Se entrenaron completando la Javierada los dos fines de semana. Y han doblado la apuesta. Si todo sucede según lo previsto, a última hora de este sábado llegarán a Donostia después de una caminata ininterrumpida de unos 100 kilómetros, los que separan Pamplona de la capital guipuzcoana. Con motivo del Día Mundial de la Actividad Física, que se celebra el sábado, Diego Hualde, Rubén Pascual y Carlo Pellicani se han animado con este exigente reto.
En 2019, cuando estudiaba el máster de entrenamiento personal en Granada, Diego ya probó con algo similar. Un Granada-Motril de alrededor de 90 kilómetros. “Desde ese momento tenía la idea de hacer lo mismo, pero con una distancia que me resulta mucho más familiar, porque la familia de mi madre es de Lasarte-Oria”. Los tres pamploneses de 29 años, amigos de la cuadrilla de toda la vida, han hecho unas cuentas “conservadoras, de 4 kilómetros por hora. Vamos por la ruta del Plazaola, que es bastante llana, pero como estaremos toda la noche caminando, con frontales y bien equipados, quizás nuestra velocidad sea un poco inferior. Y hemos calculado una pequeña parada de unos 30 minutos cada 20 kilómetros para descansar un poco y comer algo. Esa es la idea”, destaca Diego. Les salen 27 horas de caminata. “Espero que lo hagamos antes”, confía. Y sabe que “vamos a sufrir muchísimo. En el reto Granada/Motril dimos 115.000 pasos, y a partir de los 80.000 ya íbamos con bastantes molestias. Fue duro”, recuerda.
Hualde, graduado en ciencias de la actividad física y el deporte y autor del libro El mito de adelgazar, retransmite en vivo la experiencia en sus historias de Instagram (@diegohualde). Una red social que abrió justo ahora hace seis años con la intención de fomentar hábitos saludables, “especialmente los de llevar una vida activa y luchar contra la gran epidemia del siglo XXI, el sedentarismo y la obesidad”. Además, en su canal de YouTube, con más de 13.000 suscriptores, también ofrece “entrenamientos gratuitos de unos 20 minutos para poder ponerse en forma desde casa sin apenas material”, reconoce. El reto “es un acto más para recordar la importancia del ejercicio y la actividad física en nuestro día a día para tener una mayor calidad y esperanza de vida”, consideran los jóvenes.
Los tres salieron de Pamplona “convencidos de llegar. Bajo mi experiencia, aunque estés cansado y te duelan mucho los pies, el cuerpo aguanta si eres capaz de controlar la mente y no rendirte”. Para cerrar el reto, lleguen a la hora que lleguen, “la idea es acabar con un baño en la Concha”.
