Un grupo de eurodiputados de la comisión de investigación del Parlamento Europeo sobre el espionaje mediante el programa Pegasus concluyó este miércoles una visita de tres días a Israel, donde se reunieron con el consejero delegado de la empresa que desarrolló el software, así como con políticos y miembros de la sociedad civil.

La delegación, que mantuvo encuentros tanto en Jerusalén como en Tel Aviv y alrededores, estuvo compuesta por nueve eurodiputados, incluyendo los españoles Juan Ignacio Zoido (PP) y Diana Riba (ERC).

"Ha sido la primera misión y creo que ha sido una buena oportunidad para entender con mayor profundidad el funcionamiento de estas herramientas: cómo operan y a qué información tienen acceso las empresas que las desarrollan, así como también cómo se gestionan y almacenan los datos recopilados", dijo a Efe Zoido.

Esta visita se enmarca en el trabajo que esta comisión comenzó en abril tras su creación en marzo de este año y que tiene por objetivo recabar información sobre casos de espionaje con herramientas como Pegasus para finalmente elaborar una informe con recomendaciones legislativas a nivel europeo para atajar los casos de espionaje gubernamental ilegal.

Consultado por la mención de los casos de espionaje en el Estado español durante las reuniones en Israel, Zoido enfatizó que la visita se enfocó más en "el trazo grueso" y en "el funcionamiento de estas herramientas y los controles a nivel global más que en un caso concreto".

Durante los tres días que estuvieron en Israel, los eurodiputados mantuvieron encuentros con el consejero delegado de NSO, Shalev Hulio, representantes del Ministerio de Exteriores, un diputado del partido izquierdista Meretz y con un grupo de docentes y expertos enfocados en cuestiones de ciberseguridad, libertades civiles y legislación en materia de espionaje.

El presidente de la comisión investigadora, el holandés Jeoren Lenaers, subrayó hoy en un comunicado que la visita fue "interesante y fructífera" y concluyó que se requieren importantes esfuerzos a nivel europeo para "evitar el abuso de tecnologías como esta en el futuro".

Por su parte, Riba, una de las líderes independentistas cuyo teléfono fue infectado por Pegasus, apuntó que si bien la comisión sólo lleva tres meses de trabajo, tiene aún "tiempo por delante" para entender cómo han ocurrido estos casos y "poder hacer este marco legal futuro en la Unión Europea que refuerce derechos fundamentales".

Si bien opinó que muchos de los objetivos de la visita se cumplieron, Riba consideró que faltó una reunión con representantes del Ministerio de Defensa, que no se pudo concretar y que cree era de especial interés dado el rol de esta cartera en la exportación de programas como Pegasus.

Sin embargo, la eurodiputada destacó a Efe la importancia de haber podido mantener "un diálogo tranquilo, largo y muy positivo" con el CEO de la empresa fabricante, NSO, algo que marcó como "un punto a favor de esta delegación".

La visita a Israel es solo la primera de una serie de misiones que tiene prevista la comisión investigadora, que tiene planeados viajes a Hungría, Polonia y Estados Unidos para continuar con su trabajo.