Enero es el mes del comienzo del año, de la segunda parte de las Navidades y de las compras compulsivas, pero también es el mes del Dakar y del Rally de Montecarlo. Para los aficionados al mundo del automóvil y de las carreras en particular, enero supone la puesta de largo de las cuatro ruedas a toda velocidad sobre superficies deslizantes, ya sea la nieve del rally más famoso del mundo o la arena de la prueba más exigente del planeta.

Me apasiona la cita de Montecarlo y me cautiva, y también impresiona, la carrera del Dakar, aunque esta segunda, lo confieso, me infunde un profundo respeto y hasta angustia, porque han sido muchos quienes se han dejado en ella la vida y la salud, especialmente sobre dos ruedas –hace unas pocas semanas fallecía el piloto de motocross belga campeón del mundo André Malherbe, que se quedó parapléjico a los 31 años después de sufrir un accidente en el Dakar y estuvo hasta los 66 años postrado en una silla de ruedas-.

La gloria de ganar el Dakar es una tentación a las que pocas marcas de coches y motos se han resistido. Y una que en el pasado sucumbió a la llamada del desierto y que logró imponerse en la prueba entonces verdaderamente africana fue Porsche. Y se ve que todavía sienten morriña de aquellos tiempos pretéritos. Lo decimos porque en el pasado Salón del Automóvil de Los Ángeles la casa germana presentó un modelo singular, rompedor y nostálgico como pocos, el nuevo Porsche 911 Dakar, un vehículo que rememora la victoria de Porsche en el París-Dakar de 1984 y que supuso la incorporación de la tracción a las cuatro ruedas a su gama.

El 911 Dakar se mueve cifras mareantes: 480 CV y 240 km/h para un todoterreno del que se fabricarán 2.500 unidades a 256.042 euros

Con una producción limitada a 2.500 unidades, este Porsche extraordinario como pocos, como su precio de 256.042 euros, presenta una serie de especificaciones inéditas entre las versiones del icónico deportivo. Su distancia libre al suelo 80 milímetros (mm) superior, 50 mm respeto a un 911 Carrera con suspensión deportiva y ampliable otros 30 mm más gracias a la función de serie que eleva el chasis del coche a velocidades entre 0 y 170 km/h; los neumáticos todoterreno Pirelli Scorpion All Terrain Plus (en medidas 245/45 ZR 19 en las ruedas delanteras y 295/40 ZR 20 en las traseras) desarrollados específicamente para el 911 Dakar, o el pack Rallye Design (por 29.729 euros) -que evoca la estética del 911 ganador del Dakar en 1984 con su pintura bitono blanco/azul Gentián metalizada, un número en el lateral del coche que el cliente puede elegir entre el 1 y el 999, las llantas pintadas de blanco, la franja roja de las luces traseras, los asientos tipo backet de serie, el tapizado Race-Tex de serie con costura en verde Shade y los cinturones de seguridad y detalles en color Sharkblue-, son una buena muestra de este modelo irrepetible que nos toca la fibra por su estética nostálgica, pero que llega provisto de las más moderna tecnología de Porsche.

Para su mecánica, colocada sobre el eje posterior, el 911 Dakar ha recurrido al motor de gasolina de seis cilindros opuestos (bóxer) biturbo de tres litros, con 480 CV, 570 Nm, caja de cambios automática secuencial PDK de ocho marchas y tracción a las cuatro ruedas; siendo la velocidad máxima de 240 km/h (limitada por los neumáticos todoterreno) y contando con un paso de 0 a 100 km/h en tan sólo 3,4 segundos.

Como pieza de coleccionista, el 911 Dakar es una mirada al pasado con la tecnología más sofisticada de Porsche

Otras exquisiteces de este irrepetible 911 Dakar son su eje trasero direccional, el sistema PDCC que limita el balanceo de la carrocería, sus modos de conducción (Rallye, con mayor empuje sobre el eje trasero; Offroad, que eleva la carrocería al máximo y mejora la tracción sobre arena y terrenos complicados), el asistente Rallye Launch Control, que aporta una aceleración impresionantes en superficies de escaso agarre y permite un deslizamiento de las ruedas traseras del 20%; el alerón posterior ligero fabricado en fibra de carbono, como la tapa del maletero delantero; las llamativas salidas de aire integradas, herencia del 911 GT3; los enganches para remolque de aluminio rojo en la parte delantera y trasera, los pasos de rueda ensanchados, los elementos de protección de acero inoxidable en el perímetro del coche, las entradas de aire en la rediseñada parte delantera protegidas contra golpes mediante rejillas de acero inoxidable, la toma de corriente de 12 voltios para los faros del portaequipajes opcional y hasta una tienda de campaña de techo como elemento extra. Todo ello en un conjunto, eso sí, sin asientos traseros y con una batería más liviana, que pesa 1.605 kilogramos, apenas diez kilos más que un 911 Carrera GTS con cambio PDK.

Y por si todo esto fuera poco, Porsche ha querido que los afortunados poseedores del 911 Dakar se distingan, y vayan a juego con sus coches, al poder solicitar en exclusiva los relojes Chronograph 1 911 Dakar y Chronograph 1 911 Dakar Rallye, ambos de Porsche Design. Por primera vez, recuerdan, la caja de ambos relojes está fabricada en carburo de titanio ligero, especialmente resistente a los arañazos.