Deshojó la margarita mientras dudaba si llevar una pancarta pidiéndole a su ídolo Thibaut Courtois los guantes y acabó llevándoselos a casa, en el que fue el mejor regalo de cumpleaños de Martín Echarri, portero de 16 años del cadete del Corellano

“Si te digo la verdad, salí de casa dudando de si llevarme el cartel o no porque no estaba nada convencido de que me los pudiera dar y tuve suerte. Me vio el primero, y me los quiso dar”, rememora el cancerbero. La afición por estar bajo palos le viene de familia. “Mi padre era portero. Yo empecé hace relativamente poco. Como mi padre fue portero, me empezó a gustar y ahora me encanta. Hay veces que no se reconoce evitar un gol, pero es una sensación que a mí me encanta”, asegura.

Martín Echarri posa con los guantes de Courtois. Cedida

No le pudo salir mejor la jugada a Martín. Fue a El Sadar de sorpresa, por regalo de cumpleaños a ver a su Real Madrid, equipo del que es fan “desde pequeño. Soy portero y me han gustado los porteros del Madrid. A mi padre le gustaba mucho Paco Buyo y a mí Casillas y Courtois. Como se me dio la oportunidad de ir a ver el partido gracias a Félix, un amigo de mi madre, acabé llevando la pancarta”.

Martín Echarri reconoce que su premio fue resultado de la labor de mucha gente. “En el calentamiento me hizo okey varias veces y la gente de alrededor decía “¡que te los va a dar!” y yo estaba nervioso. Cuando vino ni me lo creía, la verdad. Todo el mundo me felicitaba, me daba la enhorabuena por haber conseguido los guantes. Me ayudaron mucho los que estaban a mi alrededor”, asegura, antes de relatar cómo fue el intercambio. “Le di las gracias, nos cambiamos los guantes y se fue rápido a cambiarse. Se llevó los míos y se rió. No le cabían. Tiene una pedazo mano, buah”, alucinaba, mientras desvela que ahora buscará un hueco en su estantería para colocarlos, al tiempo que añade que “los saqué cuando me los dio, los miré y los guardé rápido por si acaso. Agarré la mochila, y en el viaje de vuelta me los probé”. 

El joven portero reconoce que ve los partidos “para disfrutar, pero me gusta fijarme en los porteros. También veo los resúmenes de las mejores paradas”, y, en cuanto al partido, admite que “me quedé muy sorprendido con Camavinga y Valverde, que son unas bestias. Me gustó muchísimo, estaba muy reñido, y hasta el final no marcó el Real Madrid los dos goles. Me fui muy contento”.

En la portería en la que se sentó Martín Echarri también vio una buena parada de “Sergio Herrera, ante Vinicius, que estuvo muy bien”, pero se decanta por el belga. “Courtois me parece el mejor portero que hay en el planeta”, declara, antes de bromear que no piensa sacar los guantes de su cuarto y que, el que quiera verlos “tendrá que venir a casa. De aquí no salen”.