Natalia Alonso es una jarrillera de 32 años muy polifacética a la que le encanta TikTok. Es andereño de profesión y trabaja en Ikea. Se ha enganchado al crossfit y en su tiempo libre le gusta escribir. Una afición a la que dio rienda suelta ya desde que era pequeña, en su diario, donde "publicó" su primer cuento. Sus abuelas Severina, de 96 años, y Manuela, de 90, son sus más fieles seguidoras. Natalia vive muy a gusto en Portugalete, en casa con aita y ama, porque, como ella misma dice, "mejor que aquí con ellos no hay ningún sitio". Y tiene una perra de aguas que se llama Marley. Cuando necesitan tranquilidad se marchan a Villorejo, su pueblo de Burgos.

Pili Sarro, su ama, tiene 60 años y es de Santurtzi. Está casada con Mario Alonso, natural de Vezdemarban, en Zamora. Él trabaja en la construcción y tiene 65 años, mientras que Pili trabajaba en el servicio de ayuda a domicilio. Le han diagnosticado parkinson hace unos años y está de baja, pero forma parte de la asociación Asparbi de Bilbao, donde ha encontrado el apoyo y la comprensión que necesitaba. Nos cuenta que va a la logopeda y disfruta mucho con la musicoterapia. Es muy activa y le gusta hacer 'nordic walking'. 

Su cuñada, Argiñe Zorrilla, también es de Portugalete. Tiene 40 años y vive en Ortuella desde hace 17 años, pero es "portugaluja de corazón", subraya y es aquí donde tiene a toda su cuadrilla y familia. Trabaja como cajera y panadera en Eroski. Está casada con Joserra Alonso, el hermano mayor de Natalia, de 41 años, pintor de profesión y ciclista por afición. Tienen una hija en común, Aiala Alonso, de 6 años, que estudia en Kanpazar y a la que le encanta la gimnasia rítmica, las matemáticas y la robótica.

¿Qué cosas os gusta hacer juntas?

-Aiala:¡Tiktoks!

¿Ah, sí? ¿Haces tiktoks con tu ama, tu tía y tu amama?

-Aiala: ¡Sí! ¡Mi tía Natalia es la tiktokera de la casa

-Argiñe: Sí, algún vídeo tenemos las cuatro (risas).

-Natalia: Lo hacemos todo en equipo. Marley todavía no aparece, pero dale tiempo...

-Pili: A mí me animan también un poquito a hacer estas cosas, pero salgo de fondo, ¿eh?

-Natalia: Hombre de fondo, si te aprendes las coreografías y todo...

-Pili: Sí, pero las que son fáciles...

-Argiñe: Pero la ‘suegri’ es famosa porque luego en el súper le dice que la han visto en un tiktok (risas).

Y el poco tiempo libre que tenéis, ¿en qué os gusta pasarlo?

-Aiala: A mí me gusta cuidar animales, como a Marley, que es una perra de aguas.

-Argiñe: Marley, que antes le daba miedo, y ahora en cambio no puede estar sin ella...

-Natalia: Sí. Tiene sólo diez meses y es un amor. Es muy buena, la verdad.

-Argiñe: La verdad es que sí. Yo tengo pánico a los perros y ya no.

-Aiala: ¡Ya no!

-Natalia: Marley ha sido terapéutica. Con ella he conseguido superar el estado de ansiedad que tenía porque coges la rutina de sacarla y los despertares son una maravilla porque ella oye a mi madre que se despierta súper pronto, me toca la puerta con la pata para que la abra, se sube a la cama, me da los buenos días y se vuelve a bajar a la suya. Aiala tenía mucho miedo al principio y ahora todos los días pregunta por ella y quiere verla. Mi cuñada igual y mis aitas la llevan de paseo y todo. ¡Es una más de la familia!

Vaya pelazo tiene...

-Natalia: ¡Ven, ‘gordi’! (le dice a su perra). Bueno, cuidar animales y ¿les has dicho que haces gimnasia rítmica?

-Aiala: ¡No!

-Natalia: Pues cuéntales...

-Aiala: Sí, voy a gimnasia rítmica los lunes y miércoles y a robótica los miércoles.

¿Robótica? ¿Es muy difícil?

-Aiala: No. Es sobre ordenadores, o sea que no es difícil.

-Argiñe: Es que controlan que no veas... (risas)

(La robótica, una materia con mucho futuro, en la página 12)

¿Cuál es tu asignatura favorita?

-Aiala: Me gustan las matemáticas.

¿Y la que menos?

-Aiala: El inglés porque no se me da muy bien (risas)

-Natalia: Eso es de familia...

-Argiñe: Sí, el inglés ‘kili kolo’. Vamos a tener que apuntarle a una academia...

-Aiala: ¿Academia? ¿A cuál?

Pero ¿es buena estudiante? ¿Saca buenas notas?

-Argiñe: Sí, de momento bien y esperemos que no cambie. Dice que va a ser pintora, que le gusta mucho pintar...

-Aiala: ¡No voy a ser pintora! Voy a ser doctora, pediatra y... ¿cómo se dice las que cuidan animales?

¿Veterinaria?

-Aiala: Sí. Veterinaria, doctora y pediatra.

¡Cuántas cosas vas a ser! ¿Y a vosotras, Argiñe, Natalia y Pili? ¿Qué os gusta hacer?

-Argiñe: Pues la verdad es que yo tengo muy poco tiempo libre. Colegio-casa, casa-colegio y pasear con la niña y sus amigas. Mi vida social es esa ahora mismo.

-Natalia: Tiene más vida social Aiala que cualquiera de nosotras...Tiene muchos cumpleaños y muchas fiestas. ¡Tiene más que nadie! (sonríe).

-Aiala: Mi tía Natalia es la mejor que he visto yo pintando porque pinta súper bien.

-Natalia: Bueno es que juntas pintamos los parches de Aiala. Les damos un toque bien chulo.

-Aiala: Pero hoy no llevo.

-Argiñe: No porque hoy es domingo.

-Natalia: Sus parches se han hecho famosos en la ‘ikas’.

-Aiala: Mi aita el otro día pintó a Marley, pero le salió ‘txutxurri’ (risas).

-Natalia: Luego a mi ama ha descubierto ahora que lo suyo es cantar.

-Pili: Sí, bueno... voy a la asociación de Asparbi, en Bilbao, porque hace dos años me diagnosticaron parkinson, y estoy contenta porque hacemos actividades juntos para intentar retrasar la enfermedad. Hacemos musicoterapia, memoria, gimnasia, logopedia...

(Descubre las actividades de la asociación Asparbi de Bilbao en la página 14)

-Natalia: Y tienen un coro. El 8 de mayo dieron un concierto en el Euskalduna y en primera fila estaba. Nunca ha cantado y ahí la tienes...

-Pili: La verdad es que nos animan mucho. A mí me dicen que canto bien, pero nunca he cantado. Claro que en el coro está todo organizado con más voces y te animas. Haces memoria, lees, gesticulas.... Está muy bien. Y nos han invitado para cantar en Bermeo ahora...

Y vosotras encantadas, en primera fila... ¿Cómo canta la amama?

-Aiala: En castellano bien, pero en euskera... (risas)

-Natalia: A Aiala le gusta jugar a espectáculos. Se sienta frente a ti y te da su opinión como una jueza.

-Aiala: ¡Sí! ¡Pido aplausos!

-Natalia: Y a mi ama también le gusta mucho hacer travesía con palos, lo que se conoce como marcha nórdica.

-Pili: Sí, la neuróloga me aconsejó practicarlo porque me dijo que venía muy bien para desarrollar la coordinación, así que estoy todo el día con ello.

-Natalia: Parece fácil, pero no lo es.

-Pili: Primero, cuando empecé a andar, me costaba porque la enfermedad te hace no coordinar bien, pero luego ya poco a poco vas comenzando a coordinar y empiezas a disfrutarlo.

(Descubre los beneficios de practicar marcha nórdica en la página 16)

¿Y qué caminatas haces?

-Pili: Suelo andar toda la mañana y voy con el marido, que también está jubilado.

-Aiala: Cuando se jubiló le hice un dibujo.

-Pili: Él anda poco porque de las rodillas anda fastidiado, pero sí que hacemos por la mañana un ratito y por el mediodía intento andar yo sola todo lo que puedo. Voy hasta Sestao o a veces hasta Santurtzi más Vallá de la Sardinera y vuelvo por Kabiezes. Cuando estoy en el pueblo, en Burgos, me pego buenas caminatas también.

-Natalia: Con la perrita también solemos ir a dar paseos. Porque está como ahora, en modo vaga, o está de no parar, pero se porta muy bien.

¿Y a ti Aiala, qué deporte te gusta? ¿La gimnasia rítmica?

-Aiala: Y también hago gimnasia normal. El lunes y martes hago.

-Natalia: Lo de la gimnasia rítmica también viene de familia...

¿Qué es lo que más te gusta de la gimnasia?

-Aiala: ¡El spagat!

-Argiñe: Y el pino.

-Aiala: Y la rueda... ¿Os enseño a hacer el spagat? Pero ahora no lo puedo hacer, porque está Marley aquí sobre mis pies...

No te preocupes, lo haces luego, para la foto...

-Natalia: Y también te gusta la bici.

-Aiala: Sí. Aprendí con cuatro años.

-Argiñe: Y no veía nada, porque acababa de salir de su primera revisión de la vista y le habían dilatado las pupilas.

-Natalia: También le gusta mucho nadar.

-Argiñe: El año pasado hizo también un curso intensivo de piscina.

Si tuvieras que elegir entre la bici, la piscina o la gimnasia rítmica, ¿con qué te quedarías?

-Aiala: Con la piscina, porque nos dejan tiempo libre (sonríe)

-Argiñe: Pero en rítmica también te dejan...

-Aiala: Es que ahora casi no podemos jugar porque estamos haciendo un baile para la próxima exhibición. Yo estoy en el grupo de La Sirenita.

-Argiñe: ¡Es verdad, que en junio hay otra exhibición!

¿Y en tu caso, Natalia, te gusta hacer deporte?

-Natalia: Sí, hago crossfit en CrossFit GuK, en Portugalete, al lado de San Juan de Dios, con una compi de trabajo de Argi. Es muy bueno para la salud, aunque algún golpe ya te llevas, porque yo he volado literalmente, pero conoces gente con la que igual de primeras no te sentarías a tomar algo, con distintos puntos de vista, de diferentes edades... Haces como otra familia.

-Argiñe: Fue graciosa la historia de cómo empezó con el crossfit porque Natalia quería hacer yoga, pero le animé a probar esto porque le conté que mi compi estaba montando un gimnasio.

-Natalia: Sí. Iba a apuntarme a yoga porque necesitaba relajarme y esto es justo lo contrario, pero estoy enganchada.

-Argiñe: Yo la veo y alucino. Con ese ‘cuerpini’ que tiene... Increíble.

-Pili: Sí, se pegan unas sudadas...

El deporte nos lleva a hablar de dietas, ¿seguís alguna? (Pili se lleva las manos a la cabeza y Argiñe suspira mientras Natalia observa la bandeja de churros caseros que ha preparado su ama)

-Todas: Risas

-Pili: Yo es verdad que de Navidades para acá... cojo, cojo y cojo y mira que ando, ando y ando, pero qué difícil es luego... ¿verdad? Y luego todo el día con esas tortitas de arroz...

-Argiñe: ¡Está enganchada!

-Pili: Sí, a las que tienen chocolate. Las tengo que dejar de comprar porque al final es peor (risas).

-Natalia: Es lo que hacía mi aita con los donuts ‘light’. Comía y luego se metía un donuts ‘light’ (risas).

-Pili: Sí, ahora intento quitarme de las tortas porque dicen que quitan el hambre, pero a mí no me lo quita...

-Argiñe: Yo me comería las ocho que vienen... (risas)

Entonces ¿no hacéis la operación bikini?

-Argiñe: No, aquí la operación neopreno (risas).

-Pili: Yo como bien, pero antes también comía bien y no estaba así. Y yo no puedo entenderlo. Coges un kilo fácil, pero luego quitarlo... Se tendría que quitar igual de fácil que cogerlo, ¿no?

-Argiñe: Noooo ¡Me lo quedo! (risas)

-Natalia: Ya que tenemos suerte de tener comida hay que comer. Yo aprovecho. Ya que sudo si me quiero comer una pizza o una hamburguesa pues me la como.

-Argiñe: Yo llevo toda mi vida haciendo dieta. He hecho todas, pero voy a tener siempre mentalidad de ‘gordi’, es que no lo puedo evitar (risas). Me encanta comer. Y al final digo mira, a quien le guste bien y al que no, pues chica, vamos a ser felices. Tampoco atiborrarse a bollos, pero vaya...

-Pili: Es que hay que controlar un poco el peso, pero no agobiarse.

(Olvídate de dietas y aprende a querer tu cuerpo, en la página 18)

-Argiñe: Eso es.

-Natalia: Aiala, ¿qué has traído?

-Aiala: ¡Una torta! (risas)

-Pili: ¡La prueba del delito!

-Natalia: ¿Queréis tortas?

-Argiñe: ¡No!

-Aiala: ¿Y tú?

-Natalia: No, que me he comido cuatro churros antes... (risas)

¿Y os gusta cocinar?

-Argiñe: La mejor la suegri.

-Natalia: Y mi hermano Joseba también hace unas tortillas de patata muy ricas los miércoles.

-Argiñe: Sí, pero la que mejor cocina es la Pili. Con diferencia...

¿Dos recetas que nos queráis recomendar?

-Argiñe: Es que hay tantas... Sus croquetas.

-Natalia: Y los pimientos rellenos de carne también los hace muy ricos.

-Argiñe: Y las carrilleras de cerdo ibérico.

-Pili: Las hago con verduritas y estofadas con vino tinto.

Y estos churros caseros que nos has preparado están deliciosos...

-Pili: ¡Os doy la receta, que son muy fáciles de hacer!

(¿Quieres hacer churros caseros y preparar carrilleras de cerdo ibérico al vino tinto? Sigue los pasos de nuestras protagonistas en la página 19)

Bueno, y volviendo al tema de aficiones... Natalia, en tu caso has sorprendido a mucha gente publicando tu primera novela. Pocas personas conocían que te gustaba tanto escribir...

-Natalia: Sí. Al tanto estaban mis padres, mi cuñada y una prima mía. Llevaba una época un poco mala, bajita de moral, y necesitaba un ratito para dedicarme a mí. Tenía esa horita de crossfit que hago para soltar adrenalina, pero necesitaba algo que me relajara un poco y una amiga me dijo “con lo bien que escribes, que sueles publicar cosas chulas en redes, ¿por qué no te animas a escribir un libro?” Me recomendaron escribir un microrrelato, porque escribir una novela de buenas a primeras es complicado, pero empecé y me fue saliendo... ‘Cuando lo sepa’ es mi primera novela y espero que haya muchas más. De hecho ahora estoy escribiendo otra en mi tiempo libre y tengo pensado hacer una segunda parte.

(Si quieres adentrarte en los entresijos con los que Natalia Alonso ha construido su primer libro salta a la página 9)

¿Y cómo sacas tiempo con tu trabajo?

-Natalia: La novela la escribí mientras estaba de baja y ahora, con mi trabajo, como asesora en Ikea, que me encanta, pero es muy difícil sacar tiempo. En Instagram intento seguir una rutina y subir cada semana un microrrelato.

¿Cuándo le surgió a Natalia ese gusanillo de escribir?

-Pili: De pequeña, cuando aún no sabía escribir, hizo un cuento con dibujos.

-Natalia: Sí. No tiene sentido y está grapado del revés (risas), pero mi ama lo guarda como un tesoro.

-Pili: Sí y después siguió con las agendas. Son como un diario de su vida, porque lo tiene todo apuntado.

-Natalia: Es que yo necesito mi agenda siempre y en papel. Para el trabajo, para el día a día, para todo...

Y hablando de literatura, ¿qué libros nos recomendaríais?

-Natalia: Me encanta Javier Castillo. Me he leído todos sus libros. El que más me gusta es el primero, ‘El día que se perdió la cordura’. Me impactó muchísimo su trama, Creo que nunca me había leído un libro tan fuerte, que te contaba las cosas tan de golpe, que te hacía vivirlo. Me metió en la historia de forma especial. Y como escritora me gusta mucho Megan Maxwell. He tenido la oportunidad de hablar con ella por Instagram y le envié un ejemplar de mi libro, me hizo mucha ilusión.

-Pili: Yo antes también leía poesía de Antonio Gala, pero luego me empezó a parecer un poco empalagosa. Recientemente he leído ‘Cartas a Manila’, que también lo leyó Natalia y le gustó. Está muy bien porque es sorprendente y conoces Filipinas a través de la novela.

(Apúntate las dos recomendaciones literarias de la semana. Más detalles en la página 20)

¿Y si hablamos de viajes?

-Pili: Villorejo, en Burgos. Mi cuñado cogió una casa en este pueblo. Y es pueblo pueblo, de esos en los que los críos pueden jugar en la calle porque no pasan ni coches, estás todo el día con la puerta abierta, sacas un libro y te pones fuera a leer...

-Argiñe: Justo ahí me leí yo el libro de Natalia... (risas) ¡Con la tranquilidad de allí, que no hay ni cobertura!

-Natalia: Hay wifi ahora en una esquinita porque ha puesto el vecino.

-Pili: Es una maravilla para desconectar.

A ver si ahora que lo recomendáis va a ir todo el mundo...

-Natalia: No creo. Es un pueblo muy muy pequeño.

-Argiñe: Aiala se lo pasa de maravilla allí con el aitite.

-Natalia: Con aitite se va a la huerta.

-Argiñe: Siempre está preguntando: “¿cuándo vamos al pueblo?”. El pueblo le chifla.

-Aiala: No me chifla, me encanta (risas). Es de lo mejor, de lo mejor, mejor, mejor... (risas)

¿Y vosotras, tema de viajes?

-Argiñe: El último viaje que hicimos fue a Viveiro, en Galicia, antes de la pandemia y no hemos vuelto a salir. A Aiala le encantó y siempre nos dice que a ver cuándo volvemos.

-Aiala: También fuimos a Navarra, a Senda Viva, un fin de semana. Y tenemos una foto de recuerdo...

-Argiñe: Sí, una multa (risas).

¿Y cuáles son vuestras películas, series o dibujos favoritos?

-Pili: Yo sigo mucho a Jesús Calleja. Es una persona que se hace con todo el mundo. Que lo mismo se hace con uno que está arriba como con otro que está abajo. Tiene una complicidad con la gente... Y ves a dónde llegas siendo natural. Con ‘Planeta Calleja’ y ‘Volando voy’ me he enganchado completamente porque ves paisajes preciosos y conoces sitios completamente diferentes.

(¿Te gusta recorrer mundo desde el sofá de tu casa? Si es así no puedes perderte ‘Planeta Calleja’. Te contamos las claves de su éxito en la página 21)

-Argiñe: Joserra y yo nos enganchamos siempre a ‘El Conquistador del fin del mundo’. Verlo en casa los lunes y los miércoles es un clásico y luego pues las típicas series de telecinco. Coronado me encanta y ahora estoy con ‘Entrevías’, pero antes con ‘Vivir sin permiso’.

-Natalia: Yo ahora estoy con la segunda temporada de ‘Los Bridgerton’. Y también me gusta, como a mi ama, ‘Callejeros Viajeros’, porque cojo muchas ideas para cuando viajo. No me gusta no ir a tiro hecho ni a lo que ve todo el mundo, sino que prefiero buscar rinconcitos que te impulsan a conocer más sitios.

-Aiala: Y a mí me gustan las películas de ‘Sigue el ritmo’, que son de baile. Y Matilda.

-Argiñe: De pequeña se pensaba que era ella... Una vez que estaba el ratón del ordenador en el sofá y Aiala, que se sentó, vio cómo se movía sólo el puntero del ratón en la pantalla del ordenador y empezó a decir “soy como Matilda, estoy moviendo la flecha”, decía.

-Pili: Es un poco brujilla...

-Todas: Risas. l

“A mi marido y a mí nos gusta comer, pero tratamos

de salir a andar todos los días”

Pili Sarro es natural de Santurtzi, tiene 60 años y trabaja en Ayuda a Domicilio, pero actualmente se encuentra de baja. Casada con Mario Alonso, aprovecha la recién estrenada jubilación de su marido, después de trabajar durante muchos años en la construcción, para disfrutar de largas caminatas desde Portugalete hasta Santurtzi o Sestao. También hace marcha nórdica para trabajar la coordinación. Tiene dos hijos: Joserra, el mayor, y Natalia, la benjamina de la familia; y una nieta, Aiala.

“Me gustan mucho las redes sociales y todas las semanas trato de compartir un microrrelato”

Es la ‘tiktokera’ de la familia, tal y como apunta su sobrina Aiala. Natalia Alonso tiene 32 años y vive con sus aitas en Portugalete porque “no hay un sitio Andereño de formación, vende muebles en la famosa multinacional sueca instalada en Barakaldo y en su tiempo libro escribe. Ha publicado su primera novela, ‘Cuando lo sepa’, con la editorial Libros Indie. Practica CrossFit y tiene una perra de aguas a la que ha puesto por nombre Marley por su pelaje.

“Tiene más vida social nuestra hija Aiala que nosotros. Voy de casa al colegio y al trabajo”

“Con mi tía Naiara, que dibuja genial, pinto mis parches para el ojo y nos quedan muy chulos”

“Iba a apuntarme a yoga para relajarme pero descubrí el CrossFit y me he enganchado”

“Nos encanta ir a un pueblecito de Burgos a desconectar. No hay cobertura y no pasan casi coches”

“Nuestro último viaje fue antes de la pandemia a Viveiro. Nos encantó. Se come muy bien”

Argiñe Zorrilla acaba de cumplir los cuarenta y no tiene reparos en revelar su edad. Practica el ‘body positive’, una filosofía que nos anima a sentirnos a gusto con nuestro cuerpo Portugaluja de corazón, reside en Ortuella con su marido, Joserra Alonso -el hermano mayor de Natalia- con quien tiene una hija, Aiala, de seis años. Trabaja como cajera y panadera en Eroski. Tiene muy buena relación con su suegra y su cuñada y juntas preparan divertidas coreografías para TikTok.