"Nos habían dicho tantas veces que Pamplona no iba a funcionar, que es la apertura que más ganas tenía de que saliese, es un local histórico en una ciudad histórica y por eso este no es el típico 99 cheesecake, no tiene ni el mismo cartel ni el mismo suelo, ya que hemos conservado el suelo y el mármol de Elizburu, porque nunca vinimos a romper la historia, simplemente a agrandarla".

Este es el mensaje inaugural de la nueva tienda de tartas de queso The 99¢ Cheesecake, sita en la calle Chapitela 7 de Pamplona desde este pasado fin de semana, que ha hecho un guiño a un comercio centenario como el que fue el negocio de grabados Elizburu, ubicado en la misma dirección.

La cadena The 99¢ Cheesecake, nacida en Barcelona y ya consolidada en ciudades como Madrid y Valencia, ha prosperado gracias a su propuesta de porciones de cheesecake a partir de 99 céntimos.

Su fórmula, "directa y sin artificios", apuesta por acercar las tartas de queso —uno de los postres más populares de los últimos años— a un público amplio y diverso. En sus redes sociales la cadena comparte imágenes del obrador, de largas colas frente a sus tiendas y de clientes disfrutando de las porciones. La marca resalta el precio de 0,99 € para la versión clásica, mientras que otros sabores especiales se ofrecen a precios mayores, a partir de 2,99.

ELIZBURU

Taller de grabación de Elizburu, en 1952. Archivo

Elizburu cerró sus puertas en 2020, tras 120 años en activo y tres generaciones de la misma familia. Tal y como describe la web Memorias del Viejo Pamplona, José María Elizburu, grabador de rótulos, pasó a vender también sellos de caucho, plumas estilográficas, artículos de fumador, etc... Después de él, continuó al frente del negocio su hijo José María y luego los hijos de este, José María y Fernando.