La parroquia de San Ciprian, en la localidad roncalesa de Isaba, retrocedió este domingo ciento cincuenta años transformando su estética, con ausencia total de luz eléctrica, indumentarias que nos trasladaban al siglo XIX, mujeres arrodilladas ante las sepulturas de sus casas desgranando los misterios del rosario y un púlpito que volvió a acoger los sermones de un clérigo que interpeló a las muchachas que ese día se disponían a partir, andando, hasta las fábricas de alpargatas de Maule, al otro lado del Pirineo.

.Grupo de jóvenes “golondrinas” que participó en la recreación. | FOTO: HUALDE

De este forma se iniciaba una jornada de recuerdo y homenaje a las “golondrinas” roncalesas, salacencas y ansotanas que durante casi un siglo, entre 1840 y 1935 aproximadamente, dieron vida a las sendas que unen el Pirineo navarro con el xuberotarra, desplazándose hasta allá a principios de octubre y regresando a finales de mayo.

Una parte del vecindario les acompaña antes de la despedida. | FOTO: HUALDE

Al acto de recreación religiosa en la iglesia le siguió un acto festivo en la Plaza de la Villa en el que no faltaron emotivas palabras de recuerdo a aquellas muchachas con mención expresa a las jóvenes salacencas, a las ansotanas y a las propias roncalesas; esta fiesta incluyó el baile del Ttun-Ttun roncalés y el Axuri Beltza salacenco. En honor y reconocimiento a todas ellas Tere Aguerre bailó la bandera roncalesa apoyada por el grupo de txistularis de Isaba.

Seguidamente las jóvenes alpargateras recorrieron el pueblo deteniéndose cada una de ellas ante su casa en donde recogieron el palo y el hatillo despidiéndose a la vez de sus familias que no se cansaban de darles consejos y recomendaciones. Finalmente, junto a la ermita de Belén, agitando sus pañuelos se despidieron de sus gentes y del pueblo al que supuestamente ya no iban a volver a ver hasta la primavera siguiente.

LAS ALPARGATERAS DEL PIRINEO NAVARRO-ARAGONÉS, HOMENAJEADAS EN ISABA

Ayer, como testigos de excepción, entre el público que acudió de fuera del valle, se hicieron presentes los corporativos municipales de la localidad de Maule, con su alcalde Louis Labadot al frente, además de un público internacional que acudieron atraídos por este homenaje que combina dos temas tan de actualidad como mujer y frontera.

LAS ALPARGATERAS DEL PIRINEO NAVARRO-ARAGONÉS, HOMENAJEADAS EN ISABA

Ana Rosa Ezquer, de la asociación cultural Kurruskla, entidad organizadora de esta jornada que ayer cumplió su sexta edición, manifestaba desde la megafonía, dirigiéndose a aquellas antepasadas que “les decimos lo que probablemente no se les dijo entonces, pues les faltaba a aquellas gentes la perspectiva del tiempo y la valoración del esfuerzo… les decimos que les admiramos, que nos sentimos muy honradas y orgullosas de ser sangre de su sangre, que valoramos ese inmenso esfuerzo que hacían, que les hacía prósperas a ellas, a esta tierra pirenaica, e indirectamente también a nosotras. Les decimos que son nuestra referencia. Les decimos esa palabra mágica cuyo pronunciamiento nos hace grandes a todas y a todos, de corazón, con el corazón: ¡gracias!, eskerrik anitx!”. Ana Rosa Ezquer, nieta de alpargatera, reconocía que una jornada como la que ayer se vivió en Isaba está dirigida a dar y conocer la cultura roncalesa y pirenaica, “pero a la vez queremos sentir que nuestra gente exterioriza el orgullo que sentimos de ser descendientes de una generación que, hoy, desde la distancia en el tiempo no hace sino transmitirnos coraje, valentía y lecciones de vida”.