El País del Bidasoa creció en 137 personas en el último ejercicio y totaliza 22.539 habitantes, con lo que confirma su estancamiento y el hecho de que cuenta con la misma población que hace 30 años, a pesar de que en ese tiempo ha recibido y están empadronados 2.228 inmigrantes.

La comarca lleva un cuarto de siglo sin lograr una tasa mínima de crecimiento y refleja un preocupante envejecimiento de la población, con una media de edad que supera los 44 años en todos los casos. El crecimiento en el año de referencia, el 2022, fue algo mejor que el registrado en 2021 cuando perdió 18 personas y se redujo el 0,08%, pero sigue sin conseguir despegar.

En general, los fallecimientos superan a los nacimientos y la llegada y asentamiento de la población inmigrante es la que ayuda a mantener las cifras. La comarca no consigue cumplir con una necesaria tasa de crecimiento y los datos que se registran son mínimos y practicamente anecdóticos, de un único dígito en la mayor parte de los municipios. De acuerdo con la información facilitada por del Instituto Nacional de Estadística (INE), el incremento fue del 0,60% en 2022, insuficiente para una correcta renovación demográfica.

Doneztebe crece

Por municipios, de los cuatro que cuentan con un mayor número de habitantes, los de Bera (Bortziriak) y Doneztebe (Malerreka) mejoran y otros dos, Lesaka y el Valle de Baztan pierden población. El caso de Doneztebe es el más evidente y destacable en toda la cuenca bidasotarra, ya que lleva tres décadas de crecimiento demográfico contínuo y tiene 1.858 habitantes (913 hombres y 945 mujeres), la cifra más elevada de su historia. Cuenta con 35 más que en 2021 y 570 más que en 1993, año desde el que ha aumentado su población el 30,67%.

En Malerreka, a Doneztebe le favorece su privilegiada ubicación, con excelentes comunicaciones y en pleno eje de la cuenca del Bidasoa, además de que cuenta con una buena red de servicios (delegaciones del Instituto Navarro de Empleo (INEM), de la Seguridad Social y el centro de Salud comarcal), así como una completa dotación educacional y una antigua y sólida tradición comercial.

La localidad de Doneztebe crece con fuerza, gracias a los servicios que ofrece. Ondikol

Hasta ahora, parecía que Doneztebe crecía a costa de sus municipios hermanos de la comarca de Malerreka pe-ro se da el caso de que en 2022 hay varios que han mejorado sus datos de población aunque ciertamente otros siguen en acusado proceso de recesión.

Así, Ituren crece con 17 nuevos habitantes y cuenta ahora con 532 (262 hombres y 270 mujeres), y aunque lentamente no deja de hacerlo desde 1970 cuando tenía 434. Ha mejorado un 20% en ese tiempo. Sin embargo, Elgorriaga tiene 10 menos (ahora 205, 102 hombres y 103 mujeres), otros diez pierde Donamaría (455, 228 hombres y 227 mujeres), Zubieta se deja 4 y tiene 292 (149 hombres, 143 mujeres) y al otro lado del Bidasoa, Sunbilla baja en 5 habitantes y totaliza 672 (344 hombres y 328 mujeres), mientras Ezkurra cuenta con 4 más y totaliza 142 pero con sólo 45 mujeres por el doble de hombres, 97, una proporción llamativa y muy desproporcionada puede decirse.

Bera también

En Bortziriak, Bera obtiene los mejores resultados de la comarca y suma 21 habitantes, totaliza 3.792 (1865 hombres y 1927 mujeres) y vuelve a acercarse a su cota máxima de 2013 cuando llegó a los 3.829 habitantes.

En esta comarca crece también el municipio de Arantza en 18 personas y ahora totaliza 609 habitantes (323 hombres y 286 mujeres), aunque ha perdido 125 desde 1993 y se encuentra lejos de los 1.186 que tuvo en 1950.

Por su parte, Lesaka se dejó 21 habitantes en 2022, una pérdida que triplica los ocho que ganó el año anterior. Ahora cuenta con 2.731 habitantes (1380 hombres, 1351 mujeres), una cifra inferior a los 2.749 que llegó a tener hace 30 años, en 1993.

En los otros dos municipios de Bortziriak, Igantzi perdió once habitantes y cuenta con 572 (305 hombres y 267 mujeres) y suma dos ejercicios perdiendo población. Y Etxalar también suma 3 habitantes y llega a los 833 (441 hombres y 392 mujeres), lleva dos años creciendo pero de una forma mínima. En 1993 contaba con 874 habitantes.

Y Baztan Baja

El Valle de Baztan bajó de los ocho mil habitantes en 2012 (entonces tenía 8.035) y ya no ha vuelto. En 2022 perdió 20 habitantes, 12 en 2021 y suma 7.831 (3.959 hombres y 3.872 mujeres) lo que le traslada a 2014.

En Xareta, los dos municipios, Urdax/Urdazubi y Zugarramurdi mejoran en población sensiblemente. El primero gana 32 habitantes y llega a 362 (183 hombres, 179 mujeres) que es su mejor cifra de los últimos siete años. Y Zugarramurdi suma 29 y totaliza 231 (112 hombres, 119 mujeres) después de unos años en recesión.

A los dos les avalan la mayor pujanza comercial y turística de toda la comarca, en el complejo de las bentak (ventas) de Dantzarinea en Urdax/Urdazubi, y las cuevas del akelarre y el Museo de la Brujería para Zugarramurdi, lo que se refleja en una ausencia casi absoluta de desempleo, ya que en concreto eran seis los parados en la villa de Zugarramurdi y no se contabilizaba ninguno en Urdax/Urdazubi al llegar el último día del año. En general, un resumen no muy optimista ni prometedor.