Con varios de los canteranos más veteranos de Osasuna en el banquillo, al valenciano Rubén García le tocó portar ayer el brazalete de capitán del conjunto navarro y ejercer como tal al término del encuentro, momento en el que analizó ante el micrófono de DAZN el polémico penalti de Catena sobre Lewandowski que el polaco transformó para dar la victoria al Barcelona en El Sadar (1-2): “He visto poco la jugada, pero es verdad que es un poco lo que llamaban ellos penaltito cuando vinieron a hablar con nosotros, que, de normal, si no lo pita, el VAR no le llama, pero lo ha pitado y le ha llamado. Entonces ese criterio por el que a veces el árbitro decide en el momento, él lo ha visto y creo que no es tan claro, pero lo ha decidido así”. En cualquier caso, el futbolista rojillo quiso matizar que, “dentro de lo que ha sido el partido, el árbitro no ha estado mal”.

Rubén García también se refirió a la hinchada de Osasuna (unos 22.000 espectadores estuvieron a punto de llenar hasta los topes la grada de El Sadar), que una vez más se dejó la garganta antes, durante y después del partido: “La afición sabemos que es incondicional. Pase lo que pase en el campo, valoran que nos dejemos todo, como hemos hecho contra el Barça, que apretemos y que corramos por ellos, porque luego nos recompensan con ese aliento y ese empuje durante todo el partido. Siempre solemos decir que cuando jugamos en casa jugamos con uno más y tenemos esa pequeña ventaja, aunque lo cierto es que no estamos teniendo los resultados que queremos en nuestro estadio (acumula Osasuna dos derrotas en Liga y otra contra el Brujas)”.

Sobre el duelo de ayer, Rubén García reconoció la superioridad culé en algunas fases, pero añadiendo que “ha sido un partido bastante disputado e igualado en el que hemos tenido nuestras opciones”.