Siendo dos treintañeros, Julián Balduz y Patxi Zabaleta se convirtieron en dos protagonistas políticos de la Pamplona surgida de las elecciones municipales de abril del 79, las primeras democráticas tras la dictadura. UCD obtuvo 8 concejales, HB 7, el PSOE 5, UPN 5, y el PNV 2. En ese tablero, entrelazado con el del Parlamento foral, Zabaleta, cabeza municipal de Herri Batasuna, decidió apoyar al socialista Balduz, para evitar una alcaldía de derechas, pese a que HB contaba con dos concejales más que el PSOE. Casi 9 lustros después, la moción de censura que ha aupado a la alcaldía a Joseba Asiron, apoyada por el PSN-PSOE y Geroa Bai, recuerda a la frase de Mark Twain que da título a esta pieza: la historia no se repite, pero rima. Un paso político y simbólico que apoya tanto Balduz, alcalde durante dos legislaturas, como Zabaleta, que saldría de HB en 1995 y fundó Aralar en 2000. Ambos, a instancias de DIARIO DE NOTICIAS, mantuvieron un encuentro plagado de recuerdos en el hotel Maisonnave, muy cercano al Consistorio.

Lo que les evoca aquel Ayuntamiento de 1979

–Patxi Zabaleta: Fue una legislatura en la que la relación humana con la inmensa mayoría de los miembros de todos los grupos era muy buena, incluso de amistad personal, al margen de la confrontación política. 

–Julián Balduz: Tuvimos la suerte de un contexto que hoy no se da. Fuimos privilegiados. La democracia estaba empezando, y los partidos no eran tan autoritarios ni piramidales, y nos dejaban hacer cosas sensatas. Con ideologías muy distintas todos entramos con mucha ilusión, para situar a Pamplona como una ciudad europea moderna. La Constitución aprobada reconocía unos derechos a la ciudadanía, y la gente venía al Ayuntamiento exigiendo esos derechos. Unas cosas pudimos hacer y otras no, porque no teníamos dinero. Yo iba continuamente a Madrid al Banco de Crédito Local. También nos apoyó la Caja de Ahorros Municipal. Sin los recursos necesarios, hicimos por ejemplo un piso para mujeres maltratadas en 1980 y las guarderías infantiles.

–Patxi Zabaleta: Ocho en total, dos de ellas bilingües, y se legalizó la ikastola municipal, y creció la importancia de las escuelas públicas, por mencionar otros ejemplos. La proporción lingüística de las guarderías se tendría que mantener ahora en Navarra. Ese Ayuntamiento fue el siguiente tras la ruptura de los Sanfermines del 78. Entramos poco antes de empezar las fiestas. Era un complejo muy grande.

–Julián Balduz: Recuerdo ese primer Riau Riau, de más de 5 horas. unos cuantos de la Corporación nos salimos a jugar al mus al Marceliano, y después volvimos. Eso demuestra el buen ambiente que había.  

HB sin alcaldía, pero apoyó al PSOE

–Patxi Zabaleta: Decidí apoyar a Balduz por el principio ideológico elemental de que la alcaldía no fuera para la derecha. UCD y UPN sumaban 13 concejales, frente a 14 de PSOE, HB y PNV. El razonamiento fue estrictamente político. Dentro de HB no fue unánime.

–Julián Balduz: Empezamos las negociaciones con Herri Batasuna para que Patxi consiguiera la alcaldía de Pamplona y nosotros la presidencia del Parlamento. Pero HB no aceptaba a Víctor Manuel Arbeloa, se rompieron las negociaciones y nos votamos a nosotros mismos en el Ayuntamiento. Desde luego nuestros 5 votos hubieran ido para Patxi Zabaleta tranquilamente.

–Patxi Zabaleta: Cuando aspiras a un cargo y no lo consigues siempre tienes un pequeño sufrimiento, pero no me siento dolido ni dolorido. Pasó lo mejor que podía pasar, y creo que no fue negativo para Pamplona lo que sucedió hace 45 años, lo de ahora es mucho más positivo. 

Una estructura de mando singular

–Patxi Zabaleta: Con Balduz alcalde, yo era primer teniente alcalde, el segundo era de UCD, y el tercero de UPN. No se hizo como ahora, excluir a los otros, sino que cuando Balduz se iba de vacaciones me quedaba yo de alcalde, y si me iba yo entraba el de UCD. ¿Arbeloa? Era muy expresivo en sus declaraciones. Ha hecho discursos proeuskera en los que me deja atrás, y en contra en los que se pone del bracete con Unamuno.  

–Julián Balduz: Cuando acepté ser alcalde dije que aprovecharía esa oportunidad para trabajar por Pamplona y sobre todo por la convivencia. A eso respondía también el reparto de cargos entre todos los partidos. La convivencia, en esa España del 79, era muy difícil. Había que poner mucha tranquilidad y armonía, y me dediqué a hablar con todos. Cuando se producían atentados nosotros lo condenábamos, ellos no. HB hacía muchas mociones políticas en relación con Navarra-Euskadi, pero intenté en todo momento no poner ningún grano de discordia, aunque tuvimos alguna bronca. 

–Patxi Zabaleta: Los presupuestos creo que salieron por la mayoría de 14 a 13, pero el 90% del urbanismo se aprobó por unanimidad. Incluso asuntos como Andraize y algunos de la ikastola municipal.

–Julián Balduz: Eso de decir yo contigo no voy a ningún sitio, ¿a qué conduce? Había que seguir trabajando por la ciudad. 

–Patxi Zabaleta: La bronca política se desarrolló en el Parlamento, cuando por ejemplo se empezaron a pactar las bases del Amejoramiento. Se acordó que el euskera fuese lengua cooficial en toda Navarra, y ahí Víctor Manuel (Arbeloa) hizo un discurso muy proeuskera. Pero luego la comisión negociadora pactó un acuerdo diferente.

–Julián Balduz: La batalla política no debe estar en los ayuntamientos, que son menos ideológicos y más de servicio a los ciudadanos. El debate político está o en las Cortes o en el Parlamento. ¿Y cuando hubo atentados en Navarra? Víctor Manuel (Arbeloa) y yo íbamos a los funerales y nos insultaban, nos tiraban monedas, nos decían de todo.

–Patxi Zabaleta: Fueron situaciones tremendas. 

–Julián Balduz: Pero hacía falta mucha tranquilidad. 

–Patxi Zabaleta: El mayor choque simbólico y sentimental para nosotros fue el tema de la ikurriña, y los más difíciles momentos los de los atentados de ETA. También hubo de la extrema derecha. 

2024: el PSOE apoya a Bildu en Pamplona

–Patxi Zabaleta: En mi fuero interno siento una gran satisfacción, porque es un paso positivo importante. Mi relación familiar (es padre de Miren Zabaleta) es casi una anécdota, no tiene más importancia. Lo que está en la familia queda en la familia. 

–Julián Balduz: Considero la moción un acto legítimo y democrático. Me entrevistaron en la primera legislatura de Asiron, y dije que me parecía importante y positivo que hubiera un alcalde de Bildu en Pamplona, porque entiendo que eso es la democracia: la alternancia. Los demócratas habíamos pedido a Herri Batasuna y luego a Bildu que hicieran política, y ahora resulta que parece estar de moda que Bildu no pueda hacer política. Eso no es democracia. 

–Patxi Zabaleta: La pacificación ha sido lo más importante, junto con la normalización política. Eso no ha ocurrido solo en este país. El tránsito de confrontaciones que tenían una expresión armada se ha solucionado entrando en la política y normalmente se ha hecho con sangre, sudor y lágrimas. Estas evoluciones siempre dejan en los márgenes a gente que no se acomoda o se siente incomprendida, pero la evolución es francamente positiva. 

Integración y luces largas 

–Julián Balduz: La única sugerencia que daría a Joseba (Asiron) es que haga todo lo posible, independientemente de la acción de la derecha, para intentar atraerlos a la actividad municipal. Todo el esfuerzo será poco para lo que tiene que hacer en estos 3 años para ira avanzando en esa normalidad democrática de la participación de todos en la tarea de su ciudad. Mucha paciencia, muchas ganas y mucho trabajo.  

–Patxi Zabaleta: Me da la impresión de que las líneas generales que están marcando son acertadas, pero como comenta Julián, es imprescindible y muy positivo que se subrayen los esfuerzos para mantener relaciones, aunque sea difícil. Pamplona, que ha cambiado tanto desde el 79 hasta ahora, va a seguir transformándose, y dentro de unos decenios va a tener muchas señas de identidad diferentes. Navarra tiene muchos riesgos, por ejemplo en el tema industrial, tenemos una dependencia excesiva a mi juicio de las multinacionales. También hay que conservar y mimar las competencias de Navarra con mucha previsión de futuro, por ejemplo las fiscales. 

A futuro: ¿un tranvía en Pamplona?

–Julián Balduz: A mí me hace mucha ilusión un tranvía, en el eje desde Zizur a Burlada. 

–Patxi Zabaleta: Si se hace una estación en Etxabakoitz, creo que tendría que haber elementos diferentes de los que ahora tiene Pamplona. Ese es también un aspecto en el que hay que pensar. Otro tema muy importante es el transporte de mercancías.

–Julián Balduz: Es fundamental.

–Patxi Zabaleta: En esos temas no tendría que tener remilgos para hablar ni la derecha, ni el centro, ni nadie que sea civilizado. 

¿Qué hacer por fin con el edificio de los Caídos?

–Julián Balduz: En aquel tiempo nos callamos muchas cosas para no generar debates, pero se cambió el nombre de muchas calles.

–Patxi Zabaleta: Lo primero que se cambió fue la avenida de Francisco Franco, que duró hasta nosotros, que pusimos Baja Navarra.

–Julián Balduz: Hicimos lo que pudimos sin levantar muchos problemas. Por ejemplo, yo trabajé mucho con Herri Batasuna, en concreto con Elías Antón, para crear la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona (que nació en 1982). Empezamos con la depuradora y el sistema de colectores, porque en Pamplona no se depuraban las aguas negras. Ese apoyo que tuve con HB para generar la Mancomunidad es el tipo de cosas que hay que hacer ahora para dentro de 30 y 40 años, en la línea de lo que ha dicho Patxi. hay que pensar en ellas. En cuanto al monumento no tengo claro cuál debe ser el uso. Como sala de exposiciones tiene muy poca capacidad. Caben cosas modestas, porque el espacio es pequeño, pero en cuanto a la bóveda es de tipo italiana, y hay muy pocas en España. La bóveda la conservaría porque me parece un hito tenerla, y la gente lo desconoce. Sería bueno que el eje de la plaza del Castillo empalmara con Lezkairu. Es una unión que todavía no está bien resuelta. Ahí habría que tomar una decisión de futuro. 

–Patxi Zabaleta: Hay ahí cuestiones de tipo urbanístico y sentimental o político o simbólico. Julián prioriza lo urbanístico, porque para eso es ingeniero (Balduz se ríe ante el comentario); pero yo priorizo lo simbólico. Mi opinión es que a pesar del valor que pueda tener la bóveda, ese monumento habría que quitarlo. 

–Julián Balduz: Desde luego, yo estoy de acuerdo contigo, Patxi, que hay que resolver los 3 próximos años, pero que hay que levantar la vista a 12 o 14 años, al medio plazo, porque las soluciones buenas para la ciudad tienen esos plazos. 

“La moción de censura fue un legítima y democrática. Ya en 2015 me parecía positivo que hubiera un alcalde de Bildu; la democracia es alternancia”

Julián Balduz - Exalcalde de Pamplona

“Los demócratas habíamos pedido a HB y luego a Bildu que hicieran política. Ahora parece estar de moda que Bildu no pueda hacerla”

Julián Balduz - Exalcalde de Pamplona

“La única sugerencia que daría a Joseba (Asiron) es que haga todo lo posible para intentar atraer a la derecha a la actividad municipal”

Julián Balduz - Exalcalde de Pamplona

JULIÁN BALDUZ

  • Ingeniero. Nacido en Tudela, 1942. Ingeniero Industrial. Dio clases para pagarse los estudios. Tras varias experiencias profesionales, en 1977 impulsó junto a tres socios, un despacho especializado en urbanismo. Militante socialista, el partido se fijó en su perfil y le propuso encabezar la lista en el 79. 
  • "Alcalde por sorpresa”. “Yo esperaba que fuera alcalde Patxi, porque la estadística de Alfonso Guerra, que tenía un método americano, era que íbamos a sacar cinco concejales, los que obtuvimos”. 

“En mi fueron interno siento una gran satisfacción, porque en Pamplona se ha dado un paso positivo importante”

Patxi Zabaleta - Exconcejal del Ayuntamiento de Pamplona

“Estas evoluciones dejan a gente que no se acomoda o se siente incomprendida en los márgenes, pero la evolución es francamente positiva”

Patxi Zabaleta - Exconcejal del Ayuntamiento de Pamplona

“Pamplona, que ha cambiado tanto desde el 79, va a seguir transformándose en los próximos decenios; hay que tener previsión de futuro”

Patxi Zabaleta - Exconcejal del Ayuntamiento de Pamplona

PATXI ZABALETA

  • Abogado. Nacido en Leitza en 1947. Entró en el Seminario a los 12 años, de donde salió a los 19. Estudió Derecho en la UNAV. También, convalidando estudios y yendo a Roma, hizo Filosofía. 
  • El posible alcalde que no fue. Recuerda una reunión con Javier Erice (alcalde en el 76) y Balduz sobre el futuro de la alcaldía de Pamplona. Sin embargo, la expectativa de Zabaleta de ser alcalde “se torció”. Entre los motivos, reconoce, que HB se negó a votar a a Víctor Manuel Arbeloa en el Parlamento y a Boulandier para alcalde de Alsasua. 

Un recorte de Egin de l981: de izquierda a derecha, Fontana, Zabaleta, Balduz y Pérez Balda, en la Octava de San Fermín.