La plantilla de Osasuna retomó este lunes los entrenamientos tras el severo revés que supuso la derrota ante el Betis (0-2). Los rojillos se ejercitaron por grupos, con más trabajo para los futbolistas que no jugaron el partido o lo hicieron durante unos minutos. El portero Iván Martínez fue el que trabajó con el primer equipo, en una sesión en la que se terminó con la disputa de un partidillo a medio campo.

En uno de los lances del entrenamiento, Nacho Vidal cayó al suelo en la pugna con un compañero y tuvo que ser atendido por los servicios médicos al quejarse del hombro izquierdo. Aunque el lateral siguió entrenando y terminó la sesión con normalidad, abandonó el terreno de juego quejándose de la articulación.

Quien sigue demostrando que se encuentra en plena recuperación satisfactoria es Jonathan Calleri. El delantero argentino, que jugó unos minutos ante el Betis y demostró que mantiene intacto su fútbol combativo, trabajó a un buen nivel en la progresión que exige su restablecimiento pleno. Calleri tiene muchas posibilidades de recuperar la titularidad en el partido del viernes ante el Valladolid, un encuentro ante un rival directo en el que hay mucho en juego.