Este fin de semana se han llevado a cabo en Sakana y Álava unas jornadas para dar a conocer la alternativa que ha desarrollado un equipo de ingenieros además de informar y concienciar a la ciudadanía de cara a la manifestación que han organizado para el 20 de abril en Altsasu las plataformas Navarra por el Tren, Araba Trenaren Alde y Goierriko AHTrik. Mikel Santamaría Rubio, de Altsasu, es uno de los miembros de la plataforma de Navarra.
¿A grandes rasgos, en qué consiste esta alternativa?
–El proyecto que hemos impulsado contempla los tramos Castejón-Pamplona, Pamplona-Vitoria y Vitoria-Burgos. Se demuestra la viabilidad técnico-económica de utilizar los trazados actuales, modernizarlos y adaptarlos para que pueda circular cualquier tipo de vehículo o máquina. En los desplazamientos entre capitales contempla velocidades medias muy parecidas a las previstas en el proyecto del Ministerio. En el caso del trayecto Pamplona-Vitoria el tiempo de viaje sería de 35 minutos frente a los 27 minutos del proyecto de alta velocidad. No tiene sentido semejante gasto económico y afección medioambiental.
El viernes acudieron al Parlamento Navarro y al Parlamento Vasco.
–En el caso de Navarra nos reunimos con parlamentarios de Contigo-Zurekin, EH Bildu, Geroa Bai y UPN. El PSN nos ha emplazado para una reunión entre el 4 y el 8 de marzo. En la Comunidad Autónoma Vasca nos reunimos con PNV, EH Bildu, Podemos y PP. PSN declinó la invitación. El objetivo era volver a poner encima de la mesa esa alternativa, exigir respeto a la voluntad de la ciudadanía de las zonas afectadas por los diseño de tren de alta velocidad exclusivo que propone el Ministerio y que realmente se tenga en cuenta nuestra alternativa antes de ejecutar cualquier otro proyecto, solicitando para ello la paralización de las obras que se están desarrollando.
La conexión con la Y vasca están aún sin definir, con dos propuestas sobre la mesa.
–La propuesta del PSOE es conectar a través de Vitoria con una plataforma completamente paralela a la actual, y la del PNV, Ezkio-Itsaso, perforando Aralar con un túnel de 22 kilómetros, propuestas que llevan años y aún sin decidir. Queremos pensar que se puede llegar a poner un poco de sentido y valorar propuestas similares a la que hacemos, porque no tiene por qué ser la única. Es un estudio que hemos desarrollado con un presupuesto limitado pero todas las mejoras que proponemos vienen respaldadas técnicamente. El Ministerio y los gobiernos tienen capacidad de desarrollar estudios de detalle con más profundidad e incluso mejores que el nuestro, Pero tendrían que ser con el objetivo de maximizar el aprovechamiento de las líneas actuales del tren, tal y como han anunciado, pasará en Logroño o en Teruel.
Hace unos meses, en junio, alertaron de que habían comenzado los sondeos para las obras.
–Llegaron solicitudes en casi todos los pueblos de Navarra afectados por la conexión Pamplona-Vitoria pero no se han ejecutado. Se han encontrado con una fuerte oposición de los ayuntamientos afectados y que sepamos, está paralizado.
Hablan de un tren público y social. ¿Qué modelo proponen?
–Defendemos un tren público y social, cuyo principal objetivo es vertebrar el territorio y dar servicio a la mayoría de ciudadanos y ciudadanas que utilizan el tren de cercanías y medias distancias, en torno al 96% frente al 4% que podría llegar a utilizar la alta velocidad. Es nuestro principal objetivo, además de la reapertura de estaciones y apeaderos que se han cerrado los últimos años.
En las jornadas han participado plataformas de diferentes puntos del Estado, Italia e Iparralde, que contaron su experiencia. ¿La organización y la lucha es importante para parar el TAV?
–EL TAV es un saco roto de dinero. Las obras se comen ingentes cantidades del presupuesto público que van a parar a las grandes constructoras, dejando kilómetros y kilómetros de vías en alta velocidad infrautilizadas y con un gasto de mantenimiento enorme, en torno a los 150.000 euros por kilómetro al año.
Entre otras cuestiones, se abordó el desmantelamiento de las líneas convencionales de ferrocarriles, y en concreto la de Altsasu.
–Un trabajador de Adif de Navarra habló de cómo se están desmantelando las estaciones y los centros de operación. No hay servicios, han dejado morir el tren. No invierten, no se sabe si es una estrategia de denigrarlo para que no se utilice, o que el dinero se destina para la millonada que supone la alta velocidad, en torno al 90% de las inversiones. En el caso de Altsasu se habló de la venta de 200-300 billetes al día hace unos años y que ahora es en torno a un 10%.
Estas jornadas son la antesala de la manifestación que han convocado las tres plataformas para el 20 abril.
–El principal objetivo es que la manifestación del 20 de abril sea multitudinaria, que se nos escuche y se nos tenga en cuenta. Entre tanto se plantea realizar un trabajo a nivel institucional para buscar el apoyo de representantes municipales a título personal. Además de otras iniciativas coomo sacar una revista y otras acciones para seguir informando. l
