Diferentes oyentes explican por qué no podrían vivir sin la radio y qué sensaciones les provoca este medio de comunicación que les acompaña cada día
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Firma: G.Tenas
Los tiempos cambian y el asentamiento de las nuevas tecnologías hace que el temor de que la radio desaparezca, en todos aquellos que se dedican al mundo radiofónico, esté presente.
Sin embargo, aunque algunas tecnologías han llegado para quedarse, otras se han esfumado. Y en todo este proceso, la radio ha seguido vigente, conviviendo con ellas pero, a la vez, reforzando su esencia basada, principalmente, en una relación de confianza con la audiencia.
“Yo creo que Onda Vasca es la única emisora que conecta mi radio”.
Nacho Urueña, Zumarraga
¿Por qué la gente sigue escuchando la radio? Debido a la llegada de las nuevas plataformas, el público tiene posibilidades infinitas de entretenimiento pero hay ciertas características propias del medio radiofónico que la convierten en una gran alternativa o en una opción complementaria.
En primer lugar, la radio informa y lo hace de una manera fácil y totalmente gratis, a diferencia de otras plataformas. Así lo explica Carmen Sánchez, una oyente fiel de Onda Vasca, residente en Llodio: “A mí la radio me gusta muchísimo porque aparte de la compañía, estás informada continuamente. Luego es amena, tienes diferentes tipos de programación, noticias, los programas divertidos que te ríes, los programas con los que aprendes… Porque la radio es muy divulgativa”.
Por otra parte, la radio tiene la virtud de poder acompañar en diferentes escenarios y momentos, una compañía que ameniza el día y entretiene a las personas. Para Carmen lo que más le atrae de Onda Vasca es que “los periodistas son muy participativos con los oyentes y eso me gusta mucho”. Afirma que suele escuchar todo el día la radio, “sobre todo el programa de mañana de Txema Gutiérrez e Iranzu Calvo, pero al mediodía también escucho deportes con Imanol Vilella y también la tertulia de José Manuel Monje. Y por las tardes, cuando estoy en casa, suelo escuchar una parte de Begoña Jiménez, y ya a última hora, me gusta mucho la música que ponen”.
“La radio es amena, tienes diferentes tipos de programación, noticias, los programas divertidos que te ríes, los programas con los que aprendes… La radio es muy divulgativa”.
Carmen Sánchez - Llodio
Una señal fácil de coger
Por otro lado, la radio también evoluciona y se adapta a las nuevas tecnologías; puede escucharse desde el tradicional transistor hasta desde el móvil, tablet u ordenador. Y lo que es más importante, puede oírse desde cualquier lugar.
En el caso de Nacho Urueña, un oyente de Zumarraga, hace que sus jornadas en el camión sean más llevaderas. “Como estoy conduciendo todo el día siempre pongo la radio, si no sería muy aburrido conducir. El programa que más me coincide con mis horas de trabajo es el de Txema pero, en realidad, los escucho todos: partidos, tertulias…Depende de cómo me pille”. Y afirma que la programación le gusta mucho: “Yo creo que Onda Vasca es la única emisora que conecta mi radio”.
“Escuchar la radio es una costumbre, una necesidad”.
Begoña Ezkurra, Algorta
Asimismo, a diferencia de la televisión y el smartphone, la radio permite a los oyentes continuar haciendo sus quehaceres, estando presente en su oído sin monopolizar sus otros sentidos. Así lo apunta Begoña Ezkurra, una vecina de Algorta que escucha la radio en casa, pero“también si voy a pasear sola porque me pongo los cascos y se me hace más entretenido el camino”. Esta oyente afirma que escuchar la radio “es una costumbre, una necesidad. Pero, además, aunque tengo la oportunidad de elegir diferentes emisoras, siempre elijo Onda Vasca”. Y entre sus programas preferidos, aparte del matinal, “me gusta mucho escuchar música en la radio o los partidos del Athletic”.
En un mundo donde la comunicación se vuelve menos personal, la sensación de conectar con seres humanos reales y vivos es un elemento de valor. Por ello la gente elige la radio, porque sigue siendo un medio de compañía. Además, los locutores desempeñan un rol importante en atraer a los oyentes, ya que a menudo las personas los sienten como a un amigo más de la cuadrilla y los sintonizan cada día para escucharlos.
“Les mandé una figura de un fraile para que supieran el tiempo que iba a hacer”.
María Ascen, Donostia
Para la donostiarra María Ascen Vázquez, de 73 años, esta conexión es indudable. Tal es así que afirma que hizo un regalo para el programa matinal Konekta. “Hasta les mandé una figura de un fraile para que supieran el tiempo que iba a hacer”.
Una conexión con la comunidad
Pero, especialmente, muchos oyentes sintonizan la radio para recibir noticias de la comunidad, y buena parte de ellos acude a eventos locales organizados por las emisoras (conciertos, festivales u otras actividades) en la calle o en diferentes recintos. La radio también desarrolla un servicio primordial durante las emergencias locales o cuando se necesita información importante para la comunidad.
En definitiva, la radio sigue viva, influyendo positivamente en la gente, ofreciendo contenidos que acompañan, informan y/o entretienen a la vez que permite tener una visión más positiva y amable de la vida.
