Los países de la Unión Europea (UE) acordaron este sábado, por unanimidad, el ingreso gradual de Rumanía y Bulgaria en el espacio de libre circulación Schengen después de que Austria, el último país de los Veintisiete que se oponía a la medida, levantara su veto.

La decisión implica que, a partir de marzo, se eliminarán los controles en las fronteras interiores aéreas y marítimas con esos dos países -que ingresaron en la UE en 2007-, con el compromiso además de Austria, Bulgaria y Rumanía de acordar más tarde la fecha del fin de los controles terrestres, informó la presidencia española de turno del Consejo de la UE.