Circula por las redes una viñeta donde un padre enseña a su hija una noticia en la pantalla, ella le dice: "Papá, es falsa" y él contesta "cómo va ser falsa si dice lo que yo pienso".Yo, dejando aparte las noticias falsas y las falsas noticias (no es lo mismo), me pregunto si una media verdad es una media mentira y si una media mentira es una media verdad, creo que no, porque ambas crean corrientes de opinión diferentes. Esto viene a cuento porque observo que, nada más leer un titular, la mayoría reacciona con las tripas y comienza un aluvión de opiniones tanto a favor como en contra, dependiendo de que el titular (no la noticia) coincida o no con lo que piensa el que lo escribe, olvidando lo más elemental que es comprobar y contrastar la noticia. Si no lo hacemos así, tanto unos como otros conseguirán anular nuestra capacidad de pensar y analizar haciéndonos fácilmente manipulables.