Encierros de hoy
“Arre borriquito, arre burra arre, vamos a Pamplona, que mañana es fiesta. Arre borriquito, vamos otra vez, que mañana es fiesta y al otro también”.
Hoy, al hacer la compra en la frutería cerca de mi casa, me comenta la frutera: “¿Este año vas a correr los encierros?” Y le comento: “¡Ay maja! Mi ciclo ha pasado; ya me dijo el año pasado un corredor en plena carrera: ¡Aparta pureta! No te das cuenta que estás estorbando?”
En principio pensé, aquí nadie estorba más que los demás. Luego reflexioné. Tal vez sí. A los que hemos corrido más de treinta años (aunque seamos jóvenes) es una realidad (aunque existan excepciones) que el encierro ha evolucionado mucho. Jóvenes muy bien preparados físicamente y toros entrenados en la dehesa para realizar carreras rápidas. Masificación importante para una carrera violenta. ¡Qué hago! Colocarme en un portal para salir en ciertas cámaras y restregarme la añoranza, que además incumplo la normativa del propio encierro. ¡No! Mi ciclo se ha pasado. Arre borriquito....