Muchas veces es la propia administración, su incapacidad para responder con agilidad a trámites sencillos, la que limita el crecimiento económico. Lo sufren estos meses algunas empresas navarras, especialmente en el sector del transporte de mercancías, que buscan trabajadores en otros países para paliar la escasez de conductores españoles. Los procesos de contratación, especialmente en América Latina, se están demorando en algunos casos más de seis meses, frenando la expansión de algunas empresas.

El origen del problema hay que buscarlo en la oficina de Extranjería de la Delegación del Gobierno en Navarra, que admite “un retraso acumulado motivado por el progresivo incremento de solicitudes presentadas y por el cada vez menor número de efectivos”, Una combinación –mayor carga de trabajo y menor personal– que se ha repetido en otras instancias administrativas y que terminan por pagar las empresas y los propios ciudadanos.

“El problemas es real”, explica Ignacio Orradre, gerente de la Asociación Navarra de Empresas de Transporte, que tiene que lidiar de forma continua con los problemas de las empresas de un sector donde escasea la mano de obra. “Muchas están buscando trabajadores fuera, porque no encuentran aquí gente dispuesta a viajar”, dice. Si hace unos años llegaron chóferes del Este de Europa, ahora la procedencia más habitual es América del Sur. “Sobre todo de Perú y de Chile, donde los procedimientos de convalidación de los permisos de conducción son más sencillos”, explica. 

De este modo, una vez encontrados los trabajadores, con su documentación y permisos en regla, el trámite llega a la Oficina de Extranjería. Y en esa oficina se queda, por lo menos durante unos meses, y en cualquier tanto mucho más tiempo del deseable para las empresas, cuyos tiempos no son los de la administración. La falta de persona es la explicación oficial. Y tiene que ver ya no tanto con dificultades presupuestarias, sino con los problemas de la administración del Estado para cubrir las plazas vacantes en territorios como Navarra o la Comunidad Autónoma Vasca, donde el coste de la vida es más elevado que en otros territorios. “Si no hay complementos salariales y alquilar una vivienda, por ejemplo, te cuesta mucho más, te encuentras con que nadie quiere venir a trabajar aquí”, dice Orradre, citando la explicación que reciben desde la administración. “Es un mal de las comunidades con mayor renta”,, explica. Decenas de procedimiento se encuentran en estos momentos atascados. 

Otros problemas 

De este modo, la tramitación de los permisos de trabajo y residencia se demora en el tiempo en algunos casos más de seis meses. Y agudiza una escasez de personal que “no va a ir a mejor” en los próximos meses y años. No se trata, dicen los responsables empresariales, de una cuestión de salarios. Sino de “perfil profesional”. No hay gente dispuesta a enfrentarse a largos viajes, en muchas ocasiones solo, trabajando fines de semana y pasando días fuera de casa. La sociedad ha cambiado, señalan.

Existen otros problemas, como el de la seguridad, que también preocupa en ANET. Sobre todo en las zonas de descanso de las autopistas, donde pernoctan muchas noches los conductores. “Hay riesgo de robos, a veces les echan un gas para dormirlos, y esto es un verdadero problema. Estamos insistiendo mucho en que se mejore la seguridad en restas zonas, y somos muy pesados con las administraciones, pero no es fácil...”. 

Camiones parados dos y tres semanas

Extranjería no es el único embudo administrativo para las empresas de transporte de Navarra. La Jefatura de Tráfico comienza a acumular por el mismo motivo –escasez de personal– retrasos relevantes tanto en la celebración de exámenes de conducir, algo que afecta a particulares y a empresas, como a la matriculación de vehículos que, en el caso de los camiones, tienen un coste de unos 120.000 euros. “Tenerlo parado una vez adquirido es perder dinero y se está tardando quince días”, explican desde ANET en referencia a un asunto que ha sido denunciado también por las asociaciones empresariales de Gipuzkoa. “Un camión parado genera un gasto diario de 200 euros”, explican desde Guitrans, que denuncia asimismo el colapso de las plataformas digitales habilitadas para el sector. “Se bloquean y en ocasiones esto conlleva a la pérdida de expedientes”, explica en una nota reciente. 

La DGT, de hecho, ha habilitado un portal propio electrónico para las empresas de transporte de mercancías. “Porque esa es otra, uno llama al 060 y tampoco hay manera de conseguir una cita”, explica Orradre. “Con la digitalización –añade Mikel Barbarin, responsable de Barcargo, una de las empresas afectadas– vemos que la cosa ha ido a peor. Antes te sentabas con un funcionario que te resolvía el problema, ahora no hay manera de lograrlo”.  

Otras medidas

Bajar la edad mínima. ANET plantea bajar la edad de acceso a la profesión, hoy situada en 21 años, a los 18, como el resto de permisos de conducción. La actual “lleva a los jóvenes a elegir otros trabajos”, aseguran. ANET cita asimismo “los estudios previos para ser transportista autónomo y la examinación de alto nivel, con exigencia de Bachillerato”, como otra de las dificultades para encontrar persona. Junto a ello señala que a situación actual es incierta y complicada, no se valora la relevancia social del transporte, los peajes son una amenaza, los costes aumentan y no se facilitan aparcamientos seguros ni áreas de descanso suficientemente equipadas para facilitar la labor de los transportistas, aseguran.