Se calcula que más del 48% de los trabajadores en activo en España no disponen de ninguna titulación o acreditación oficial que acredite su experiencia laboral, según datos publicados por el Ministerio de Educación en 2018. Hay diversas razones por las que existe esta falta de acreditación, bien porque muchas personas han adquirido el conocimiento a través del trabajo o bien porque han obtenido una titulación no oficial.

En la actualidad, existen varias formas de obtener este reconocimiento, ya sea a través del sistema educativo tradicional o mediante la acreditación de la experiencia, vía en la que se reconoce y valora las competencias que el trabajador ha desarrollado durante su vida laboral.

La Fundación Laboral de la Construcción de Navarra (FLC-Navarra) es una de las entidades de la Comunidad Foral autorizadas por el Gobierno de Navarra para ofrecer servicios de información, asesoramiento y gestión del proceso para la obtención de estas acreditaciones a través de la experiencia, concretamente las relativas al sector de la construcción y en actividades afines como Edificación y Obra civil; Fabricación y Montaje; e Industrias extractivas.

Emilio Lezana, gerente en Fundación Laboral de la Construcción de Navarra, explica cómo se pueden obtener, así como los beneficios que aporta tanto a nivel personal como de empresa u organización.

¿Por qué es importante apostar por la acreditación de la experiencia?

En Navarra, como en muchas otras comunidades, existe un gran número de personas que desempeñan sus trabajos sin una formación previa o una titulación que avale sus conocimientos, bien porque han iniciado su carrera profesional de forma autodidacta o bien como aprendices. Esta situación provoca que cuando entran en una situación de desempleo o quieren cambiar de empresa, no pueden acreditar sus conocimientos profesionales. Es, por este motivo, que la acreditación de la experiencia se convierten en una opción interesante, ya que permiten avalar los conocimientos adquiridos durante la vida laboral, lo que garantiza una mayor empleabilidad. A su vez, a nivel personal, contribuyen al desarrollo emocional porque reconocen parámetros como la calidad, capacidad y competencia.

Y en el ámbito empresarial, ¿qué beneficios aporta a la empresa que sus empleados estén acreditados o hayan iniciado un proceso de acreditación?

Resulta importante señalar que contratar a trabajadores con certificación profesional garantiza a las empresas que sus empleados poseen las competencias, habilidades y conocimientos necesarios, así como experiencia demostrable, para su trabajo. Esto supone saber que sus empleados serán productivos desde el primer día. De hecho, las empresas que se comprometen con la acreditación profesional de sus empleados, tienen mayores posibilidades de adaptar la compañía a las últimas tendencias del mercado, facilitando el relevo generacional e incorporando las nuevas tecnologías y sistemas de gestión y organización. Además, contribuyen a favorecer la investigación e innovación en nuevos productos, así como incrementar la calidad, realizar cambios de estructura en la organización y contar con trabajadores polivalentes y que sepan adaptarse al cambio. Asimismo, mejoran la satisfacción, motivación laboral, participación y compromiso de los trabajadores. De esta manera, fomenta el sentimiento de pertenencia., por lo que esto se traduce en empleados proactivos. En resumen, se convierten en un activo para la empresa.

La FLC-Navarra es una de las entidades acreditadas por el Dpto. de Educación del Gobierno de Navarra para gestionar este proceso.

Efectivamente, a principios de este año 2023 hemos suscrito un convenio con el departamento de Educación del Gobierno de Navarra. Este acuerdo, cuyo presupuesto está subvencionado con fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), nos marca el objetivo de acreditar la experiencia de 300 trabajadores. En nuestro caso, nuestra formación está dirigida al sector de la construcción, uno de los más afectados por la escasez de mano de obra cualificada y especializada, derivada por el cambio de modelo de negocio del sector, mucho más industrializado y digitalizado. Estas acreditaciones se caracterizan por tener diseños curriculares que constantemente están actualizados, según la demanda del mercado en cada momento, y por su individualidad u flexibilidad.

¿Cuál es exactamente el papel de la Fundación Laboral de la Construcción de Navarra en este proceso?

Desde la FLC, asesoramos y gestionamos el proceso de acreditación de competencias profesionales. Además, como centro de referencia en formación del sector de la construcción, también les orientamos sobre las necesidades formativas complementarias que deben realizar, en el caso de que fuera necesario. Asimismo, ponemos a disposición los medios y recursos propios del centro, así como la experiencia del equipo docente –que son un referente en el sector–, con metodologías innovadoras que favorecen el proceso de aprendizaje.

¿Quién concede los certificados de profesionalidad?

Las Administraciones son las encargadas de expedir este documento acreditativo. Se convocan periódicamente procesos de acreditación en los que es necesario demostrar las habilidades y conocimientos adquiridos en el desarrollo de una actividad profesional. Cada convocatoria se centra en determinados ámbitos profesionales, pudiendo participar en aquella que se ajuste a tu perfil. El certificado tiene carácter oficial y validez en toda España, y además existe la posibilidad de convalidación con los ciclos formativos de formación profesional expedidos por la respectiva administración educativa.

Requisitos

  • Tener nacionalidad española, un certificado de residente comunitario, la tarjeta de familiar de ciudadano de la Unión Europea o ser titular de una autorización de residencia o de residencia y trabajo en España. 
  • Tener 18 años, en el caso de querer acreditar unidades de competencia de nivel 1, o 20 años cumplidos al realizar la inscripción para las unidades de nivel 2 y nivel 3.
  • Cumplir con uno de los siguientes requisitos: Por un lado, demostrar 2 años de experiencia laboral en los últimos 15 años con un mínimo de 1.200 horas trabajadas para unidades de nivel 1 y 3 años de experiencia laboral con un mínimo de 2.000 horas trabajadas para las unidades de competencia de nivel 2 y 3.Por otro lado, haber cursado un mínimo de 200 horas de formación en los últimos 10 años relacionada con las unidades que se quieren acreditar, o 300 horas si esas unidades de competencia son de nivel 2 o nivel 3.