El 24 de noviembre, tras más de un mes de huelga, la Federación de Municipios y Concejos decidió comunicar a los ayuntamientos que pueden vulnerar el derecho a la huelga de las trabajadoras de recepción y control de accesos de gestión deportiva de Navarra. 

Un informe jurídico que no da una derecha, evidentemente, se puede contrarrestar con otro informe jurídico, tal y como indican, o con resoluciones de la autoridad competente o, mejor aún, con los tribunales. 

Si por orden de alcaldía se abre la instalación deportiva para actividades distintas de las correspondientes a las contratadas con las empresas de gestión deportiva. 

- ¿Quién se encarga de la seguridad de los usuarios y de las adecuadas condiciones de salud y salubridad?

- ¿Quién se encarga de salvaguardar las instalaciones municipales, propiedad de toda la ciudadanía? 

¿Y si se producen daños o desgracias con responsabilidad patrimonial? Está claro que los seguros. 

Pero, ¿y si de verdad pasa algo grave? Los próximos contratos tendrán primas mucho más altas, que, por la gracia del señor, lo pagarán los ciudadanos, no nuestros queridos alcaldes y alcaldesas.

Si de verdad tienen interés en solucionar un problema serio como el conflicto de gestión deportiva, que ya afecta de forma considerable al funcionamiento de múltiples instalaciones y a su viabilidad, lo tienen fácil. Exigir y pedir las responsabilidades donde hay que pedirlas, a una patronal incapaz de solucionar un conflicto que lleva un mes de huelga, pero años de avisos de unos trabajadores que se lo merecen todo, pero que se conforman con unas condiciones dignas para seguir trabajando.

*El autor es Responsable de Instalaciones Deportivas de CCOO Navarra