La ilusión de un niño jamás debe ser construida a partir del maltrato hacia los animales.En Valls, un pueblo de Tarragona, un caballo cayó desplomado en la última cabalgata de los Reyes Magos.Un maltrato animal, muchas veces salvaje, muy similar al que se produce en los circos.Afortunadamente, desde hace tres años Navarra es una de las comunidades pioneras en legislar en contra de la utilización de animales en circos, coincidiendo en el tiempo con la nueva Ley Foral 19/2019, de protección de los animales de compañía.En relación a esto último, no debemos olvidar el daño psicológico ocasionado hacia estos animales por la utilización de pirotecnia en esta clase de espectáculos.Durante los desfiles tradicionales como es el caso del Olentzero o los Reyes Magos, burros, yeguas, ocas, cerdos, ovejas y demás animales, sin olvidar los camellos o dromedarios, son obligados a desfilar por entre la multitud de gente y cuyas consecuencias acaban siendo un nuevo maltrato físico y psicológico producto de esta desorientación.En este contexto conviene resaltar el récord que Navarra ostenta en nuevos casos de contagio por covid-19.Ante este panorama cabe preguntarse dónde queda la responsabilidad individual y social viendo las interminables colas de gente formadas para ver cómo sufren estos animales sintientes, aunque no sean parte de nuestra familia.
