Dentro de las prioridades estratégicas de la Policía Nacional en el marco de la seguridad nacional se encuentran las infraestructuras críticas. Se trata de aquellas cuyo funcionamiento es indispensable y no permite soluciones alternativas, por lo que su perturbación o destrucción tendría un grave impacto sobre los servicios esenciales.

Para su protección se hace imprescindible, por un lado, catalogar el conjunto de aquellas que prestan servicios esenciales a nuestra sociedad y, por otro, diseñar un planeamiento que contenga medidas de prevención y protección eficaces contra las posibles amenazas hacia tales infraestructuras.

Por ello, la Policía Nacional de la Jefatura Superior de Navarra, a través de un equipo conjunto formado por expertos de la Unidad de Subsuelo y Protección Ambiental de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana y del Grupo de Desactivación de Explosivos y amenazas NRBQ (Nuclear, Radiológica, Biológica y Química) de la Brigada Provincial de Información, ha iniciado una serie de medidas preventivas para la revisión y protección de diferentes infraestructuras críticas de la ciudad de Pamplona.

Teniendo en cuenta la proximidad de fechas festivas que prevén grandes aglomeraciones de personas y también, la cada vez mayor dependencia de las sociedades en el sistema de infraestructuras, el equipo conjunto ha revisado varios de los puntos clave que dan soporte y posibilitan el normal desenvolvimiento de la vida cotidiana de los ciudadanos de esta Comunidad Foral.

Cualquier interrupción no deseada de las infraestructuras -incluso de corta duración y debida bien a causas naturales o técnicas, bien a ataques deliberados- podría tener graves consecuencias en los flujos de suministros vitales o en el funcionamiento de los servicios esenciales, además de provocar perturbaciones y disfunciones en materia de seguridad. Por ello su supervisión y seguridad, son esenciales para el normal funcionamiento de la sociedad navarra.

Está previsto que este tipo de actividades conjuntas, se mantengan y refuercen en los próximos meses, para garantizar el correcto funcionamiento de los servicios esenciales en los próximos Sanfermines, así como el inicio sin incidencias, del periodo estival.