La residencia San Jerónimo de Estella-Lizarra ha presentado un innovador proyecto que consiste en la implantación de un huerto terapéutico en el centro con el objetivo “de mejorar la calidad de vida de las personas residentes fomentando las salidas a espacios exteriores y potenciando su autonomía”, tal y como han explicado.

Para el desarrollo de este proyecto de hortoterapia, la residencia ha contado con el apoyo de CaixaBank, a través de una aportación económica de 20.000 euros de la Fundación “la Caixa”.

Al acto de presentación ha acudido Javier Muñoz, responsable de Acción Social de la Dirección Territorial Ebro de CaixaBank, que ha estado acompañado por David Cabrero, director del centro de Estella-Lizarra, así como por algunas de las residentes.

El primero de ellos ha destacado la importancia de la solidaridad entre instituciones para proteger a las personas en situación de vulnerabilidad”, mientras que para Cabrero, que ha informado de que se esta actividad estará coordinada desde el programa de terapia ocupacional, “valoramos de forma muy positiva esta puesta en marcha porque vamos a trabajar actividades significativas para cada persona; nos basamos un poco en las historias de vida de los residentes e intentamos que se sientan útiles. Con estos huertos podemos trabajar las relaciones sociales, la orientación, la atención, la memoria, el cálculo y, además, se crea un ambiente estimulante”.

A todo ello, ha recalcado, hay que sumarle la parte física, que también la trabajan, y la motricidad en cuestiones de manipulación con la azada, la pala, o la regadera. “Es necesario buscar actividades que para las personas sean significativas y que sientan que siguen aportando”, ha insistido.

Mejora de la accesibilidad

La hortoterapia, han explicado, es un método terapéutico que surgió en el siglo XIX en Viena como terapia para tratar determinadas dolencias o enfermedades mentales en personas mayores y desde entonces, cada vez más, el huerto terapéutico está ocupando espacios en residencias, centros de día, hospitales e, incluso, colegios.

De hecho, la residencia San Jerónimo cuenta con un gran espacio de huertas, explicaba Cabrera, pero no está adaptado para todas las personas residentes, solo para aquellas con cierta capacidad física.

Gracias a esta colaboración y a la aportación económica, van a habilitar un espacio con huertos elevados que facilitará las labores del día a día, van a instalar mesas de cultivo en un recinto con accesos anchos y suelo firme para hacerlo accesible a todos los residentes, y van a contratar a un terapeuta ocupacional y a un responsable del huerto para que les ayude en las labores de cuidado y mantenimiento del mismo.

La residencia San Jerónimo de Estella

La residencia San Jerónimo es una fundación sin ánimo de lucro que nació el 27 de diciembre de 1911, gracias a Doña Jerónima Uriarte. Se construyó con el objetivo de proporcionar albergue y asistencia, especialmente a las personas mayores desvalidas y desprotegidas.

Hoy en día proporciona a las personas mayores servicios personalizados, integrales y de calidad y les ofrecen acompañamiento en el proceso de envejecimiento promoviendo su autonomía y su dignidad para lograr su bienestar y satisfacción, así como el de las familias.

San Jerónimo es una institución referente e innovadora en España, que desarrolla su propio modelo de atención y da respuesta a las necesidades individuales de cada persona mayor y su entorno.

La residencia cuenta con tres recursos: 10 viviendas con apoyos para personas no dependientes; la residencia propiamente dicha, que cuenta con un total de 62 plazas y por último 42 plazas de estancia diurna que en estos momentos están suspendidas por la situación Covid-19.