Todo apunta que el incendio que puso este miércoles en alerta a Badostáin y Sarriguren fue originado por petardos manipulados por un grupo jóvenes. Un agricultor cerealista que se encontraba descargando distinto material, en una zona cercana al origen del incendio del miércoles entre Badostáin y Sarriguren, observó con claridad cómo una cuadrilla de chavales se encontraba en el cerro de Elizmendi, cerca del caserío que lleva el mismo nombre y que es de propiedad particular, y que de repente una llamarada y una columna de humo surgía de aquel lugar. Las hectáreas afectadas han podido ser en torno a una decena.

"He visto que el fuego se iniciaba de repente en el cerro y que salía corriendo una cuadrilla de chavales"

En el caserío de Elizmendi han tenido problemas habituales con jóvenes que se adentran en la finca, a pesar de estar cercado y recuerdan que en varias ocasiones han tenido que avisar a la Policía para desalojarles

El origen intencionado del fuego, como los petardos como detonantes, sigue siendo la hipótesis principal con los datos que hay ahora mismo para los investigadores. Luego, el fuerte viento reinante, de componente norte, puso en riesgo varias viviendas de Badostáin, lo que obligó a salir corriendo a algunas familias y la mayoría fueron desalojadas de manera preventiva, hasta que se dio por controlado el fuego, que afectó a una nave abandonada.

El agricultor, testigo de los hechos, relataba a este periódico que "me ha llamado la atención porque siempre hay gente por esa zona cercana del caserío y me he fijado que había varios chavales. Entonces, en un momento dado, he visto fuego de repente y que ardía el matorral que hay por ahí y que se extendía por el cereal, aunque por suerte la mayor parte estaba cosechado. A su vez, los chavales se han lanzado a la carrera por el cerro", narraba mientras el incendio aún estaba activo.