Quienes han visto cientos de reels de platos de comida se habrán topado con sus recetas en algún momento. Guisos exprés, pescados al horno, pintxos clásicos, algún que otro postre, arroces, croquetas… La cuenta @sarten_y_cazo, o lo que es lo mismo, Javi Benaito (42 años) y Bea Gil (35 años), un donostiarra y una cordobesa, despierta el interés de decenas de miles de personas -en Instagram arrasa con 231.000 seguidores- que no se quieren complicar la vida con los fogones y se han enganchado a las “recetas rápidas para todos”. La fórmula de esta pareja de ingenieros cuajó durante la pandemia. Desde el barrio de Amara en el que viven explotaron su faceta culinaria-gastronómica con grabaciones sencillas y desenfadadas con las que atrajeron a la audiencia, la fidelizaron y crearon comunidad. “Como no podíamos ir a bares ni restaurantes empezamos a cocinar en casa y probamos con vídeos de recetas de 30 segundos. Y eso fue el sumun”, recuerda Javi. “Empezamos a notar que teníamos muchos más seguidores en Instagram y la interacción subió muchísimo”.
Cada vez que suben uno de sus platos a las redes sociales les llueven miles de likes. Varios ejemplos de su idilio con la viralidad en 2024: boquerones al limón (5.577 me gusta), tostada de pimientos y burrata (6165 me gusta), bacalao a la vizcaína (2.393 me gusta). La pareja elabora los contenidos de noche, cuando su hija duerme y pueden centrarse en sus creaciones gastronómicas. “Es cocina de andar por casa”, resume con humildad una de las dos mitades del dúo Sartén y Cazo. “Somos autodidactas. Ni yo soy editor de vídeos ni Bea es cocinera profesional. Hemos ido aprendiendo sobre la marcha”. Pero si han conectado con tantísima gente es precisamente por una cocina sencilla y sin ínfulas de alta gastronomía. “Nos escriben y nos mandan fotos con los platos que hemos ido subiendo a la cuenta. El otro día un amigo nos dijo que fue a casa de sus padres y que habían hecho un rape al horno inspirado en uno de nuestros vídeos”.
Si Arguiñano abrió el camino de la cocina para todos los públicos, ellos dos se mueven por la misma senda desde las redes. El cocinero estrella de la televisión es un ejemplo para ambos. “Los dos somos hijos culinarios de Arguiñano y nos hemos criado viendo sus programas de televisión. Es un gran referente para Bea y para mí desde bien pequeñitos y, además, ¡todo el mundo sabe pochar cebolla gracias a él”. En sus inicios como instagramers escribían crónicas sobre los bares y restaurantes que frecuentaban. En 2019 les dio fuerte por la tortilla y llegaron a los 10.000 seguidores. Fue el primer hito. Vieron que tenían tirón. “Ya no eran solo nuestros amigos y familiares los que nos empezaban a seguir”, afirma Javi. Como colofón, organizaron una batalla de tortillas de patata en Donostia en la que se enfrentaron entre sí cuatro bares finalistas: Zabaleta, Drinka, Borroto y Antonio. Montaron un evento y el primer premio se lo llevó este último, ahora convertido en un santuario de pintxos y tortilla de patata. Cuando llegó la pandemia decidieron organizar otra batalla de tortillas, esta vez de manera virtual entre varios cocineros, y ganó el chef Joaquín Monge. Su afición por salir a comer fuera -“cogiendo ideas y aprendiendo”- los ha llevado a enseñar la riqueza de la cocina casera incluso a los que no se manejan en los fogones.
#Gastro
Desde el barrio donostiarra de Amara. Graban en su cocina, convertida en set de rodaje.
Naturales. Sus recetas, aseguran, son “de andar por casa” y ahí está la clave de su éxito.
Autodidactas. No son profesionales, sino que han ido aprendiendo “sobre la marcha”.
Instagram. Al principio subían sus opiniones sobre los restaurantes que visitaban.
Tortilla de patatas. Con su plato estrella alcanzaron sus primeros 10.000 seguidores.
Más de 230.000 seguidores. Es el número de personas que les siguen en redes sociales.
Recetas rápidas para todos. Su proyecto fue una idea que cuajó durante la pandemia.
Perfil digital
Marzo de 2020, en la pandemia del coronavirus. Hace casi cuatro años Javi y Bea aprovecharon el encierro para cocinar y hacer reels en Instagram que, para su sorpresa, se volvieron virales. Los vídeos cortos inundan su perfil desde entonces: salsas de todo tipo, platos en primer plano, mucho colorido y, muy de vez en cuando, algunas fotos de la pareja protagonista. En los stories de la cuenta destacan los nombres de varias ciudades: León, Zaragoza, Cambrils…
Creadores de contenidos gastronómicos. En 2022, Sartén y Cazo fue uno de los cinco creadores de contenidos gastronómicos seleccionados por la marca Saborea España y realizaron una ruta por distintas ciudades. Según afirma esta pareja de foodies, la “mayoría” de sus 231.000 seguidores “son del País Vasco”.
