Las cifras económicas que vamos conociendo, prácticamente cada mes, son claras: no existe el Apocalipsis foral que anunciaron en 2015 UPN y sus socios del Corralito foral. Y esto es así gracias a la gestión económica del Gobierno de Uxue Barkos, y no precisamente a lo que hayan colaborado aquellos pregoneros del fin del mundo.

En una situación de poscrisis como la que se vivía en 2015, era clave mejorar la cohesión social de los navarros y navarras. Y, para ello, había que desarrollar la economía navarra y organizar las cuentas forales. Solo así podría acometerse de mejor manera el desarrollo social colectivo, sin dejar a nadie atrás. Porque no hay desarrollo social sin desarrollo económico; pero también porque el Ejecutivo, con su presidenta a la cabeza, tenían muy claro que de nada sirve el desarrollo económico si no es para el desarrollo social. Pero quizá UPN y sus socios hablaban de Apocalipsis foral precisamente porque lo que ellos dejaban era un escenario preapocalíptico. Un escenario donde el Apocalipsis se acercaba a lomos de 4 caballos: el déficit, el endeudamiento, una Tesorería bajo mínimos, y un Convenio Económico manifiestamente mejorable en la cuantía de la Aportación Foral al Estado.

Detallemos algo más de estos caballos que tuvieron como jinetes a UPN y sus socios.

-El caballo del déficit. Déficit es el exceso del gasto sobre los ingresos. Hay déficit en una CCAA cuando la diferencia entre los ingresos y los gastos de ésta es negativa, es decir, los gastos son mayores que los ingresos. Desde 2007, Navarra tenía más gastos que ingresos? hasta el cierre de 2017.

-El caballo de la Tesorería. Dinero contante y sonante, lo que tenemos en la caja, en la hucha, a mano. UPN agotó la tesorería, la dejó seca.

-El caballo del endeudamiento. Un caballo al que UPN no solo no supo domar, sino que lo alimentó con saña y trató de cabalgarlo sin ponerle siquiera silla de montar. Complicado. El endeudamiento sirve para atender a gastos corrientes y acometer inversiones cuando acumulas años de déficit. En economía doméstica, es el momento en que tienes que pedir un crédito para pagar la luz porque te has comido los ahorros. Momento peligroso, ¿verdad? Además, y diferencia de las comunidades autónomas, los territorios forales no pueden pedir al Estado, por lo que asumen el riesgo de salir solos al mercado. Pues bien: UPN multiplicó por 5 la deuda de Navarra, pasando de unos 600 millones de € a más de 3.300 millones.

-El caballo del Convenio. Sin negociar bien la aportación foral anual al Estado, Navarra pagaba de más en el convenio. Un caballo que sumaba, con su trote continuo, la deriva apocalíptica del resto.

¿Cómo se han domado esos 4 caballos del Apocalipsis? El Gobierno Barkos decidió que, en vez de ir por una política de recortes en las prestaciones y en las inversiones, debía fomentar y apoyar programas para el desarrollo económico. Consiguió cabalgar de manera diferente sobre estos 4 caballos, dotando nuevamente de recursos a Navarra, y ordenando las maltrechas cuentas económicas heredadas. En definitiva, convirtió esos caballos en motores que han tirado hacia el lado contrario al apocalíptico: hacia el futuro, hacia el desarrollo económico y, con ello, hacia el desarrollo social.

Desde el punto de vista económico, el Gobierno ha definido planes y ejes y sectores estratégicos para los próximos años, en un marco de revolución tecnológica mundial; ha revertido las empresas públicas que estaban en números rojos; ha reorientado la construcción hacia la vivienda eficiente passivhouse, y fomentado el acceso a la vivienda pública en diferentes fórmulas público-privadas; ha apostado por un mundo rural vivo y ha dotado a los ayuntamientos navarros del primer Plan de Inversiones Locales desde 2011. Pero, además, se abordaron otras cuestiones de reorganización financiera de las cuentas públicas forales. Para domar el caballo del endeudamiento, se logró una mejora de condiciones financieras y de amortización de la deuda. Con ello, Navarra es una de las comunidades menos endeudada. Para domar el caballo del Convenio, este gobierno ha negociado la Aportación Foral anual al Estado; y ha logrado un ahorro de 120 millones de euros con respecto a la negociación de UPN.

A finales de 2017, como decíamos, Navarra consiguió tener más ingresos que gastos? es decir, superávit. Algo que no había ocurrido desde hacía una década. Suele UPN excusarse en que la coyuntura económica global es positiva; pero solo 4 comunidades autónomas tuvieron superávit en ese 2017. Baleares, Canarias, Euskadi y Navarra han tenido que hacer algo mejor que el resto? Y se domó también el caballo de la Tesorería: desde la responsabilidad, este Gobierno se vio obligado a una reforma fiscal en 2018, para generar más recursos. Fruto de todo ello, Navarra pudo terminar con un remanente de Tesorería de más de 160 millones. Era la primera vez que ocurría desde 2010. Así es como esta legislatura se ha evitado el Apocalipsis al que nos abocaban decisiones pasadas. Se optó en 2015 por la responsabilidad, en vez de por los recortes. Se han saneado las cuentas, se han generado recursos y se ha impulsado el desarrollo. Se ha logrado superávit donde había déficit, y liquidez donde teníamos una Tesorería exigua. Frente a ese trabajo serio y de rigor, UPN, el Corralito y sus medios han elegido el fake y la posverdad. El titular grueso del Apocalipsis choca con la realidad de que se ha conseguido tener dinero incluso para plantearse invertir 113 millones, que son de Navarra, en beneficio de la sociedad navarra. ¿Saben quiénes lo impidieron? PSOE, PP y? vaya, UPN. Pero ese es otro capítulo de esta historia.

Firman este artículo: Esther Cremaes y Mikel Armendariz Concejales de Geroa Bai en el Ayuntamiento de Iruña y Armando Redondo Miembro de Zabaltzen, asociación política integrada en Geroa Bai