La sociedad navarra respondió la llamada de Saray y llenó las calles de Pamplona en la XII Edición de la Carrera Solidaria Contra el Cáncer de Mama. Con la Plaza del Castillo como epicentro de la fiesta, miles de personas acudieron a reivindicar la necesidad de aumentar la investigación en la cura y en los tratamientos del cáncer de mama, y mostrar su solidaridad y apoyo con las personas que estén sufriendo y hayan sufrido esta enfermedad.

Tras el éxito del año pasado en el que alcanzaron la cifra de 10.000 dorsales Saray había aumentado las expectativas y confiaban es sobrepasar esa cifra, para lo que sacaron a la venta 12.000 dorsales, de los cuales se vendieron 11.500. “Estamos muy contentas. Navarra se vuelva cada año y el apoyo que recibimos es impresionante”, declaró Carolina Huarte, trabajadora social de Saray, al hacer valoración de la mañana. Gracias a la alta participación la asociación pudo recaudar más de 90.000 euros que serán destinados de manera íntegra a proyectos de investigación contra el cáncer de mama. 

Un grupo de mujeres posa con el cartel que realizaron estudiantes de Isterria en apoyo a Saray. Patxi Cascante

A partir de las 10.00 horas llegaron a la Plaza de Castillo las primeras camisetas rosas, a pesar de que la carrera comenzase una hora más tarde. La celebración no consistió solo en la prueba deportiva sino que Saray organizó todo una fiesta alrededor de ella. Contaron con hinchables para los txikis, música, actuación de zumba y puestos donde se podían comprar bolsas, camisetas, pañuelos o pines para colaborar con la asociación. También hubo algunos rezagados que adquirieron su dorsal momentos antes del comienzo de la carrera, junto a quien lo había reservado por internet. Otra de las formas de recaudación fue el sorteo para el que vendieron casi 15.000 boletos y el que los participantes optaban a ganar 276 premios distintos aportados por más de 50 locales y empresas navarras. 

En los momentos previos a la salida una de las integrantes de Saray dio un pequeño discurso en el que animó a todo el mundo a “correr o andar con fuerza en apoyo a quien padece la enfermedad, a quien la ha superado y a quien no pudo vencerla. A vuestro lado tendréis a alguien que tenga relación con esta enfermedad, mirar arriba, abrazaos y quereos mucho. Disfrutad de la vida que es una y es nuestra”. 

Miles de personas, entre ellas muchas familias, completaron el recorrido andando. Patxi Cascante

A las 11.00 horas, tras la actuación del grupo de baile Arkadia de Barañáin, la presidenta de Saray, María José Oraa, cortó la cinta y dio comienzo a la carrera. El circuito recorrió la avenida Carlos III, Merindades, Baja Navarra, Yanguas y Miranda, Vuelta del Castillo, Pío XII, Bosquecillo, Taconera, Portal Nuevo, Virgen de la O, Mayor, Consistorial, Mercaderes, Estafeta y de nuevo Plaza del Castillo. Los primeros en tomar la salida fueron los niños y sus padres con bicicletas y patines, seguidos por un grupo de moteros y después los miles de participantes, todos ellos con la camiseta rosa de Saray haciendo honor a la ‘marea rosa’. Durante todo el recorrido así como el meta se colocaron varios puntos de avituallamiento para los que contaron con más de 100 voluntarios. Entre ellos, 35 estudiantes del colegio Navarro Villoslada que colabora en esta cita de Saray todos los años. Oraa explicó que el tiempo no les ayudó a conseguir su objetivo ya que “con este tiempo no apetece salir de casa ni para comprar los dorsales”. Sin embargo, consiguieron convocar a 1.500 personas más que el año pasado por lo afirmó que estaban “muy contentas y satisfechas” ya que pudieron poner “un broche final perfecto a un mes lleno de emociones”.

El tumor más diagnosticado

El cáncer constituye una de las principales causa de morbi-mortalidad a nivel mundial y el cáncer de mama es el tumor más diagnosticado del mundo, la probabilidad de desarrollarlo siendo mujer es de una de cada ocho. En Navarra se diagnostican al año una media de 410 casos de cáncer de mama al año y a nivel estatal se eleva a 34.000. Yaki Hernández, gerente de Saray señaló que “no ha habido un gran aumento respecto al año pasado, pero la incidencia sigue subiendo y se espera que continué la tendencia durante los próximos años”. A pesar de la subida, “la tasa de mortalidad sigue bajando” y sitúa la tasa de supervivencia por encima del 85%. Este tumor suele aparecer entre los 35 y los 80 años aunque la franja con mayor incidencia es de 45 a 65 años. “Lo preocupante es que en el 6% de los diagnósticos ya debuta con metástasis y que el 20%-30% de las pacientes desarrollará un cáncer de mama metastásico”, declaró la presidenta en un rueda de prensa previa. 

Momento de la salida de la carrera, mientras se forma una gran cola de espera en la Plaza del Castillo.

Momento de la salida de la carrera, mientras se forma una gran cola de espera en la Plaza del Castillo. Patxi Cascante

Saray lleva desde 1996 luchando por visibilizar y sensibilizar a la sociedad de esta enfermedad y ha organizado ya doce ediciones de esta Carrera Solidaria en las que ha recaudado más de 480.000 euros en total para poder destinarlos a proyectos de investigación contra el cáncer de mama. Con las aportaciones recogidas ayer, Saray podrá seguir apostando por la investigación y acompañando a pacientes y sus familias.

“El cáncer de mama es una enfermedad que está al lado y nos toca a casi todos”

Sandra y Cheli son pacientes de cáncer de mama y acudieron juntas a la carrera.

La Carrera Contra el Cáncer de Mama es una cita que reúne a miles de personas cada año de distintos puntos de navarra unidas por una misma causa. Entre los 11.500 participantes hubo quien la afrontó como un reto deportivo aunque lo que une a tanta gente son las ganas de colaborar y de sensibilizar sobre una enfermedad. La mayoría de gente completó el recorrido andando, mientras daba un paseo por el centro de la capital navarra, aunque también hubo quien participó en bicicleta, patines o patinete y también acompañados de sus mascotas. 

Cheli, de 63 años, y Sandra, de 34 años, son pacientes de cáncer de mama y acudieron juntas a la carrera. “Es la tía de mi novio, así nos hemos conocido. Ella viene siempre y para mí es la primera”, contó Sandra mientras Cheli contemplaba emocionada cómo se llenaba de gente de la Plaza del Castillo. “Tienes muchos sentimientos encontrados. Ver tanto cariño de la gente es muy emocionante”, comentaba mientras se le entrecortaba la voz de la emoción. Ambas pasaron por una operación de corazón por lo que completaron el recorrido andando. A Cheli le faltaban las palabras para explicar, como paciente, qué se siente al ver miles de personas apoyándote y concluyó sin muchas palabras pero con mucho significado: “se siente todo”.

Javier Sánchez ha participado por primera vez este año.

También participó por primera vez Javier Sánchez, vecino de Barañaín de 30 años, a quien le sorprendió “lo bien que está organizado, hay muchas más cosas a parte de la carrera en sí”. Javier conocía la carrera de años anteriores pero no se había animado a participar. Este año en cambio, la hermana de un amigo suyo ha sido diagnosticada con esta enfermedad y ha decidido acudir. “Hay que reclamar a los políticos que inviertan más en investigación y nosotros tenemos que contribuir en lo que podamos”, declaró mientras calentaba con unos amigos dando vueltas a la Plaza del Castillo. Lucía Moreno, de 18 años, participó por primera vez animada por su amiga quien contó que su madre padeció cáncer de mama y desde entonces es una tradición instaurada y acude todos los años. 

El número de casos de cáncer de mama aumentó un 12% desde 2015 a 2022, por lo que “desgraciadamente, muchos conocemos a alguien que ha luchado o lucha contra esta enfermedad”, comentó Alfonso Sáenz, de 70 años, quien acude todos los años a la carrera porque “tenemos que hacer todo lo que podamos”. Alejandra Gómez, de 46 años, también incidió en lo común de esta enfermedad y aseguró que “es una situación que nos repercute a todo el mundo,. Es una enfermedad que está al lado y nos toca a casi todos”. Alejandra también pertenece al amplio grupo de personas fieles a la cita y, tras tantos años acudiendo, destaca “el buen ambiente que hay siempre. La gente se implica muchísimo y cada año va a más, animaría a todo el mundo a venir”. 

Arantza Sarabia ha acudido por tercer año con su hija Candela Ramírez

El principal inconveniente que tuvieron que hacer frente los participantes fue el tiempo nublado y con grandes rachas de viento que no pasó de los 17 grados. Estas condiciones causan muchos resfriados típicos de estas fechas. Fue el caso de Pablo Alfaro, de 19 años, quien contó entre risas que realizó la carrera “con mocos y me he ahogado un poco”. Sin embargo, a pesar no estar al cien por cien de salud no faltó a la convocatoria acompañado de su familia convencido de su buena labor y de que “todo ayuda”. Carlos Sada, de 19 años, suele participar con sus compañeros del club de atletismo y dijo convencido al acabar la carrera que “es un movimiento social muy bonito que da voz a toda la labor que hace Saray”.

Iván e Iker Catalán, padre e hijo, antes de comenzar la carrera

Todos los asistentes coincidieron en el buen ambiente. Una vecina de Pamplona destacó “el compañerismo que hay siempre en esta carrera. Un par de chicas se han tropezado y se han caído y todo el mundo se ha parado para ayudarlas y asegurarse que estaban bien”. Tras doce ediciones, el animo de solidaridad se mantiene intacto, por lo que muchos padres y madres deciden acudir con sus hijos. Por ejemplo, Arantza Sarabia, de 46 años, participó ayer por tercera vez junto a su hija Candela Rámirez, de 11 años, ya que, tienen personas cercanas que han padecido la enfermedad y “es una oportunidad para apoyar los valores de esta carrera, que son muy buenos para inculcar”. También Iván Catalán, de 48 años, acudió con su hijo Iker, de 12 años, y explicó que “ mi hijo tenía muchas ganas y cuando fui a por el dorsal y me dijo que le cogiese a él también”.