Jagoba Arrasate, todavía entrenador de Osasuna hasta fin de temporada: veo a mis rojillos de cabecera una migaja desencantados por su anuncio de abandonar el club cuando culmine esta campaña. Conste que todos le tienen ley y que han estado con usted incluso en los momentos menos dulces, que también los ha habido a lo largo de estos seis años. Quizá por eso mismo se han sentido dolidos ante una decisión que no sé muy bien si no esperaban o, simplemente, no deseaban.

Escribiendo a 150 kilómetros, me declaro incompetente para emitir una opinión documentada. Solo puedo decirle que respeto esta decisión como habría respetado la contraria. Creo que, ya no solo al frente de Osasuna sino a lo largo de toda su trayectoria, ha demostrado ser el contrapunto positivo a tanto diosecillo miserable que pulula por el fútbol. Y lo seguirá siendo.