El partido de esta noche (21.00 horas, El Sadar) entre Osasuna y Elche va a ser especial para Juan Cruz Álvaro Armada (Madrid, 28/7/1992) por ser el rojillo su actual equipo y el ilicitano el anterior. Las quinielas le sitúan fuera del once inicial, pero él trabaja para ganarse el puesto, aunque priorizando siempre lo colectivo sobre lo individual.

Osasuna regresa a El Sadar, de donde esta temporada han volado ya 15 puntos de 21 en juego.

-Sí, pero nosotros estamos deseando que llegue el partido porque vuelve a ser una oportunidad de sacar los tres puntos con nuestra gente.

Además el equipo acumula cinco jornadas seguidas sin conocer la victoria y tres derrotas consecutivas.

-Sabíamos que venían unos partidos muy duros, pero ahora ya los hemos pasado y tenemos unas ganas tremendas de que llegue el próximo partido para poder salir ya de este bache que estamos teniendo ahora.

En su caso se trata de un partido especial por ser el rival, el Elche, su anterior equipo antes de fichar por Osasuna.

-La verdad es que tengo muy buenos recuerdos de allí. Fueron dos años maravillosos y guardo grandes amigos y compañeros. Sin duda es un partido especial, pero nosotros vamos a darlo todo y después ya les desearé toda la suerte del mundo.

Osasuna lleva un mes sin sumar, pero el Elche llega al partido en El Sadar todavía peor, con seis jornadas sin ganar y sin entrenador tras la destitución de Fran Escribá.

-Es una situación complicada la que están viviendo. Ya veremos a ver qué pasa con el entrenador, pero nosotros tenemos que estar centrados en lo nuestro, en el partido, en nuestra idea.

Viene de jugar y brillar en el Wanda pese a la derrota ante el Atlético (1-0), pero las quinielas le sitúan fuera del once para recibir al Elche. ¿Usted también lo ve así?

-Yo me veo con opciones, como siempre, pero luego la decisión la tiene que tomar el míster. En los partidos que he estado entrando ha sido con otro sistema diferente (tres centrales), pero en casa estamos jugando de otra manera, aunque al final lo que tengo que hacer es poner las cosas difíciles al míster, que vea que estoy en forma. Luego será él quien tome la decisión, que será la mejor para el equipo.

Llegó a Osasuna en el verano de 2020 como lateral, pero ahora está actuando como central.

-Es una posición en la que ya había jugado muchos años, también en defensa de cuatro. Puedo hacer las dos posiciones, en las dos me encuentro cómodo y las dos las disfruto. Además, esto ya lo habíamos hablado con el míster en pretemporada, que era una posibilidad con esa defensa de tres, y la verdad es que estoy contento con las actuaciones que estamos haciendo cuando nos toca ponernos en ese sistema de tres centrales. Eso sí, ya sea de lateral o central, cuando el míster me necesite, ahí estaré.

Este pasado verano llegaron al club dos laterales izquierdos, Cote y Manu Sánchez, competencia directa para usted. ¿Cómo lo vivió?

-Son situaciones que nos tocan vivir a los futbolistas. Éramos tres para una posición, pero enseguida el míster habla conmigo y me deja claro que soy un perfil diferente a ellos y que puedo hacer esta función de central. Y no ha sido algo solo de palabra, ya que se ha visto que, en cuanto el míster ha podido, ahí he estado de central. Al principio fue una situación complicada, pero después de hablar con el míster lo afronté como un reto.

¿Pensó en algún momento en salir?

-No, en ningún momento. Desde un principio tanto el club como el míster me dejaron claro que no querían que saliera. La charla con el míster me tranquilizó y además yo sé lo que puedo aportar y lo que no, y lo he demostrado cuando me ha tocado actuar.

Y aunque no dispuso de sus primeros minutos de juego hasta la jornada 9, perseveró hasta que llegó su oportunidad.

-Lo que tenía que hacer y lo que haré siempre es entrenar todos los días al 100 % para que el míster me vea preparado, porque, si cuando me toca no estoy preparado, no sirve de nada.

Ha jugado en La Cerámica contra el Villarreal (1-2), en el Bernabéu contra el Real Madrid (0-0) y en el Wanda contra el Atlético (1-0). Casi nada.

-Cada vez me encuentro mejor, más adaptado. Es cierto que son partidos muy complicados porque son contra gente muy buena y en su casa, pero tanto personal como colectivamente creo que hemos estado a muy buen nivel.

¿Qué les ha faltado para sumar más puntos en los últimos partidos?

-Al final era un calendario bastante complicado y hemos intentado estar de la mejor manera. El equipo ha dado la cara, aunque igual nos ha faltado ser un poquito más perseverantes en el área rival y poder crear más ocasiones, pero creo que hemos estado a un nivel óptimo. Si seguimos así, los resultados, tanto en casa como fuera, seguirán llegando.

Repasando su trayectoria, pasó por las canteras de Real Madrid y Atlético antes de marcharse con 18 años a Italia, donde estuvo seis años encadenando varias cesiones. ¿Cómo recuerda aquella etapa?

-Cuando termino el último año de juvenil, llega esa oportunidad de Italia. Era el Bolonia, de la Serie A, y yo la vi clara. No es que fueran años complicados, lo que ocurre es que tuve una lesión grave, me pierdo un año y ahí se pone la cosa cuesta arriba, pero sigo recordando esos años con cariño. Es verdad que me fui muy jovencito, pero no me arrepiento. Aprendí cosas tanto a nivel deportivo como personal, porque al final cuando eres un crío tienes que empaparte de las personas que tienen más experiencia.

Y después, vuelta a España, pero a un equipo de Segunda División B.

-Había mucha gente que no entendía esa decisión, pero la tomé yo, entre otras cosas, por motivos personales. No me arrepiento de ir a Segunda B, porque ahí conocí a gente importante, como el que ahora es mi amigo y representante, Álvaro Zazo.

Y así fue escalando. Del San Sebastián de los Reyes al Rayo Majadahonda, con el que sube a Segunda; y después, al Elche, con el que asciende a Primera antes de recalar en Osasuna.

-Al final siempre he confiado en mí mismo porque sabía el nivel que podía dar. La gente puede pensar que fichar por un equipo de Segunda B era como dar dos pasos hacia atrás, pero yo lo vi como una oportunidad, la he aprovechado y disfrutado, que es lo importante, y es lo que me ha hecho llegar con esfuerzo y perseverancia hasta donde estoy.

¿Qué sintió cuando Osasuna pagó tres millones de euros al Elche para hacerse con sus servicios?

-Sobre todo agradecimiento, porque quiere decir que valoran el trabajo que has hecho y que apuestan por ti.

Para terminar. Si celebró como un poseso el gol de la victoria ante el Rayo Vallecano de Manu Sánchez, su competencia directa en el puesto de lateral izquierdo, ¿qué haría si usted anotara un gol importante, por ejemplo el de la permanencia o uno que sirviera para que Osasuna fuera a Europa?

-Ojalá un gol así de bonito y celebrarlo ante nuestra gente. Siempre se tiene en la cabeza, ojalá algún día pase y voy a seguir trabajando para que ese momento pueda llegar. En cuanto a lo de Manu, era un gol de Osasuna en el minuto 90 ante nuestra gente para ganar. Es felicidad, nada más.

"Siempre he confiado en mí mismo porque sabía el nivel que podía dar; es lo que me ha hecho llegar hasta donde estoy?