- El pamplonés Alberto Alemán y el zaragozano Alberto López se han propuesto hacer un Camino de Santiago solidario en patines. Los excampeones de España y exmiembros de la Selección Española de Patinaje, salieron la madrugada del 8 de agosto desde Roncesvalles y su idea es realizar el Camino Francés hasta llegar a Santiago en unos 7-10 días. Los patinadores se hicieron esta promesa a sí mismos en 2013. En aquel momento Alberto López se encontraba hospitalizado, y con la intención de motivar su recuperación Alemán le compró un libro del Camino de Santiago. “Quería que tuviéramos un objetivo interesante a largo plazo y como toda la vida hemos patinado y competido pensamos en por qué no hacerlo en patines”, explicó Alemán.

Alberto se recuperó muy bien, pero dejaron un poco de lado la idea hasta que, a raíz del coronavirus, la volvieron a retomar. “Vimos que el verano de 2020 iba a ser muy aburrido, por lo que pensamos que este año podía ser el apropiado para volver con la promesa y cumplirla”, detalló López.

Los Albertos se conocieron siendo rivales. Alemán es de Pamplona y López de Zaragoza, por lo que competían entre ellos. Después de una amistad de más de 25 años pasaron a ser del mismo equipo: Pilar Marianistas de Vitoria. En estos momentos siguen compitiendo, pero no de manera profesional. Ahora es su hobby.

Nunca han hecho un trayecto parecido. “Lo máximo puede que haya sido alguna carrera de un día de 100 kilómetros. Va a ser todo un reto”, expresó Alemán. Su idea inicial siempre ha sido realizar el camino en patines. “No hay muchas personas que lo hayan hecho de esta manera, excepto dos chicos de Logroño que nos han servido un poco de inspiración. También hemos contactado con ellos para resolver alguna duda logística, aunque la ruta es totalmente diferente”, añadió López.

Con un saco de dormir, unas pocas camisetas, unas bermudas y unas ruedas de recambio en una mochila realizarán cada día unos 90 o 160 kilómetros dependiendo de la etapa, pero sin ningún coche de apoyo. “Iremos con toda la precaución posible y no vamos a ir rápido porque son muchos kilómetros. Mucha gente se ha ofrecido a acompañarnos en el camino con coches de apoyo, en bicicleta o en patines, pero creemos que es una cuestión de seguridad. Tenemos que ir por carreteras secundarias o vías asfaltadas y hay que tenerlo en cuenta, no podemos crear pelotones. Hay que ir con cuidado”, destacaron los Albertos.

El equipo decidió vincular su reto a una causa para poder ayudar a alguien y, obviamente, tenía que estar ligada al patinaje, por lo que, qué mejor que colaborar con la asociación Patinar en Etiopía. Los patinadores ya conocían esta organización, por donaciones que habían realizado o porque la entidad había colaborado en carreras de patinaje navarro como en la Maratón Internacional Pamplona-Puente la Reina. En estos momentos Patinar en Etiopía además de luchar contra la desnutrición que causa la pobreza permanente en Wukro, en la región de Tigray, se centra en la formación intensiva para nuevos monitores de patinaje para que adquieran destrezas deportivas, de aprendizaje y fomentar el ocio.

“Toda la vida hemos patinado y competido, así que pensamos en por qué no hacerlo en patines”

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