oca ayuda la sentencia del Tribunal Constitucional -que declara ilegal el confinamiento domiciliario bajo el estado de alarma- a la situación actual. Zurra al Ejecutivo estatal porque no declaró un estado de excepción para controlar la pandemia lo que hubiera requerido el aval del Congreso, es decir, se tenía que haber adoptado una decisión mucha más dura. Vaya y lo dicen ahora un tribunal dividido atendiendo un recurso de Vox que va de antisistema y lo que pretende es minar el poder de las administraciones y desestabilizar. No quiero ni pensar en las garantías sanitarias que hubiéramos tenido con ellos. O del control policial de los que presumen de libertades y en realidad adoran en sus mítines. Pero es que además la lectura que puede hacer mucha gente joven es que si tumban las denuncias a mí no me va a pasar nada si incumplo ahora las medidas. No sé si habrá o no toque de queda en Navarra a partir del miércoles, si será por pueblos según la incidencia que tenga el virus y qué garantías jurídicas puede tener restringir la movilidad en horario nocturno, pero ya me dirá cómo lo van a hacer sino los municipios y sus policías locales, los que las tengan, para garantizar que no haya botellones, y no solo eso sino para evitar todas las celebraciones de cuadrillas, familias y amigos en huertas, piperos, terrazas, patios, plazas... Hoy damos los datos del balance de los no Sanfermines: mil personas identificadas en los dispositivos antibotellón. Policías que no pueden ni disolver los tumultos porque no tienen instrumentos legales. Si antes teníamos miedo al virus ahora le tenemos a la justicia. Maldita pandemia.