El compromiso con el medio ambiente en la localidad de Yesa no sabe de las edades de sus participantes. La vecindad, la de a diario y la de los fines de semana, se reunió recientemente en el auzolan anual que junta a la vecindad de todas las generaciones.

El objetivo de este año era de continuidad, para seguir retirando los protectores de las plantas colocadas en la construcción de la autovía, relacionarse entre generaciones y contar con los nuevos vecinos como gesto integrador.

“Es preciso seguir haciendo cosas en los pueblos y hacerse conscientes de que tenemos que tirar de nuestros propios recursos para realizar pequeños trabajos como éste. Es por el bien de los árboles, no es conveniente que, una vez crecidos, sigan con los protectores” , argumentaba Fernando Trébol de la Asociación Cultural Arangoiti ESAM Kultur Elkar, impulsora de la actividad con la colaboración del Ayuntamiento.

educativo El de Yesa es un auzolan intergeneracional con fines educativos. Una vivencia compartida por padres, madres e hijos que trata de concienciarles desde la infancia, en el trabajo y en el conocimiento de las plantas.

A ello contribuye con sus explicaciones Joserra Izurriaga, de la Asociación Gorosti, acompañante habitual de la jornada. El objetivo de este año era, además, colaborar con el Día Internacional de la Diversidad.

Fue el 8º día de las Flores y Plantas de Primavera, señalado en su agenda anual de actividades con la misma finalidad que el mercado de años atrás: reivindicar la calidad de la vida rural y la necesidad de nuevos pobladores que transformen la dura realidad de la despoblación.

Aunque pocos, son un ejemplo a seguir. Se ocupan del medio y reparten tareas, como en el Día del Árbol, que plantaron en torno al parque biosaludable y a la nueva pista deportiva junto a la piscina.