La semana pasada conocimos el quinto cambio en la línea Fitero-Pamplona/Iruña ante la avalancha de quejas de la ciudadanía e instituciones. Pues bien, después de muchos intentos por parte de Berta Miranda de eliminar nuestra conexión con Iruña y hacernos depender del toquerismo tudelano y de la capital de los Meleagris gallopavo domesticus, ahora Castejón reclama ser incluida en esta línea y es que desde Cohesión Territorial prefieren darle un servicio a Alfaro (La Rioja) cuando no necesitan acudir al Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea, trámites y gestiones en Pamplona... en vez de incluir a Castejón (Navarra) en esta línea. 

Desde esta zona llevamos años reclamando la línea Fitero-Cintruénigo-Corella-Castejón-Pamplona/Iruña, una línea para casi 25.000 navarras y navarros en una zona que anualmente crece en casi 600 habitantes. Una línea que no vaya por Alfaro (La Rioja), sino que vaya por Castejón (Navarra) y conecte a los 20.000 habitantes de Fitero, Cintruénigo y Corella con la estación de tren de Castejón y todos sus destinos ferroviarios. 

La unión hace la fuerza y es hora de que Fitero, Cintruénigo, Corella y Castejón se unan para reclamar inversiones e infraestructuras en una zona normalmente olvidada por las instituciones que prefieren mirar hacia las cabeceras de comarca como Tudela, Tafalla, Estella, Pamplona.. dejando atrás al resto de navarras y navarros.

Hoy en día vemos cómo se pone el foco en la despoblación en muchas charlas, sin embargo sólo vemos anuncios de construcción de viviendas en cabeceras de comarca o la creación de nuevos barrios con miles de pisos colmena a precio desorbitado en Pamplona. ¿Y qué pasa con las zonas rurales superpobladas que año a año aumentamos nuestra población rompiendo todas las previsiones y donde es imposible encontrar alquileres o nuevas viviendas? 

Es hora de dejar el centralismo en las cabeceras de comarca y recorrer la geografía navarra más allá de éstas. Por ejemplo todos los autobuses de Pamplona a Corella o a Cintruénigo entran en Tafalla a la vuelta para no coger ni dejar a nadie, sin embargo se pierden casi 20 minutos recorriendo todo el centro de Tafalla con el tráfico que ello conlleva y aumentándolo con nuestro servicio de bus. Si nuestros polític@s tuvieran la obligación de desplazarse en transporte público y ver la precariedad del sistema otro gallo cantaría en la movilidad de Nafarroa. Por un transporte público digno para toda la población, no solo para las personas privilegiadas de las cabeceras de comarca.