nimalada. La RAE define el término como cantidad muy grande de una cosa. Por ejemplo, de contagios en Navarra. Más de 200 por día en las últimas jornadas, con niveles extremos de riesgo por culpa de la cepa británica que ataca de manera rápida y grave hasta poner a los hospitales en estado de alerta cuando, por derecho, los animales debieran copar los titulares de la semana. Las protagonistas son las ratas que se pasean por distintos barrios de Pamplona, de tal manera que el Ayuntamiento ha decidido actuar contra ellas incluso antes de cobrar la tasa a los propietarios de los espacios privados por donde merodean los roedores. También las palomas, ratas con alas para muchos y tan dañinas que las calles del Casco Viejo son la expresión de la impotencia: mallas protectoras, cintas y discos brillantes, pinchos y púas, molinillos de viento y búhos de plástico se instalan en los balcones intentando espantar una plaga casi imperturbable. Los bichos infectan por tierra y aire nuestros entornos, a la par que la ciudad debate sobre el futuro del minizoo de la Taconera. Reducir el número de animales de forma natural hasta su desaparición no gusta a todos, introducir más ciervas en el foso no parece adecuado y tampoco acabar con este rincón tan querido para muchos. Animales€