Tras el meritorio empate con ElPozo Murcia en Tudela, el Aspil-Jumpers regresa a la competición con el encuentro que le medirá esta noche en el pabellón Virgen de la Cabeza al Viña Albali Valdepeñas (21.00 horas), un rival que comenzó con mal pie la competición hace un par de semanas, pero que está llamado a copar los puestos altos de la categoría.

Diego Ríos ha viajado con toda la plantilla, una vez que Nacho y Espín se incorporaron a los entrenamientos tras proclamarse campeones de Europa sub-19, y con Anás y Petry ya disponibles tras sus compromisos internacionales con Marruecos y Georgia.

Los riberos necesitarán tirar de todas sus bazas para hacer frente a un Valdepeñas que recibió un varapalo en la primera jornada, con la derrota en la pista del Levante por 3-0, pero que ha confeccionado un plantel de calidad, reforzado esta temporada con los pívots Solano y Abassi –que no jugará hoy–, el cierre Boyis y los alas Claudino y Bynho, este último procedente del Xota.

El técnico del Aspil-Jumpers cree que el inicio errático de su rival le puede llevar a tener “cierta presión” en su estreno en casa, pero a la vez advierte de que el Valdepeñas de David Ramos es un equipo “que tiene que estar arriba y pelear por títulos”. “Creo que ha afianzado una plantilla más amplia. La competición es durísima, como ya se demostró en el inicio, y en cualquier pista puedes perder puntos porque está todo muy igualado”, avisa el gallego.

Con todo, el punto sumado en la primera jornada ante un rival de entidad como ElPozo Murcia le da confianza al Aspil-Jumpers y a un Ríos que se muestra “con muchísimas ganas” de jugar contra Valdepeñas. “Sabemos que es una pista complicada, pero tenemos muy claro nuestro plan de partido para intentar fortalecer las cosas que hacemos bien y para hacer daño al rival donde creemos que tiene debilidades”, asegura.

Un triunfo permitirá al Ribera Navarra no sólo sumar tres puntos, sino romper también la racha negativa con un Valdepeñas que le ganó los dos partidos la pasada temporada.