A las doce y desde la plaza de la Coronación Oihane Andueza y Ana Martín lanzaron el cohete anunciador y un poco improvisado con el que comienzan desde hace doce años las fiestas de la juventud de Estella-Lizarra. Ambas representaron a los quintos y quintas nacidos en 1993 pero en el txupinazo también estuvieron representados los nacidos en 1992 “hemos decidido invitarles porque ellos no tuvieron la oportunidad de lanzar el cohete por la pandemia”. Y es que tras dos años sin fiestas pequeñas ayer todo invitaba a la participación, incluido un tiempo caluroso que hizo que vecinos y visitantes siguieran los actos desde la calle.

La comparsa de Gigantes y Cabezudos fue la gran madrugadora de la jornada. Primero tras su salida desde el ayuntamiento partieron hasta la primera parada que realizaron precisamente en su calle, Comparsa de Gigantes y Cabezudos, donde pudieron observar los nuevos murales pintados en su honor por la artista local Garbiñe XXXX. Su presidente Sergio Azpilicueta se mostraba contento por esta experiencia “hemos estado dos años sin salir y ha sido muy emocionante”, aseguró Azpilicueta quien señaló que la comparsa también está de enhorabuena por el fichaje de Iñaki Azcona y Sergio Romano “dos chavales que han bailado con nosotros por primera vez”, aseguró Azpilicueta. Posteriormente la comparsa con todo su despliegue de gigantes y cabezudos se dirigió a la plaza de la Coronación donde sirvieron de fondo para el lanzamiento del cohete. Tras el lanzamiento, las fanfarres Jurramendi y Alkaburua partieron por las calles de la ciudad repartiendo la fiesta y posteriormente se incorporó la banda Unión Musical Estellesa que ayer se reforzó con varios alumnos y alumnas de la escuela de música municipal.

Tras el cohete tanto Oihane Andueza como Ana Martín se mostraban muy contentas por la experiencia “ha sido una experiencia muy bonita que culmina un año de mucho trabajo, sobre todo porque hasta el último momento no sabíamos qué podíamos organizar o no”. “Ahora podemos decir que todo el esfuerzo ha merecido la pena”, finalizaron.

En la plaza de Santiago el Taller de danzas de Tierra Estella arrancó su exhibición de bailes autóctonos que amenizaron este histórico rincón de la ciudad del Ega..

Tras la música y el baile llegó el tiempo de las comidas populares. Así la organizada por la quinta el 93 se celebró en la plaza de los Fueros en cuyas filas de mesas que acogieron a 650 comensales se pusieron sombrillas y parapetos contra el sol abrasador. También hubo gran ambiente en la comida organizada por Giro Festa a la sombra del frontón Lizarra donde se congregaron 250 jóvenes.

Posteriormente dio comienzo un encierrillo que duró 45 minutos y en el que se trasladó a una persona con traumatismo al García Orcoyen y un encierro que duró 10 minutos con vacas de Macua.

De nuevo la danza tuvo su protagonismo a las 20 horas con la salida de decenas de danzaris desde el ayuntamiento hasta la plaza de los Fueros donde se desarrollo la XX edición del Día del Baile de la Era, un acto que congregó a cientos de espectadores que vivieron los pasos del baile tradicional de la ciudad.

Finalmente, las músicas de Dj y rock ocuparon los verbenas en las plaza de los Fueros y en las txoznas del frontón Lizarra, respoectivamente dando fin a una jornada caracterizada por la participación “hemos conseguido aglutinar a todos los colectivos y que todos tengan su espacio por eso estamos muy satisfechos de hacer unas fiestas de la juventud pero para todos y todas” aseguró el concejal de Juventud, Jorge Crespo. l