La Única ha conseguido el gran objetivo que se había propuesto para esta temporada, su permanencia en la División de Honor B, un hito que ha alcanzado a pesar de la derrota que sufrió el pasado sábado ante Gernika, sellando su presencia un año más en la categoría a falta de un último partido para dar por cerrado el curso. El camino a la permanencia no ha sido fácil.

El equipo logró imponerse en la primera vuelta ante el Gijón Rugby Club (72-3), y el AVK Bera Bera RT (33-28) y consiguió el empate contra el Uribealdea (20-20), mientras que en la segunda vuelta se llevó de nuevo la victoria contra el Gijón Rugby Club (0-45), se impuso al AVK Bera Bera RT (12-20) y aún tiene pendiente el partido contra el Uribealdea el próximo 23 de marzo.

El técnico del equipo sénior masculino de La Única Rugby Taldea, Asier Pazos, valora la temporada como positiva, aunque destaca que ha sido “un poco rara” debido a los cambios en el calendario: “Este año terminamos mucho antes”. Pazos destaca que la campaña ha sido buena y han cumplido el gran objetivo que se habían propuesto puesto que “a falta de un partido ya tenemos asegurada la permanencia en la categoría”.

“A nivel interno hemos conseguido generar un hábito de entrenamiento, los jugadores ya han conseguido una consolidación de todo lo que venimos trabajando el año pasado y este, se ha visto mucha mejora en el juego en los partidos, pero todavía nos ha faltado en muchos partidos cerrar bien los encuentros y se nos han escapado algunos puntos ahí”, explica el entrenador de La Única. Respecto a la organización del equipo sénior, La Única está “en torno a las 70 fichas divididas en dos equipos, uno compite en categoría nacional en División de Honor B, mientras que el otro equipo compite en Liga Vasca”.

A pesar de esta división ambos equipos entrenan juntos, algo que La Única implementó el año pasado, y que “a los chicos les ha gustado” porque “todo el mundo hace lo mismo a pesar de que tengan diferentes niveles”. “Intentamos crear grupos de trabajo, porque en muchos aspectos, muchas veces vamos a tener que tirar de gente que por lesiones u otras razones no está acostumbrada a jugar al nivel de División de Honor B, pero tiene que estar preparada para hacerlo”, por lo que al entrenar de esta manera “hemos comprobado que el nivel medio de los jugadores ha subido bastante”.

En cuanto a los entrenamientos, “entrenamos tres días a la semana, martes, jueves y viernes en la UPNA”, y “estamos muy contentos, hay mucha asistencia”. “El equipo de División de Honor B está a un partido de cerrar la temporada con la permanencia asegurada, y el de Liga Vasca está a un pasito de poder jugar la fase de ascenso, que de conseguirlo tendría lugar en el mes de abril”. Los objetivos de cara al año que viene serían sobre todo seguir con la misma metodología e “intentar involucrar a todos los sub18 que pasan a categoría sénior”: “Este año ya hemos notado que su adaptación ha sido muy buena y queremos intentar jugar algún partido con ambas categorías mezcladas”. De cara al último partido de la temporada en la División de Honor B que tendrá lugar el sábado 23 de marzo, Asier Pazos hace un llamamiento para que todo el que quiera acuda a apoyar al equipo que tiene opciones de firmar “una de sus mejores temporadas en cuanto a clasificación” en la UPNA.