La verdura, los productos de la huerta, los vegetales no deben faltar nunca en ninguna dieta familiar. Aunque el otoño vaya terminando y el invierno se acerque, la huerta sigue ofreciendo productos de temporada que no debemos perder de vista. Y es que además de su alto valor nutritivo, ofrecen una variedad de productos interesantes para alegrar cualquier menú. Calabazas, remolachas, coliflores, berzas, boniatos, lombardas, cardos, apionabos, berzas, entre otros se unen a las legumbres para hacer que los pucheros y las ollas ofrezcan lo mejor de los chup chup tradicionales.

Las cremas y los purés son una forma sencilla y ligera para tomar con cuchara o a sorbos agarrando con las dos manos un tazón.

Estas son tres recetas que no defraudan.

Crema de remolacha con pipas

Remolacha fresca. Spams/Freepik

Ingredientes

  • Un kilo de remolacha
  • Una cebolla
  • Una patata
  • 25 gr de pipas de calabaza peladas
  • 25 gr de pipas de girasol peladas
  • Aceite de oliva virgen
  • Sal
  • Agua

Elaboración

Pelar y picar en dados la cebolla. En una cazuela con 3 cucharadas de aceite sofreír la cebolla a fuego medio. Mientras se ablanda y va cogiendo color, pelar y picar también en dados la patata y la remolacha. Cuando la cebolla ya esté pochadas, añadir la patata y la cebolla, rehogar todo junto unos minutos y cubrirlo con agua. Salar y dejar cocer durante tres cuartos de hora. Pasado este tiempo, batir todo hasta que quede un puré fino. En el bol para llevar a la mesa o cuando se sirva en el plato se puede decorar con las pipas peladas de calabaza y de girasol.

Crema de boniato con garbanzos crujientes

Varios boniatos lístos para cocinar. Pixel-shot/Freepik

Ingredientes

Para la crema

  • 3 boniatos grandes
  • 800 ml de caldo de verduras
  • 20 ml de leche de coco
  • 15 gr de jengibre
  • Una cucharadita de curry rojo
  • Una cucharadita de pimentón ahumado
  • Una cucharadita de aceite de oliva virgen
  • Piel de limón
  • Sal
  • Perejil

Para los garbanzos crujientes

  • 200 gr de garbanzos cocidos
  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen
  • Una cucharadita de pimentón picante
  • Una cucharadita de ajo en polvo
  • Una cucharadita de cebolla en polvo
  • Una cucharadita de comino molido
  • Sal
  • Pimienta negra

Elaboración

Precalentar el horno a 190º. Mientras, mezclar en un bol los garbanzos bien escurridos (pueden ser de bote) con las especias. Estas especias son una propuesta, cada cocinero puede hacer la mezcla que más le guste. En una bandeja de horno amplia y cubierta con papel sulfurizado se extienden los garbanzos para hornearlos alrededor de media hora, hasta que se tuesten. A la vez se pueden asar los boniatos bien envueltos en papel de aluminio. Pasado este tiempo se sacan los garbanzos y se reservan, mientras que los boniatos, cuando se templen, se pelan. Mientras se enfría el boniato se pone en un olla el caldo de verdura junto la piel de limón, el jengibre, el curry rojo, el pimentón, la sal y la leche de coco. Una vez empiece a hervir, cocer el caldo unos 20 minutos. Pasado este tiempo y una vez pelados los boniatos, ponerlos en un bol con un poco del caldo y pasarlos por la batidora. Ir añadiendo poco a poco caldo mientras se sigue batiendo los boniatos hasta conseguir la textura de crema que guste al cocinero. Si queda leche de coco, se le puede añadir un poco más para hacerla más cremosa. Al pasar al plato, se decora con los garbanzos y perejil picado. El resto de los garbanzos se pueden presentar en un cuenco por si algún comensal quiere añadir más.

Crema ligera de acelgas

Distintas variedades de acelgas. Intia

Ingredientes

  • Un kilo de acelgas
  • 2 cebollas
  • Un litro de caldo de verduras
  • Medio vaso de leche de almendra
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Pimienta blanca
  • Pan

Elaboración

Precalentar el horno a 200º. Cortar las rebanadas de pan en dados. Colocarlos en una bandeja de horno con papel sulfurizado y hornearlos entre 5 y 10 minutos, hasta que se tuesten. Pelar y picar la cebolla en trozos medianos. Lavar, escurrir y trocear bien las acelgas. En una cazuela con aceite caliente rehogar la cebolla y la acelga unos cinco minutos tras salpimentarlas. A continuación, incorporar el caldo de verduras junto con la leche de almendras y tapar. Cocer durante un cuarto de hora. Pasado este tiempo, pasarlo por la batidora. Al servir, decorar con los trozos de pan tostados.