Enero de 2021. Osasuna es penúltimo clasificado, a tres puntos de la permanencia, y Braulio Vázquez ratifica en rueda de prensa a Jagoba Arrasate. Dos años después, el técnico, que renovó su contrato hasta 2024, tiene al equipo en semifinales de Copa del Rey y en una posición privilegiada en liga. Todo ello, lo analiza el preparador de Berriatua en una entrevista concedida con Relevo. “Aquí nos ha encantado siempre un mismo fútbol, con el que hemos crecido todos y con el que me identifico. El Sadar lo vive de una forma especial”, apunta el técnico.

Osasuna se quedó con 10 jugadores ante el Espanyol después de que Arrasate respondiera a cómo plantear un partido con un hombre menos porque “depende mucho del contexto del partido, no es lo mismo ir ganando que empatando o perdiendo. Lo sencillo es jugar en 4-4-1; si necesitamos un gol, un 4-3-2. En 5-3-1 sujetamos un resultado”.

El preparador afirma que en el fútbol no hay que “morir” con una idea, sino “sobrevivir”. Aquí “estuvimos 13 jornadas seguidas sin ganar y cuando esto pasa es por un montón de cosas: porque te equivocas, por lesiones, por mala suerte. Depende un poco de ti el poder cambiar esta inercia”, expone, antes de recordar la viral rueda de prensa del director deportivo. “Sentía que Braulio no solo creía en mí como entrenador, sino también como persona porque veía cómo era el durante la semana y creía que eso iba a salir bien. En ese momento ese mensaje sirve para cerrar filas, te reafirma de cara al vestuario”, agrega.

En el apartado de nombres propios, Arrasate reconoce que el cambio de posición del Chimy se da porque “no se sentía cómodo fijando a los centrales”; de Aimar que “en pretemporada le vimos preparado” y que junto con Moi Gómez “han sido claves para mejorar nuestro juego interior y defendemos más con balón”. En cuanto a David García, el entrenador se deshace en elogios hacia un jugador “diferencial. El rendimiento que está dando es espectacular, pero es que cree mucho en nuestra idea, es súper valiente, siempre le veréis apretar en campo rival, atento a las vigilancias y si nos superan se maneja muy bien en su área, ahí es también de los mejores. Con las ausencias de Oier o Roberto él ha cogido también mucho peso a nivel de liderazgo, porque es de la casa y nuestro capitán”.

Por último, el vizcaíno reconoce que su miedo es tocar techo porque “tenemos la sensación de que cada año tenemos mejor equipo, Braulio se mueve muy bien. Muchas veces lo hablamos y decimos, joder, ¿Cómo mejoramos? Porque el siguiente paso es muy difícil, no podemos entrar en una puja, entonces ¿No podemos crecer más? Este es nuestro debate, somos muy inconformistas. Llega un momento en el que ves el techo cerca, tenemos Tajonar, que es nuestro mejor activo, pero no saldrán buenas generaciones cada año. Sí, el techo lo vemos cerca, pero este año ya lo hemos hecho y ya estamos pensando en el siguiente. Lo podemos oler, pero no sé si es que no lo queremos ver, pero tenemos esa ilusión de que el año que viene tendremos un equipo un poquito mejor”.