El neerlandés Mathieu Van der Poel se mostró feliz en la meta de Glasgow por una victoria que completa su trayectoria como ciclista total, y ya sueña con vestir el maillot arcoíris durante todo un año.

Las heridas de Mathieu Van der Poel en la caída, cuando ya iba escapado en solitario, que podía haberle costado la victoria.

“Esta victoria significa todo para mí. Era uno de los objetivos más grandes que me quedaban, y ganarlo es increíble. Completa mi carrera y es mi mayor victoria en carretera. Todavía no puedo imaginarme usar el arcoíris durante un año”, señaló.

Las heridas de Mathieu Van der Poel en la caída, cuando ya iba escapado en solitario, que podía haberle costado la victoria.

Van der Poel (Kapellen, 28 años), ganó con épica y sufrimiento, pues una caída a 16 km de meta a punto estuvo de impedir un triunfo que ya tenía en el bolsillo en el momento del accidente. “Menos mal que pude seguir después de la caída. Si me hubiera costado el título mundial, no habría podido dormir muchas noches”, dijo.

El neerlandés atacó a 22 kilómetros de la meta, conforme a un plan que establecido. “Sabía que era el momento más difícil de la carrera, me sentía fuerte y vi que el resto estaba en el límite. Cuando nadie podía seguirme, me puse las alas”, comentó.

Tras la caída, y con margen suficiente, Van der Poel no asumió riesgos hasta meta. “No corrí ningún riesgo, en absoluto. En esa curva no pude evitar caerme. Estaba enojado conmigo mismo, pero a veces el suelo estaba muy resbaladizo. Menos mal que no me lesioné de importancia”.

Una victoria que para Van der Poel sirvió de “venganza” por los problemas que sufrió en el Mundial 2022 de Australia, donde tuvo un incidente en un hotel.

Pogacar: “No he disfrutado”

El esloveno Tadej Pogacar, medalla de bronce, reconoció en la meta que no había disfrutado de la prueba, que describió como “una de las más difíciles” de su carrera.

“No he disfrutado de la carrera, ha sido una de las más difíciles que he corrido. Me di cuenta de que Mathieu Van der Poel era demasiado fuerte, pero aún así quería ir por el segundo lugar y traté de ahorrar la mayor cantidad de energía posible para eso. Por eso ya no daba relevos, ocasionalmente me saltaba un turno”, dijo.

Una vez que se destacó Van der Poel el esloveno también comprobó que iba peor que Van Aert y el danés Pedersen. “También me di cuenta de que no era el más fuerte de los tres porque no podía deshacerme de ellos en las subidas. Me quedaba un poco corto. Al final, Van Aert estuvo rápido en las curvas y la plata también se fue. Luego todo por el tercer lugar. Pude vencer a Mads Pedersen con un último salto”.

“Después de un día así, le habría dado el podio, pero había trabajado duro para conseguirlo. Ya no era un esprint real. Todos estábamos muertos. Era el esprint de los cadáveres ambulantes”, comentó.

Evenepoel: “Fue un poco mejor”

El belga Remco Evenepoel se despidió del maillot arcoíris de campeón del mundo señalando la buena carrera de su selección, pero admitiendo que Van der Poel “fue un poco mejor”.

“Disfruté la carrera y no la disfruté. Hice la carrera dura al servicio de Wout van Aert . Nos alternamos en eso y funcionó. Traté de escapar yo mismo, pero luego Pogacar cerró la brecha con todo el grupo a su rueda. Luego no vi mucho del final porque vi las estrellas, tenía las piernas destrozadas”, comentó el ya excampeón mundial.

Aunque el equipo belga controló la carrera durante muchos instantes, a la hora de la verdad les resultó imposible contestar al ataque definitivo de Van der Poel. “Hicimos una buena carrera, pero Mathieu Van der Poel fue un poco mejor. Hubiera preferido ver a Wout como sucesor, aunque Van der Poel, Pedersen y Pogacar son grandes nombres que merecen un título mundial”.

Aranburu: “Se rodó muy rápido”

Alex Aranburu, primer español en Glasgow, en el 19º puesto, destacó la dureza de un Mundial en el que “se rodó muy rápido” y resultó difícil ir delante en un circuito muy técnico y con 45 curvas en cada una de las 10 vueltas.

“Hemos cómodos hasta el parón por la protesta, y luego volando el resto del día. En el circuito igual, las primeras 2 ó 3 vueltas fuimos muy rápidos, el pelotón se cortó en mil pedazos. Tratamos de ir delante, pero cada vuelta se hacía más dura, con los látigos y las arrancadas. A falta de 8 no pude estar delante y me fui a un segundo grupo”, explicó en la meta el guipuzcoano.