El pase final de Arroki, no podía ser rematado por Palacios, pero Iban Lara llegando desde atrás, remachaba a placer poniendo un tranquilizador dos a cero.

Con una tónica similar a la del primer tiempo los minutos han ido pasando. El Egües se ha quedado con diez y con un Lagunak totalmente volcado, han llegado varias contras del Egües que podían haber servido para ampliar el marcador.

Se llegaba al final de un partido donde el Lagunak ha dejado una gran imagen en Sarriguren con un nivel de juego muy alto por parte de los dos equipos. El Egües a favor de marcador durante prácticamente todo el partido, ha sabido aguantar la elaboración del Lagunak.