El número de salmones que han remontado el río Bidasoa en el último año ha sufrido una considerable mejora al pasar de los 90 registrados en 2022, 36 de ellos hembras, a los 308 del 2023 de los que 71 han sido hembras, una cifra positiva pero que se encuentra aún muy lejos del límite para la conservación de la especie.

Los datos han sido aportados por el consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente de Navarra, José Mari Aierdi, que ha comparecido en comisión parlamentaria a petición de Geroa Bai para informar sobre la aplicación de la Ley Foral de Pesca recientemente aprobada.

Aierdi ha reconocido que en 2023 "la situación ha mejorado pero de una manera insuficiente" con una entrada en el Bidasoa de 308 ejemplares de salmón de los que únicamente 71 han sido hembras, muy lejos del límite crítico de conservación establecido en 146 hembras y aún más del límite favorable estimado en 189 hembras.

Estos datos se reflejan en el número potencial de huevos en la cuenca con una estimación en 2023 de 576.000, prácticamente la mitad del millón marcado por el límite crítico de conservación por lo que se prevé que el alevinaje vuelva a ser un año más inferior al necesario para asegurar la sostenibilidad de la población.

Una evolución diferente se ha dado en la población de trucha cuya densidades promedio de adultos ha seguido bajando registrando sus mínimos históricos de forma consecutiva en 2022 y 2023.

De cara a la temporada 2024, Aierdi ha trasladado que no se puede esperar una mejoría ya que en 2022 la producción de alevines sufrió un significativo descenso al tratarse de un año "muy caluroso, con baja humedad" y marcado por eventos extremos como riadas que "han incidido de una manera muy negativa en el número de reproductores".

Según los datos del Gobierno únicamente en las cuenca del Oria-Urumea y Arga-Ultzama han conseguido mantener densidades promedio por encima del umbral mínimo deseable mientras que Eska-Salazar ha mantenido la densidad promedio más baja de todas las cuencas. En población juvenil Baztán-Bidasoa se ha quedado justo en el umbral y Oria-Uremea se ha mantenido por encima.

"La pesca no es la causante de que esta situación haya llegado al momento en el que estamos", ha aclarado Aierdi poniendo en valor las medidas tomadas en la limitación de las autorizaciones de pesca necesarias para ello.

El calentamiento global y las condiciones climáticas, ha referido, son la causa fundamental al producir cambios en la temperatura del agua y eventos climáticos que inciden en el desove y la movilidad de los alevines.

El consejero ha subrayado el esfuerzo hecho por el Gobierno foral en la recuperación de la población del salmón mediante la producción de alevines en piscifactoría de Oronoz, una práctica mermada en 2022 y 2023 por las obras en el centro que espera volver este año a recuperar una producción de 140.000 huevos

Muestra de los resultados de esta práctica, ha referido, está en que el 21% de salmones que han remontado en 2023 tenían marca de piscifactoría mientras que el 79% han nacido de la producción salvaje.

Aierdi ha subrayado la importancia que tienen para revertir esta situación las medidas de mejora del hábitat mediante la eliminación y permeabilización de obstáculos, eliminación de especies invasoras y recuperación de sotos y riberas, materia en la que Navarra ha invertido un millón de euros en los últimos cuatro años.

Este año, ha informado, los fondos previstos para estas tareas ascienden a 430.000 euros que se suman al millón y medio de euros para el periodo 2024-2026 a través de fondos europeos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia.

Según ha indicado, para este año hay actuaciones ya adjudicadas como el derribo de la presa Electra Olaberria en Leitza con presupuesto de unos 286.500 euros así como la eliminación de un azud y permeabilización del río Udarbe en Anoz con un presupuesto de unos 250.500 euros.

Ha dado cuenta así mismo de otros proyectos en redacción como la permeabilización en la estación de aforo de Elgorriaga y la presa de abastecimiento Aurtitz con presupuesto de 387.000 euros, la demolición del azud de la piscifactoría Arrieta y la demolición azud de Quinto Real.

Ha destacado las acciones recogidas en el proyecto europeo Life Kantauribai 2022-2027 desarrollado conjuntamente por Navarra, Gipuzkoa y Aquitania por el que se busca mejorar la permeabilidad en 55 km de ríos

En 2024 se tiene previsto intervenir a través de esta iniciativa en el molino de Arraioz y la presa de la Serrería de Irurita así como posibilitar la permeabilización en el colector de Urdax y en los vados de Pikatzarrea y Urritzate.