Como aperitivo a su investidura pifiada, Núñez Feijóo convocó a sus fieles el pasado domingo en Madrid. “Un clamor popular contra la impunidad”, titulaba el editorialista de La Razón, dando el pie al director del diario azulón, Francisco Marhuenda, para venirse arriba: “Hay que movilizar la calle para mostrar el más firme rechazo a una amnistía inconstitucional que atenta contra la división de poderes y la igualdad de los españoles. Una democracia no puede otorgar la impunidad a unos delincuentes. Al cesarismo solo se le puede combatir con la presión en la calle”. Desde ABC, Ignacio Camacho remataba: “Más que una expresión de rechazo contra Pedro Sánchez, que obviamente también lo era, la concentración constituía un grito de alarma”.