a visita de la imagen del Ángel de Aralar es rutina que se da en la primavera, de marzo a junio y en lo posible siguiendo el orden de los pueblos, variable en las fechas al depender de la Pascua de Resurrección. Ha estado en Pamplona, con el besico de costumbre en la Taconera que repetirá con las cruces parroquiales allá por donde vaya, y la gente sencilla le recibe un año más ¡ongi etorri, Mikel!, y le pide protección para campos y cosechas.
A la vieja Iruña llega siempre la tarde anterior al llamado martes “in albis”, la segunda semana de Pascua Florida. Lo hace así porque el martes del año 1127 se consagró la catedral de Pamplona, y el Angel de Aralar acude para estar en la ceremonia. Y este año no (cosas) al Palacio de Navarra como hacía desde 1925 a propuesta de Ignacio Baleztena, siempre amante de tradiciones y costumbres singulares de este pueblo y promotor de muchas hermosas iniciativas folklóricas. No lo hizo con la República cuya promulgación vivió la imagen del aingeru visitando precisamente en la Diputación, el 15 de abril de 1931.
A nuestro País del Bidasoa acostumbra a llegar el sábado anterior al quinto domingo de Pascua, desde la muga con Gipuzkoa, por Etxalar y todo Bortziriak, para seguir a Sunbilla. En 1901, el día de la Cruz de Mayo, estuvo en la inauguración de la cruz original de Legate, promovida por los capuchinos que acababan de establecerse en Lekaroz, y en 1979 volvió cuando se erigió la actual.
La nueva cruz de Legate se inauguró el 5 de agosto de 1979, con asistencia (como se dice) del aingeru, el arzobispo de Pamplona monseñor Cirarda y el de San Sebastián, monseñor Jacinto Argaya, precisamente hermano del capuchino Carlos de Bera, el más ferviente impulsor de la reconstrucción. Aquel año, en Baztandarren Biltzarra, los jóvenes de Lekaroz no tuvieron problema en el motivo de su carroza: La cruz de Legate
En esta tierra a San Miguel se le tiene buena ley, lo contaba Pío Baroja en su Leyenda de Jaun de Alzate: “¡Compradme los gozos del principe gloriosísimo San Miguel Arcángel, primer ministro de Dios, que rompió las cadenas del caballero penitente don Teodosio de Goñi en el monte Aralar!”, en la voz del mendigo ante el incrédulo Arbelaiz.
San Miguel tiene cofradía desde 1229, que contó hasta con 40.000 cofrades y 20 clérigos a su servicio según indicó el obispo Bernard Folcaut en un edicto de 1368. Faltan los inolvidables Inocencio Ayerbe y Miguel Azpírozque lo llevó tantos años. Un año, en Elizondo, coincidieron tres Miguel, la imagen del santo, Miguel Azpíroz y el párroco de la de Santiago Apóstol, Miguel Alberro. Casualmente, aquel año, al marcharse al atardecer descargó una fenomenal granizada de las que caen pocas en docena.
A su vista, allí donde llegaba, doblaban las campanas, que le dijeron “rompecampanas” de alegres que bandeaban, y en Almandoz “ratonero” parece que por salvarles de una plaga de roedores que sobrevivieron a un invierno bastante flojo. El ángel tiene gran ascendencia en el gremio nekazari de Elizondo que antaño llenabade billetes hasta el borde un buruzare (cesto) de los más grandes. Aquí hasta medio siglo atrás subía la imagen de San Miguel al collado de Belaun, desde donde se bendecían a los cuatro vientos los campos elizondarras, con foto tomada por el entonces alcalde Juan Eraso.
Y en Bera, la historia popular relata que, un año, porque apretaba la prisa, acudió en coche, con gran sentimiento y disgusto de los beratarras que obligaron a que entrara según costumbre en la villa en macho o no soltaban donativos. “En macho o no hay cuartos”, le dijeron al cura, no fuera a estropearse la rogativa.
El sábado, día 7, ya estuvo en Etxalar y Lesaka, y el lunes, día 9, en Arantza e Igantzi, de donde marchó a los valles de Ultzama y Anue, y hoy volvera a Ezkurra (20,30 h.) y Eratsun. El día 22, sexto domingo de Pascua estará en las bordas y caseríos de Bera (09:15 horas) y a las 09,45 en la villa, para seguir por la tarde a Sunbilla (18:00 h.) donde pernoctará.
El día 24 visitara Malerreka por Zubieta, Ituren, Elgorriaga, Doneztebe y Donamaria para hacer noche. La imagen del aingeru estará al siguiente día en Oiz, Gaztelu, Urrotz, Labaien y en Saldias. El 26, entrará en Bertizarana por Legasa, Narbarte, Oieregi y entrará al Valle de Baztan por Mugairi de Oronoz y Arraioz. El día 27 estará en Oharriz de Lekaroz,Lekaroz, Gartzain e Irurita.
El día 28, sábado, recorrerá Urdazubi y Zugarramurdi, estará en Elbete, Clínica Benito Menni de Elizondo y a las 19,30 h. en Elizondo, donde se quedará hasta el día siguiente, Ascensión del Señor, para seguir a Azpilkueta. El lunes, 30 visitará Arizkun, Amaiur, Erratzu y se despedirá el martes, día 31 de mayo, por Zuraurre de Ziga, Ziga, Aniz, Berroeta y dirá adiós al Valle de Baztan y al País del Bidasoa en Almandoz, de camino al portillo de Belate. l
