La baloncestista estadounidense Brittney Griner, acusada en Rusia de posesión y contrabando de drogas, se declaró este jueves culpable ante un tribunal de Moscú. La deportista, que se sirvió de un traductor durante la sesión del Tribunal de Jimki, admitió todos los cargos, aunque señaló que no tenía la intención de cometer un delito, según la agencia Interfax.

Griner explicó la presencia de aceite de cannabis en su equipaje con la premura con que empacó sus maletas para viajar a Rusia. La próxima vista del juicio, en la que se espera la sentencia, se celebrará el 14 de julio.

En la sesión de este jueves la corte tomó declaraciones a dos testigos de la acusación que participaron en el registro de las pertenencias de la jugadora en la aduana rusa. La deportista, de 31 años, doble campeona mundial y olímpica con su país, fue detenida en febrero en el aeropuerto de Sheremétevo en Moscú tras hallar los funcionarios de aduanas entre sus pertinencias aceite de cannabis.

Seguidamente, la baloncestista fue arrestada por posesión y contrabando de drogas y se encuentra desde entonces en prisión preventiva. Previamente, se supo que Rusia y Estados Unidos negocian el canje de la jugadora por el comerciante de armas ruso Víktor But, conocido como el "mercader de la muerte" y que cumple condena en una prisión estadounidense.

But cumple 25 años de cárcel, entre otras cosas, por conspirar para matar a ciudadanos estadounidenses y vender armas a la antigua organización guerrillera de las FARC colombianas. Recientemente, Rusia y EEUU intercambiaron al estudiante estadounidense Trevor Reed, condenado a nueve años de cárcel por resistencia a la autoridad, por el piloto ruso Konstantín Yaroshenko, sentenciado en EEUU a 20 años por contrabando de drogas.