"La coalición IU-Batzarre va a ser un revulsivo importante y necesario para la izquierda navarra"

Pamplona. José Miguel Nuin apuesta por una colaboración con Batzarre que, sostiene, será "un revulsivo" para la izquierda en la Comunidad Foral. "Todavía estamos en proceso de trabajo, y nos hemos dado el mes de noviembre para culminar la negociación", matiza el líder de Izquierda Unida en Navarra, que insiste en que "la última palabra la tendrán las bases", los de Batzarre en una consulta abierta a sus simpatizantes, y los de IUN en el Consejo Político que tendrá lugar el 27 de noviembre.

¿Cómo se va a articular la colaboración institucional con Batzarre?

A través de una coalición electoral, que tendrá unos objetivos políticos y unas bases de funcionamiento.

¿Estarían dispuestos a cederle el segundo puesto al Parlamento?

Tendrá que haber una presencia suficiente y real de las dos partes. Pero todavía hay que esperar. De momento, nuestro objetivo es presentarnos al Parlamento, en Tudela y en Pamplona, con vocación de extender el acuerdo al resto de candidaturas municipales, aunque teniendo en cuenta la situación concreta de cada lugar. El reparto de puestos se hará más adelante.

¿Cree que Batzarre tenía decidido hace tiempo dejar NaBai?

Eso lo tendrán que decir ellos, pero me parece que es fruto de un proceso de reflexión política sobre la situación de Navarra. Aunque los meses anteriores ha habido contactos discretos, que tampoco hemos ocultado, las negociaciones para una posible coalición han empezado ahora.

¿Será una colaboración puntual o con recorrido de futuro?

Es una coalición para un proceso electoral. Estamos pensado hacer una convención programática en la que se concretará la oferta electoral, y los cargos públicos estarán sujetos a ese compromiso. Si finalmente se conforma, habrá un funcionamiento cohesionado y coherente con el programa. Pero es una coalición, no una formación política nueva.

¿Bajo qué parámetros políticos?

Queremos presentar una propuesta de izquierdas, con una agenda basada en la defensa de los derechos sociales y laborales, de lo público, y de lucha contra la crisis y el paro. Será el elemento central de la propuesta. Y junto a ello, de forma muy importante, plantearemos propuestas abiertas y plurales que recojan la diversidad de identidades, la defensa de la pluralidad, de la cultura, y del euskera.

Suena a la propuesta de NaBai.

Dudo que sea la oferta de NaBai en 2011. Lo pudo ser en 2007, pero sus propios responsables dicen que la NaBai de 2007 ha muerto. El PNV fue cómplice decisivo en la reforma laboral, y esa es una contradicción letal con el discurso de izquierdas. Y EA ha firmado un acuerdo estratégico con Batasuna para hacer políticas de construcción nacional. La NaBai que están alumbrando ahora es muy diferente a la de 2007.

¿La coalición con Batzarre es el flotador que necesitaba IU?

Más que para IU, la aparición un polo de izquierdas en el que esté IU, esté Batzarre y también otras personas que puedan compartir los objetivos políticos y programáticos. es importante para la sociedad. Supondrá un revulsivo para la izquierda navarra muy necesario en estos momentos, en el que es fundamental contar con instrumentos potentes para defender el sistema público y los derechos sociales y laborales, que están siendo atacados. Hace falta un mecanismo potente que defienda estos elementos, y en Navarra lo puede ser el polo de izquierdas. Ni NaBai ni el PSN lo son.

¿A quién se dirige cuando habla de nuevas incorporaciones?

Se trata de conformar una coalición con IU, con Batzarre y gente de izquierdas que tiene clara la defensa de lo social y de la pluralidad. Estaremos abiertos a quien quiera participar.

¿El candidato lo designará IU?

Se designará en función de los criterios que pactemos en la coalición.

Entonces, ¿es pronto para decir que José Miguel Nuin va a ser el cartel electoral?

Sí, es pronto. Es una opción más.

¿Sigue pensando que el cambio en Navarra es posible?

Es posible y cada día más necesario. No hay más que ver los datos de paro. Ya estamos en el 12,5%. La situación requiere que las propuestas de la izquierda tengan una capacidad de incidencia más fuerte, y eso pasa por desalojar a la derecha del poder.

¿Y cómo se articula si, como usted dice, NaBai y PSN están más lejos que nunca del cambio?

Fortaleciendo a la izquierda. Así, los que se están alejando del programa social estarán obligados a hacer una reflexión.

Pero, con todos los respetos, no parece que IU, con dos parlamentarios, vaya a ser quien garantice el cambio.

Lo que IU pretende, o en su caso, el polo de izquierdas, es ser el referente de la izquierda en Navarra. Y claro que vamos a ofrecer el cambio. Si no, ¿quién es el referente? ¿El PSOE, que ha dejado olvidado en un cajón su programa social? ¿NaBai es un referente de izquierdas? Vamos a dirigirnos a la sociedad para decirle que fortaleciendo un polo de izquierdas fortalece el cambio de izquierdas en Navarra.

¿La culpa del paro es del Gobierno foral o de una crisis internacional?

La culpa es una crisis económica muy profunda, que es internacional y que tiene su origen en el sistema capitalista. Pero los gobiernos también son corresponsables.

Sin embargo, parece que las políticas macroeconómicas vienen impuestas por el poder económico, y los gobiernos poco pueden hacer.

La responsabilidad recae en los gobiernos del PSOE, del PP, de UPN y también del nacionalismo de derechas. Se han hecho unas políticas que han impulsado un modelo de crecimiento con pies de barro. Terreno inestable, endeudamiento y consumo masivo, burbujas especulativas... y no se hizo nada.

Pero es cierto, como subrayaba Sanz en el último debate de la comunidad, que Navarra está mejor que el resto de comunidades.

Navarra tiene una estructura económica y un peso industrial que le hace soportar mejor la crisis. Pero, pese a todo, hemos pasado del 4% al 12,5% del paro en menos de tres años. Eso demuestra que la crisis sí va con Navarra, y que no pasa del Ebro para abajo, como a veces se desprende del discurso oficial. Y eso que hemos tenido la fortuna de que una empresa emblemática como Volkswagen ha funcionado bien, en buena medida por el papel de los sindicatos de clase, especialmente el de CCOO.

¿Cree que los sindicatos mantienen su influencia social?

Sin duda. Se vio el 29-S.

La huelga general solamente paralizó la industria, y la respuesta no fue tan masiva como se esperaba.

La respuesta fue muy importante, y no sólo en la industria. Hay unos ataques injustos, duros y muy interesados de la derecha política y económica contra el sindicalismo porque es un elemento de primera magnitud. Pero los sindicatos son organizaciones imprescindibles.

¿No están demasiado cerca del poder, y muy dependiente de subvenciones públicas?

No, y rechazo que sea un sindicalismo domesticado, como dicen algunos. El sindicalismo combina la negociación con la movilización para defender a los trabajadores. Eso no les exime de críticas, pero tampoco se puede cuestionar su papel en la defensa de los trabajadores.

¿Se ha leído el Plan Moderna?

Sí.

¿Antes o después de que lo aprobara el Parlamento?

Antes. El resumen que fue debatido en el Parlamento lo estuvimos viendo aquí.

Se lo pregunto porque tres días después de la huelga general UGT y CCOO respaldaban junto a la patronal y el Gobierno un modelo de crecimiento que planteaba la supresión del carácter vitalicio de los funcionarios.

Sí, pero ya han dicho que si ese elemento no se retira, retirarán su apoyo al plan.

Ahora que se ha hecho público.

Ese fue un elemento introducido por algún listo en una mesa de debate a última hora. Pero no hay que confundir las cosas. Alguien ha colado cuestiones impresentables que son rechazables, y los sindicatos ya han exigido su retirada.

Llama la atención que ninguno de los firmantes se diera cuenta, y que todos lo apoyarán con efusividad.

Porque fue algo que se introdujo a última hora a ver si colaba. Pero los sindicatos han dejado claro que por ahí no van a pasar. Y a mí me parece bien.

¿Qué le parecen los Presupuestos?

Ya lo ha dicho el CES, son unos Presupuestos que van a añadir más crisis a la crisis y más paro al paro. Hasta Obama está haciendo una política de sostenimiento de la actividad económica mediante el estímulo del gasto y la inversión pública. Pero aquí se da la consigna contraria, restringir el gasto para atajar el déficit público.

El dinero es el que hay.

Porque así se quiere. Los Presupuestos no son sólo una forma de hacer políticas sociales. También son un instrumento para sostener o deprimir la actividad económica. Y hay alternativas. La reforma fiscal por ejemplo.

¿Qué tipo de reforma fiscal?

Hacen falta políticas que construyan un estado de bienestar, las que antes hacía la socialdemocracia. Cualquier trabajador tiene un tipo impositivo mayor que el Banco Santander, que este año ha ganado 6.000 millones de euros. Hace falta una reforma fiscal para que el Banco Santander tribute al 30% y no al 10%. Es así como hay que atajar el déficit, y no reduciendo el gasto social.

¿No es demagógico decir que los ricos no pagan impuestos?

Es que es verdad, en este país los ricos no pagan impuestos. Aquí pagan el consumidor, el trabajador y el pequeño empresario. Son los que sostienen la estructura fiscal. Se ha suprimido el Impuesto del Patrimonio, y los grandes beneficios empresariales apenas tributan. No es demagógico, es real.

¿Ve posible modificar el Presupuesto en el trámite de enmiendas? El PSN parece más reacio que otros años a apoyar al Gobierno.

Este Presupuesto es incorregible con las enmiendas parciales. Si aceptamos entrar al déficit sólo desde la perspectiva el gasto, que es lo que acepta el PSN, sólo queda corregir algunos elementos sangrantes. Y lo haremos. Pero el gran debate debe ser la política fiscal, y es ahí donde no quiere entrar el PSN.

¿Qué sabor le deja esta legislatura?

Ha sido una oportunidad perdida. La derecha ha seguido aplicando sus políticas pese a que no tiene mayoría. Y la responsabilidad es de quien es. Pero agua pasada no mueve molino. Hay que mirar al futuro.

¿La desmovilización social es el principal rival del cambio?

Si se instala la resignación y la idea de que no hay alternativa, sin duda. Por eso vamos a luchar por cambiar las cosas. Luchar siempre ha sido rentable. Vamos a combatir con propuestas, con ganas y con ilusión porque estamos convencidos de que la sociedad navarra quiere un cambio.